2 PÁGINAS ILUSTRADAS Párrafos femeninos ara Pizinas liustralas IV. El lenguaje de la lluvia Es sin duda la lluvia un aliciente po radoras de novelas entregadas las avenderoso de la metafisica. Ustedes, mis be turas de Capestang de Rascasse, esos llas lectoras, no han profundizado nunca personajes cyranescos de Zevasco, que el fenómeno del liquido elemento? manejan la tizona como nosotros los esCreo que sí, tratándose de un sustan carbadientes, y se dan el gran corte portivo muy concreto que se permite el lujo que se le ocurrió al autor hacerlos vivir de entrar en la abstracción cuando se en la época de Richelieu de Catalina de vuelve verbo Médicis.
Decía Madame de Stael que las lluvias El caer uniforme de la lluvia impone eran las lágrimas del cielo. Bien por un al cuerpo humano cierto afán de pereza y espíritu romántico como el que caracte al mismo tiempo de letargo muscular en rizó la intelectual hija de Nesber. La que las fibras, al unísono con el llorar de eximia escritora hubo de atribuir a las la naturaleza, dormitan sus siestas grises, glándulas lagrimales del firmamento cier incoloras, parecidas los sueños nebulota analogia con las nuestras, sos de cualquier poeta alemán partidario El baber llovido la víspera de la batalla de Kant.
de Waterloo fué causa de la derrota del Las novelas blancas de Annunzio reúltimo César. Las lágrimas del cielo hi quieren una sonrisa de la Naturaleza, una cieron, pues, célebre Wellington; y Na de esas sonrisas tibias que contrastan con poleón lloró a su vez, del mismo modo cl fuego mirifico del autor de Gioconda.
que había reído en Austerlitz.
Recuérdenlo las niñas. Para los días de La lluvia tiene su lenguaje cspecial que lluvia, autores como Montepin, Richeno todos comprenden. No me refiero, bourg, Ponson du Terrail, Maurice Lepor supuesto, a los que se mojan santa blanc y Conan Doyle.
mente por carecer de abrigo, los que co Sherlock Holmes y Arsenio Lupin son nocen de memoria el alfabeto de ese len los dos únicos personajes que entretienen guaje y llevan el apunte por más calados el espíritu deprimido mientras caen las lágrimas del cielo.
El lenguaje de la lluvia, armonioso, ca la postre, cuando nosotros lloramos, viloso, ritmico, lo sienten las niñas devo el ciclo nos lee novelas.
que estén. Por qué hay hogares desgraciados?
Se dice que la mitad de los hogares se fin, que ven en el matrimonio el medio sienten desgraciados causa de las muje de tener coches, automóviles, fiestas, alres, que hoy día son coquetas, frívolas, hajas, palcos en los grandes teatros de apasionadas por el lujo, por aparentar, en moda. Pues, sí, las mujeres tienen esa deEste documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud Costa Rica