Jueves, 12 de Marzo de 1914.
LA INFORMACION Págia.
El asesinato de la joven Silvia Camacho ocurrido antier en San Felipe de Heredia mos.
a Yo.
gre fría.
Ha sido este un doble crimen.(turnino es un joven arogante, un frecerle conseguir una sirvienta hasta que llegamos al teatro de donde fue encontrada la peineta nos permitiese reportear al reora impulsarlo a cometer el ho La joven asesinada, Silvia Ca muchacho muy simpático. que la reemplazara. Así lo hizo los acontecimientos, cl asesino agredió a su victima, lo que accedió aquel emplea trendo y espantoso crimen.
macho Arce, llevaba en sus en. Deveras, señora. Silvia y a las regresó a mi la La casa más cercana al lugar esta aterrorizada huyó, él la si do sin dificultades de ninguna na. La desgracia, la fatalidad, trañas el fruto de los amores se Así como Ud. lo oye, señor; do. Momenos después llegó Sa donde Silvia fue ultimada por su guió, y aquí, en ese otro lugar, turaleza.
han obrado poderosamente en cretos que tuvo con su victima talvez de los jóvenes mejor pa turnino y fue a esa hora que se donde fue encontrado el cadáver, este asunto.
rio, Saturnino Vargas.
recidos de la ciudad.
provocó el incidente a que hice la ultimo.
Pacaron diez, quince y hasta Veo, joven, que ya va Ud El lo sabía; sinembargo, dió Ya lo conoceremos más tar referencia anteriormente. Me di Es indiscutible, señor repór veinte minutos, y el reo no se entrando en arrepentimiento jo Silvia más tarde, que en la mater, que asi han pasado los he presentaba en la oficina donde nomuerte, y muerte cruel e infame de. Eso, caballero, no; yo mate a aquella sencilla joven, que no Seguimos adelante.
Sada, a eso de las 7, Saturnino chos. respondieron mis acompa sotros impacientes le aguardába y maté bien.
tuvo en su vida más pecado que En el departamento siguiente, pasó por la casa donde ella estanantes. Por Dios, joven, no se querer a su matador a quien le que era la cocina, encontramos a ba concertada y la llamó supli Dígame Ud. señor cicerone; esto llega el Alcaide y ex ra prese Ud. de esa manera.
brindó su juventud en flor.
Genoveva, la madre de Silvia. cándola marchara a su casa qué objetos llevaba Silvia en ca nados le preguntamos. Si no me arrepiento de lo he el infame pagó con la muerLloraba sentada en un tabure donde la encontraría más tarde, rriel o en las manos cuando se en. Qué pasa que el reo no vie cho.
contró su cadáver?
ne?
te a quien por él sacrificó su hon te cerca del fogón; varias vecinas pues tenía que comunicarle asun Hace mucho tiempo que Ud.
y la mar de chiquillos rodeaban a tos de importancia para ella. No recuerdo. ra y su tranquilidad. Ah, señor nos contestó el llevaba relaciones amorosas con Este asesinato ha sido uno de la inconsolable señora.
Bien; en la tarde, a eso de las Yo si que recuerdo. repuso Alcaide, sonriendo tristemente. Silvia?
los más horrendos que se hayan Doña Genoveva se calmó para o las 3, yo no recuerdo bien, Silla señora que nos dio el dato an es que se está peinando para sa. Tres años.
presentado en Costa Rica. difícil atendernos a nosotros, y ocupa via me dijo que iba a casa de una terior.
lir. De simples relaciones. no mente la historia criminalógica mos otro taburete junto a ella. señora a probarse una chaque ver, diga Ud. que objetos La vanidad, siempre la vani es verdad?
del país registra en sus páginas Al instante, la cocina se llenó tilla que había mandado a hacer.
fueron esos.
dad, hasta en el crimen. de algo más, caballero?
otro caso tan cobarde ni tan ale de curiosos.
Media hora antes yo sorprendí a Pues. un pañuelo, una Momentos después vimos salir Silvia iba a ser madre. voso como este mota y un cinco.
que ocupa hoy Suplicamos a los presentes nos un chiquillo conversando con Silnuestra atención.
de las rejas a un joven esbelto, a Sabía Ud. ese detalle?
ermitieran hablar a solas con a via; el niño dijo a mi hija que Sa Aja. Quién recogió ese rrogante, hermoso, de muy agra Lo sabía, si señor, Espantoso fue el caso de Fer quella señora y accedieron, aun turnino la esperaría a las en pañuelo?
dable fisonomía, frente ancha y Ni eso lo detuvo para aseste nández en Alajuela; trágico y que no de buena gana.
punto, yo no recuerdo en que la nar a Silvia. un tan o hundida, ojos grandes y sombrio el reciente de Quesada principiamos el reportaje. gar. Temiendo una desgracia. Estaba húmedo. negros, sombreados por largas y No pensé en ello cuando en esta ciudad; pero este, ocutraté de impedir que Silvia salie Si estaba.
