PAGNAS ILUSTRADAS salte hacia el patio y cai de espaldas. Ve choque iban cavendo una trs otra: pare.
levanto, como en busca de los mios, en cia que la Naturaleza estaba propuesta a cuentro parte de ellos en el galerón, pero concluir con todo, así habit que transi.
the faltaban tres de mis hijas: las bused Tar por media calle para evitar el peligro.
Hallo por milagro dos de cilas en la Con este sobresalto se paso toda la nocalle: la otra. 310 la veo, pregunto al che, y al despuntar alba llegó lo mis policial de punto 6jo. y me dice que la við espantoso: ver por todas partes sólo es.
er trar por la puerta siguiente, momentos combros y desolación que no parecia antes. Crei que acra victima mi hija, sino que hubiesen Oi acabado de desperar porque esa parte de la casa también cava de una de esas pesadillas terribls. Un de golpc. Entro por sobre los escombros. nudo se atravesaba en la garganta al con 12 llamo desesperadamente, y cual no se sidersy la inmensidad del desastre sobre ria a parte mi alegria al contestarne todo las víctimas que por todas partes se. papacito. aqui estoy aterrada. siqueme velan. Qué espectaculo tan cruel, ver sólo pronto porque me ahogo; enciendo un ruinas de lo que tu! bella y ejemplar 1ostoro, y efectivamente la veo cubierta de Cartago, cuna de tantos hombres notables escombros hasta el pecho. Grie, pidiendo de nuestra querida Costa Rical luz y con ayuda de su marido que llegó Esa mismi: manata se dispuso inmedia.
en ese momento, de un pariente de dos ismente enviar una cuadrilla al cemente policiales, pude con muchas dificultades rio cavar sepulturas grandes osarios extraerla. bastante lesionada. Afortunada. er que depositar de nuevo los restos que mente con los cuidados médicos su mejo por todas partes andaban dispersos. En ria fue pronta de urgente necesi ad evitar uns epidemia, Coando me convenci de que va no fal yeste trabajo origino serias molestias por taba ninguno de mi familia. sali la calle que los peones no querían hacerlo en recorrer la población para cumplir con parte 10 carecian de razón, pues, el pinimi deber, pues ejercia el cargo de Gober co por un lado y la feridex de las cadave nador de la Provinci: me cocontre con res exhumados, por otro, desalentaban serias dificultades por los pocos recursos hasta las más audaces in sco. Hobo de que podia disponer en esos momentos, irrerisiblensente que emplear la fuerza pues cada cual estaba atendiendo a los para llevar il cabo la peligrosa empresa Soros huscindolos entre las ruinas. No El Gobierno mundo tropa es: mañana lenia gente para prestar el auxilio necesa parte de ella se dessinó al cementerio.
rin di orden para que de los barrios Más tarde llegaran nentleros de la Cruz vecinos memandasen inmediatamente tra Roja, quieres, con laudable meritorio bunadores, pero como todos estaban en las empeño ayudaron al energico jefe de que misas circunstancias que en la ciudad, la sección don Alfreda Anderson, si quien no llegaron sino unos pocos de San Ra Cartago debe estar agradecida, pues por fael. Wino que otro de los demás distritos. su voluntad de ferro, el cementerio dejó Con estos y la policia. y parte de la guar de ser una amenaza para la salubridad pinición del Cuartel, algo se hizo. Toda esta blica, y la higiene to atendida después gente se porto muy bien, pero por lo con toda ligencia en la ciudad, exiguo del númeru no podia atender a El espectaculo de recoger cadáveres y toda la poblición, enfermos, pata depositar a aquellas en lat Cuando iba por las calles, de todas par plaza de constel, mientras sus deudos o ami tes, de debajo de los escombros, partan gos llegaban reconocerlos estos en lamentos gritos desesperados deman. el kioska del Parque, para venderlos o sudando auxilio para los deudos y amigos ministrarles a teszesicos, entre tanto se les esto es indescriptible, solo el recordarlo podia remitir la capital, de donde los Ja lortor y compasión. Muchos corrian pedian con insistencia, era para que se le C00130 locos, sobrecogidos de terror 1110s. comier: las lagrimas hasta los tras in.
sin sarse cuenta los otros de que iban sensibles. Parl Izcilim servicio de fientas sin rumbo fijo.
transporte labia constantemente un cache Como no pasaban cinco minutos sin en la estación del ferrocarril que se sintiera un fuerte sacudimiento Se me olvidaba o de las impresiones a campañado de truenos sordas. las paredes fuertes que experimente fine cuando se que no se vinieron abajo en el primer quedo en tinieblas la ciudad por haberse