16 Piginas Ilustradas Nicaragua. Fernández Guardia, entre ACUARELAS sus mejores obras puede enorgullecerse de Hojarasca. y entre sus mejores pagi. El chalet es pequeño y gracioso, con sus nas señalar la descripción de Sevilla: el corredores protejidos por grandes aleros, endoctor Zambrana pasará la posteridad cajes de madera donde el torno ha dibrecon su Poesia de la Historia afirme, jado caprichosos escartes, curvas imposibles, por lo que mi toca, parodiando los Yarisimas figuras, monstruos, hojas, flores; italianos: ver Napoles y morir después, con sus trentanas cuajadas de macetas, sus laque yo habría querido escribir la necrolo drillos rojo vito, contrastando con el celeste gia de Renán y romper la pluma después. prillido de las puertas; con su saloncito cubierAmpliando todavía la idea remontán. lo de gobelinos, con su piano, jaula negra donos grandes horizontes, el gran poeta donde duermen los pajaros de la armonia, Mistral, creador de Mirella, que no quiere us otomanus forradas de seda carmesí, sus abandonar el campanario de la aldea que confidentes enfundados ru camisolas de enculo vió nacer, para no perder de vista el jes, sus alfombras pobladas de caprichosos paicielo azul de su Provenza, goza de legiti. sajes, sus grandes espejos venecianos, sus corma y envidiable popularidad, pero nada tinas crema recogidas por lazos azules, sus jagana ella por cierto, porque sus adorables rrones de bronce, sus amorcillos dorados de poesias estén vaciadas en dialecto y ten abrillado abdomen y gesto picaresco, sus chdgan que ser muchas veces en manos de dors y sus candelabros de cristal, donde la los traductores traicionadas: vo contemplo uz rie y juguetea. Hugo, el Carlo Magno de la poesía y Un verdadero suido, en fin; una jaulita, un en nuestros tiempos Richepini Ros juguete habitanle donde viven cinco personas tand, cuyas figuras de grandes líricos el marido y mujer, la niña, y dos viejas criumundo entero conoce y admira, pregunto. quién ha puesto diques los vue. 41 frente de chalet lay un hermoso jardin.
los de su inspiración, quien les ha hecho Grupos de lilas y rosas Dlancas, grandes reproches porque sus dramas, cantos o manchas de violetas, maridajes de pensamienleyendas no sean genuinamente naciona. tos y margaritas y en el centre, cercado de les? Es que el agua de aquel bíblico po wardos, un grupo de lirios, misticos sacerdo20 sombreado por las higueras de Samaria les que brindan al cielo en su cilic blanco, la no mitigó acaso la sed de poesia del autor attiel y el aroma; rosas encendidas que semefrancés? o la clásica fuente Castalia que jan labios virginales, coposos naranjos corobrotó en tierra griega no ha sido el ma mailos por menjambre de azaharés, nieves nantial purísimo de inspiración desde los de mavo, mariposillas airosas que agarradas tiempos de Homero? la hoja werde parecen diamantes incrustaReconocemos, pues, por nuestra parte, dos en esmeraldas. En el centro un surtidor que la tendencia nacionalista es buena, en del que se desprende cantando el agua, en un tanto que puede servir para alentar la origi fucón de bronce en que se estrechan los «no nalidad de los autores, pero que la exage. me olvides. esas florecillas azules, que haración es un yerro; y volviendo al tema de blau del amante ausente y hacen pensar en nuestra conferencia, creemos que fué una los ojos de las heroinas alemanas que aparelástima impulsar Aquileo en un sólo cen en las baladas de Heine, en que el verso sendero.
canta y gime y tiene vida y alma.
Su joven musa, fresca, llena de vida a un lado, a pequeño invernadero, prisión de atractivos pecó por exceso de familiari de las plantas extranjeras, donde el terebinto dad; pero se hacía perdonar su defecto suspira por su Nilo y el clavel antericano como esas mozas de semblante tal vez de. languidece huérfano del calor tropical y de la masiado trigueño, o de facciones incorrec savia de la tierra virgen.
tas, que poseen, sin embargo ojos de Al oro, una pequeña glorieta en cuyas padeslumbrante mirada, o sonrisa que parece redes de alambre se agarran por todos lados, acariciar, tal fue su literatura que sin ser con sus dedos verdes, las campanillas azules, impecable tiene dos prendas dominantes: lasmadre selvas y el rosado cusdi amor. Fresla sensibilidad y la gracia; ejemplos en proa cueva donde el silencio meditaba acurrit sa: Marta y Acuarelas.
cado, precioso nido liecho para el amor misterioso, que gusia de la sombra, que huria el beso y esquiva la luz.