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PÁGINAS LISTRADAS 115 a. Quien en de monedas Ligunas, teme.
razona sobre udieran sobre Tprendido, no pasa frente a ocuparse de si si está disciplicierto quienes iños nacen con enes aseguran tendencias al conducen la a herencia en inientos. Ló.
bos gérnenes mayor o menor or o menor te. almacenados una educación ropiamente di de hacer pre absolutamen.
ente derechos, lo uno a lo lerá en mucho, aallo, y veces enciada por la Ees.
ena educación Ermenes de las desarrollar y de las inclinenolar los actos las manifestarar a que los nerosas se conpedir que las perversas se Para corregir, es preciso conocer; y pa. lo hemos dicho ya, es hipócrita; la ra conocer, es preciso observar. Se presencia del maestro es el corcho que instruye experimentalmente y experi impide el derraine de sus pasiones.
mentalmente debe moralizarse. Sólo Mientras inás liberal sea la disciplina, mediante la observación constante el conocimiento será más perfecto, y inteligente de todos los actos del edu nuestra labor educativa más atinada.
cando, aún de los más insignificantes, Es sólo bajo el palio inmenso de la que es, dice Rousseau, en las peque libertad, donde se conoce al niño, neces donde se revela el alma del ni. dor. de se conoce al hombre y donde ño, podremos conocer sus instintos se conoce los pueblos!
influir de manera eficiente en su fatu Hay una cantidad de hechos, en ro moral.
apariencia insignificantes, que el maesLa obra educativa comienza en el tro no repara o no explota, quedando hogar y la acción de éste sobre el ni por tanto sin el correctivo consiguienno es de un valor inapreciable; el ho te, y una cantidad de acciones sencigar ejerce su influencia buena o mala Nas, pero que revelan nobleza de en un corazón exquisitamente mode sentimientos, rectitud de miras, espí.
lable; por eso su influjo, que se conti ritu de iniciativa, que tampoco se núa ejerciendo en el período escolar y explotan, ni siquiera se advierten.
aún en el post escolar, es veces Pero muy deficiente sería la obra edudecisivo.
cativa si el maestro se conformara con Cuando el niño llega la escuela, explotar únicamente las manifestaciolos gérmenes heredados tiener. ya nes reveladas al azar; es preciso crear tallo; de ahí que la obra de la escuela ocasiones, inventar circunstancias, posea fácil dificil según la naturaleza ner los niños al frente de dificultades del ambiente del hogar; veces es una para ver cómo las salvan; apliquemos labor compleja de destrucción y edi estímulos fin de que surjan actividaficación; veces es una labor de sim des. Aprovechemos todo para hacer ple continuación.
una experiencia nueva.
Observemos al niño en todas partes: Las buenas lecturas son de gran en el aula, en el patio, en los recreos, valor educativo: ellas contribuyen en las escursiones observemos lo que afianzar en la conciencia del niño las hace en sus juegos y lo que dice en exquisiteces de la bondad y del deber; los corrillos; provoquemos su confian.
pero la educación moral, como la inszy, para que nos abra las ventanas del trucción, debe entrar por los ojos, pri alma y nos diga lo que le agrada y lo mero que por los oídos.
que le repugna; lo que piensa y lo que El ejemplo tiene un poder educati.
quiere; investigtemos lo que hace en vo admirable; el niño tien le imitar su casa, poniéndonos frecuentemente todo lo que ve y oye; y entre sus al habla con el padre y con la maclre, principales inodelos figura el maestro, con el hermano y con la hermana. quien debe ser un inanantial de virtuRecojamos, y explotemos previo aná. des: modelo de orden y corrección: lisis las observaciones hechas, así las de respeto y de obediencia racional: buenas como las malas: las primeras de puntualidad y amor al trabajo; de para atraerles imitadores y las segun perseverancia y altivez. El ejemplo das para conquistarles enemigos. del maestro en la escuela y fuera de No juzguemos jamás al niño por lo ella, así como el de los demás miemque revela en el aula; dentro de ella, bros del personal, forman un segundo las tendencias por el medio?

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