correcta forjé en mi mente el plan de marrido antier tarde en Heredia so. Espantoso en verdad ha si ra, pero ella se empeño en ello y Lo que quiere decir que Sil negras pestañas, nariz mente perfilada, boca pequeña, tarla.
brepasa a todos en zaña y cruel do el caso, estimada señora, del salió. Sinembargo, yo hice que Señorita Silvia Camacho via lloró antes de ser asesinada En consecuencia, hubo predad.
trágico y sentido fallecimiento mi hijo José, de 11 años de e novio o amante, está a unas 300 por su aman:e. No es verdad se labios finos y delgados, barba peFue el de Heredia un crimen de su querida hija.
dad, acompañase a su hermanita, varas de distancia y esto, toman nores?
queña y redonda, orejas diminu meditación. Si que la hubo; a ella y a su tas, dientes grandes pero de perpremeditado por un hombre que De lo más espantoso y cruel, rogándole no se separase un mo de dirección a la ciudad; en el Así parece.
estaba en su cabal juicio, que con sí señor.
mento de ella. Pero, inmediata tro lado solamente se cncuentran Bien, pues, marchemos aho. fecto alineamiento, en fin, un ti madre les notifiqué desde tem prano mi decisión.
anticipación estudió el pian que Lo que significa que Satur mente que Silvia hubo abandona cafetales y charrales en una gran ra a la Cárcel a entrevistarnos po sumamente interesantee. luego. debía poner en práctica para ul nino no amaba de verdad a Sil do la casa tuve un terrible pre tcnsión.
con el reo. Pero, antes que todo. sus órdenes, caballero. En la tarde, a eso de las 3, vi timar a su víctima, pian que ma via. no es verdad?
ser imiento y me dije: no, yo si. Aquí en este lugar, sobre es señor cicerone, dígame Ud. qué nos dijo el reo, dibujándosele en pasar a Silvia por el frente de duró en todo un día, y que reali. Claro, porque de haberla a go a Silvia y detrás de ella salire montón de hojas de piñuela, clase de conducta ha observado los labios una liviana sonrisa, na zapateria donde yo me enconzó con toda tranquilidad y san mado, no la mata el ingrato. poco andar noté que Saturni fue encontrado el cadáver de Sil Saturnino en Heredia. Bien, joven dijimos al reo, traba y la seguí. Con engaños la De qué tiempo databan las no se acercó a su lado y entabló via nos dijo un policial que nos Yo lo conozco muy bien; he señalándole un asiento, sién ese fuí llevando a paraje solitario y a.
Es esto algo que pone pavor en relaciones amorosas de aquellos con ella una disputa. Me acerqué acompañaba y que hacía las ve sido su amigo.
Ud. aquí y hablemos unos cuan li. allí. ya sabe Ud, lo de los espíritus sanos y demuestra jóvenes?
a ellos, y Saturnino abandonó a ces de cicerone. Hombre, mejor que mejor: tos minutos de la terrible, de la más que ocurrió.
hasta donde llega en sus descen. Ellos llevaban tres años de Silvia. Yo seguí con ella hasta Ese lugar se encuentra a cinco asi tendremos datos ciertos. inmensa desgracia que pesa sobre Podría Ud. detallar los hesos el alma humana. jaleos Ud.
chos?
ayer Y, en alguna ocasión Satur Desgracia. Quiá, no se por qué no. Heredia y en su labor investiga nino habló a Udo a su esposo Los funeral:s del General Soto Alfaro nor: yo maté, porque pensé ma mino dije a Silvia que me siguiedora, en la que tardó varias ho de matrimonio con Silvia?
tar, porque debía matar. En ra, que la iba a matar. Ella seguras, recogió datos importantísi Muchas veces, si señor; mas tiende Ud?
ramente no creyó en que realizamos que dará a conocer a los lec los plazos que puso siempre se a Cómo. ra la amenaza, pues tranquilatores.
largaron y. Lo dicho; maté a Silvia, por mente me siguió hasta el barrio Estuvimos en el hogar de los Pero, al decir de las gentes, que ella me engañaba.
de San Felipe. Una vez en lugar esposos Camacho Arce, padres Saturnino ultimamente estaba Las pruebas, joven. apartado yo le dije: sé que me ende la victima.
dispuesto a casarse con la hija No las tengo, pero eso me lo gañas; sé que me eres infiel, diEllos viven allá, en una casita de Ud?
dictaba la conciencia, me lo pre me la verdad o te mato. Ella me humildísima del lejano barrio del Bah. Cosas de las gendecía el corazón.
juró y rejuró que me era fiel y que Ciprés, lado noroeste de la ciu tes, señor; de haber ese hombre Vamos por partes, joven: me amaba con idolatria. Yo le re dad.
pretendido con buenos fines a ¿quiso Ud. mucho a Silvia. peti una y cien veces, que me di Silvia vivió siempre con sus pa Silvia, qué tiempos que se hubie Pech.
