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cuan: וורגנSa 35 en vez de imponerle castigos, mire el modo de andar de los maestros.
maestro hacia adentro, hacia sí mismo Cuánta influencia tendrán sobre ellos y armándose de un infinito amor el conjunto de virtudes o vicios de hacia los tiernos niños, que la solicitud sus maestros, es ircalcalable.
paternal le ha confiado, mire con Si las acciones del maestro tienen juicio sereno si el defecto no está en una grande influencia sobre el desaél mismo, si ha sabido no adaptarse Trollo moral del niño, el efecto de la la naturaleza móvil, pero lógica en palabra, modo más común de comuextremo de los niños. Suplir con el nicar el pensamiento, es de una inrigor lo que puede faltar de capacida fluencia mucho mayor. La palabra des mentales, morales pedagógicas del maestro debe ser siempre dulce, es inhumano inicuo. Conozco mu. siempre noble y tranquila, debe ser el chos maestros que están continuamen reflejo absolutamente fiel del pensate llamando al orden sus alumnos samiento. Los arranques de ira de los imponiendo castigos y otros queja maestros vuelven los niños iracundos más han impuesto uno solo: no son intemperantes. Si es necesario que ciertamente estos últimos los que han el maestro corrija algún defecto, debe tenido que arrepentirse.
hacerlo con exquisito tacto, comedi.
Otro de los más imprescindibles miento y dulzura, valiéndose para ello deberes del maestro es dar buen ejemde ejemplos, cuentos, lecturas apropia.
p! o los niños con sus palabras y sus das, de modo que los niños no advieracciones. De él depende, en gran tan que se trata de una corrección y el parte, el desarrollo moral de los edudefecto sea corregido sin que su amor candos. El maestro debe ser un ejempropio sea lastimado en lo más míni.
plo viviente de moder:ción, de prudenmo. No hay que olvitar que la recia, de nobleza de carácter, de dulzura, prensión amorosa y delicada, recibide altruismo, de veracidad y de todas Ja de quien mucho amamos, subyuga las virtudes que desea ver florecer en el y conmueve, mientras que la reprencorazón de los tiernos niños. Ni aún sión áspera, recibida de quien no se en la intimidad de la vida privada es hace amar, provoca la rebelión haspermitido al maestro nada que pudiea las mejores naturalezas. El humor ra causar escándalo sus discípulos, del maestro debe ser siempre igual, en la dicha como en la adversidad si liegase su conocimiento. Deben los maestros penetrarse de lo trascensu consideración por los niños debe dente de su responsabilidad y tratar ser general, sin distinciones, ni lavori.
de ser modelo digno de ser imitado tismo, no tendendo en cuenta para naen todas las circunstancias de su vida.
da la posición social riqueza de los Nada hay que desmoralice tanto ni niños, estimulándolos a todos, pobres haga caer en tanto descrédito el y ricos, grandes y pequeños, talentoidal de moralidad y virtud que todos, sos y desprovistos de capacidades, más o menos, concebimos, como esos todos por igual, con palabras alentadomoralistas o directores espirituales de ras y dulces, banándolos a todos en las ondas de un amor sincero y proalmas que hacen, cuando se creen solos, lo contrario de lo que con falsas fundo. No sé que debamos pensar de voces pregonan los cuatro vientos.
ciertos pedagogos de alta graduación, El espíritu de imitación de los niños de hunor agrio y variable, a quienes llega veces hasta la exageración, los niños no aman sino que temen, hasta imitar los ademanes, gestos, que usan expresiones vulgares, entran frecuentemente en arranques de ira, com y ofenden la dignidad de los tiernos tañas niños con expresiones como esta: selva. Eres un brate, siéntate, tienes un la aut cuatro. He conocido maestros que las al hacían a los niños cuestiones fuera del en el alcance de sus capacidades, las que to de naturalmente, no podían ser resueltas, lo que motivaba los arranques de tes.
su intemperancia. un niñito, hijo sainic de un amigo mío, he oído decir estas Elpe ingenuas palabras. Papacito, porqué del será que don Fulano (su maestro) es su po tan bravo conmigo? Si él fuera un poco más bueno, yo todos los días le sexu: ilevaría una cosita. Este niño, de celul menos de siete años, quiere tiernzmente su maestro y la escuela, de pero no tardará probablemente mucho tiempo en aborrecerlos.
como La veracidad debe ser cualidad mien sobresaliente del maestro. Un hombre por. que profana la divina prerrogativa del Esia lenguaje con la mentira, no puede influe merecer el nombre de maestro. El ment dano causado en los niños por el es actua cándalo de una mentira es colosal, pode Así pues, los maestros deben rendir 2CLÚ 10 cuto sin límites la verdad, y nism eritar cuidadosamente toda enseñan. ctirar za cuento exageración que pudie carac ran ser confundidos con una mentira. ción, El tacstro debe, por último, ayudar perim dito el perfeccionamiento de sus discípulos mediante el poder de su propio penfisono samiento. Este poder, cuyo alcance dioso se ignora generalmente, en las países glotó del Occidente es, sinembargo, uno de pesar los mayores poderes de la Naturaleza.
prola El Universo es mente. dice uno visibl de los antiguos principios herméti.
pensa cos. El Universo es la manifestación dos, del Pensamiento Divino, que palpita, yan en formas variadas hasta el infinito, seny en todas partes, en la estrella y en daño el leucocito, en el océano y en la quier gota de rocío, en la imponente gran. modd deza de las tempestades, en la in des,