PAGINAS ILUSTRADAS El Teatro Nacional de nuestro país, que tan ingentes suunas bi çastado y sigue costando a la energia del pueblo. a :1 abrirse en breve para una compania drg.
matica. Es esta, pues, la ocasión de ha.
cer que esa obri educadora cuyas alas tendencias he dejado expuestas sea cono.
cida en este país. rogarlo asi, hemos venido. distraer por un momento la ención de usted. No seri mucho pedir que el Gobierno, concesionario de nuestro catro, recomiende a la compañia que va disfrutarlo, la re.
presentación de esa obra procure algumas facilidades para que ella sea conocida del mayor número de costarricenses.
Señor: el mal die la guerra nos es des conocido todavia. Las excepcionalisimas condiciones en que nuestro pueblo halo grado ir resbalando indolentemente su vida. lo han mantenido salvo del san.
miento zote. Pero esas condiciones van gradualmente modificándose. La amplia sabia división de la propiedad se está borrando y los apetitos políticos que antes Crain vicio exclusiva de los parissos de la ciudad. un descendiendo hasta desparramarse entre los trabajadores de los campos.
La guerra. pues, da sus lecciones. Por que no dar también nosotros desde luego las ciertamente eficaces predicaciones de la paz: El mal de Frente al libro de versos que la época acaban de publicar en lujosa edicijn los jóvenes Albertazzi Salazar, la más mortincnte de las irreSoluciones entraba nuestra pluma.
Ise libro es un esfuerzo. que duda cabe: Yun esfuerzo juvenil siempre es simpatico, como que lleva en sila savia de esos primeros vigores que impulsan e!
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