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PÁGINAS ILUSTRADAS ANGELID (Cuentecito para mis nietos. El dia 17 de febrero de 190. ocurrió teresado, no le faltaban la pobre viuda que, en una casa en construcción, se rom que los oía con paciencia pero sin arenpió un andamio cayendo a la calle tres derlos. Como Dios quiso y permitió paobreros que en el trabajaban de los cua sáronse tres años yendo la madre por las les uno resultó muerto del golte. Era el casas hacer servicios domésticos en lo padre de Angelín, quien tenía entonces qne la acompañaba su hija mayor que la tres años. Quedáibanle su madre, joven ayudaba enjuagar platos, secar cubiertos atin y vigorosa, y dos hermanitos: una y pasar la bayeta por los ladrillos. Los hembra dos años mayor que él, y otro pequeñitos quedaban en la vecindad al varoncito de catorce meses apenas. Bie cuidado de alguna veterana ya imposibines, los que puede dejar un albañil que litada para el trabajo activo, vencida y gana ó pesetas los días que no llueve; vencedora a la vez en la lucha por la consistentes en un modestisimo ajuar y existencia una docena de duros aborrados perra soUu dia, hace de esto pocos años, el bre perra por la viuda antes de serlo. Los pequeñin estaba acatarradillo y la madre gastos de entierro los sufragó la Herman prescindió de la compañía de su hija madad Monte Pio que perteneció el fina yor para que quedase en casa cuidando do con previstón que no es tan común al enfermito, previas repetidas advertencomo debiera. Porvenir, el halagüeño que cias de juicio y formalidad, sobre todo a puede esperar una mujer con tres hijos Angelin que como hombre debia dar el menores, sin más recursos que sus manos ejemplo.
y sin más tiempo que el que le sobra Después de darles frugal almuerzo con después de atender a aquéllos, porque la promesa de mejor comida, salió la madre juventud, lozanía y belleza de la viuda dejando al pequeñin en su camita, la no eran, para ella, recursos utilizables. mayor la tarea de coser unos botones, Quería mucho y bien a los pequeños y linica costura posible a su edad, y Anquiso bien y mucho al difunto.
gelin muy afanado en escribir una página La niña, los cinco años, salia encen de mes y enes, en la que el chiquitin iba der el fuego, lavar la ropita del pequeño, ejercitándose con decidida voluntad y no vestirle y barrer el piso con mejor volun escasa oisposición.
tad que resultado. Angelin no podía aún la costurera se le cayó un botón que aprender nada, como no fuera pedir pan rodando fué parar debajo de la cuna.
con más frecuencia de la descada por la Era ya el atardecer y no mucha la clarimadre. El chiquitin era maestro consu dad que en la habitación reinaba. Ocurrió mado en el arte de mamar sacando los sele la muchacha encender un fósforo hígados su madre que duras penas y con él en la mano se agachó para buspodia alimentarle por la escasez de leche car la prófuga hormilla. Faltóle cuidado o y de tiempo disponible.
experiencia para evitar la proximidad de Consejos, y consejos cual mis desin la llama la ropa de la cama y sin darse Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud Costa Rica
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