jera la verdad, pero ella seguía dres; decimos mal, siempre no:ra casado con ella. La adiaba quizá. negando y negando siempre. Sa ella estuvo una temporada au Reñían los novios. No, eso no.
qué el revólver y se lo puse en el sente, sirviendo en casa de don Siempre, pero, más que nun Entonces. pecho; di la verdad. la dijeNicolás Gutiérrez, en Guadalupe. ca en estos últimos dias. Si señor, la quise mucho, pe por última vez. Ella me contes Y fue en aquella época que el Por celos. ro mucho sujetándome por los brazos: no, asesino abusó de la inocencia de Sí, por eso; Saturnino celaba Pues no parece.
no te he sido infiel. Sí, confiesa su novia.
a Silvia,. yo no sé con cual Sí, créame Ud. la adoraba. la verdad, infame, o pereces. De esto hace año y medio.
hombre.
Tuvo Ud. celos de ella?
lo que ella se retiró un poco de Los padres de Silvia ignoraban. Vecino de Heredia. Celos. mí y, con un gesto insolente, completamente la clase de rela. De esta ciudad, sí señor. Sí, celos.
grito: máta, pero no digo menticiones que mantenían su hija y Ud. señora, no presintió el Pues.
ras. Hice funcionar tres veces seSaturnino.
crimen. Conteste con franqueza; es guidas el gatillo del revólver, peEllos, pobrecitos! dieron fe a Ya lo creo; como que ayer un periodista quien le habla a ro no dispararon las cápsulas. Ella las promesas matrimoniales de en la mañana estuvo aquí Saturni se movió del lugar que ocupaSaturnino y de ahí que permitie nino y me dijo: hoy mato a Sil Vaya sea! Si tuve celos de e ba. Yo me retiré un momento, a ran sus relaciones con Silvia, a la via. Por qué? le pregunté yo alla, celos que devoraban mi al hacer una diligencia. Luego re que siempre tuvieron por cando sustada. Porque sí porque me TOS y buena.
engaña. contestó él. No, no, Damos a nuestros lectores una vista del interior de la Iglesia Catedral, durante los funerales del Ge ma, que retoreían mi corazón. gresé y alli encontré todavía a que no pude dominar por más Silvia. Confiesas o no? le pre En la sala de aquella humilde Silvia no te engaña, le repliqué neral don Ronulfo Alfaro. El catafalco y todo el decorado que incluye unos candelabros que valen cinco gunté No digo mentiras rescasa estaba el cadáver de Silvia. Sí, sí, ella, la infame, me engaña mil colones, fueron dispuestos y son propiedad de la Funeraria de Manuel Campos y Hermano, a cuyo. Raro, porque el remedio pa pondióme ella más insolente que En un rincón, sobre una rústi miserablemente dijo Saturnino cargo estuvo todo el servicio de los funerales.
ra matar esos celos lo tuvo Ud. nunca y apuntando de nuevo con ca mesa, el sencillo ataúd que y salió de esta mi casa.
el revolver a su pecho amartille contenía los despojos de la infor Presenció Silvia esa escena dejarla en la puerta de la casa de varas de una esquina, a un lado Saturnino no ha sido un mal No comprendo, señor.
el arma y disparó una cápsula.
tunada joven Sí, ella estaba presente cuan la costurera y regresé, dejando a de la callejuela.
nuchacho; al contrario, su con. Casándose con Silvia asegu Ella cayó inmediatamente al sueAl lado, una cama de hierro, do eso sucedió.
lli a mi hijo para que acompaña. aquí, en ese otro lugar, lucta en esta ciudad no ha deja raba su amor, su confianza, y des lo y me alejé paso a paso de aquel en la que descansaban varias se cuál fue su actitud en esos ra a su hermana cuando es a dis por esta otra callejuela, a unas do que desear. Ha sido buen hi de luego.
lugar sin enteralme si la había ñoras del vecindario; a otro lado momentos?
pusiera regresar a la casa. Dos quince varas de allí, donde cayó jo y leal amigo. No conozco a Ella me quería, de ello estoy matado. Estuve luego en mi cade la sala unas toscas bancas en. Juraba a Saturnino fidelidad horas después, recibí en mi casa muerta Silvia, encontrose una fondo sus sentimien os. pero yo seguro.
sa, en el Mercado, en la Estación las que bostezaban unos cuantos completa y decía: no, no te en la triste, la terrible noticia del a peineta de la joven.
hasta ahora es que demuestra e. Entonces. a esperar a un amigo que venía hombres de semblantes pálidos y gaño, te soy fiel.
sesinato de mi hija.
Una peineta. repetimos se muchacho que no los tiene de Pero me engañaba.
de San José en el tren de las y trasnochados que permanecían a. terminó aquella escena sin El niño José, a quien reportea reflexionando buen cristiano Ha sido trabaja. No puede ser eso.
30: allí vi gentes que me señalaHi desde el día anterior.
otro incidente no es así? mos, que parece ser muy activo y Si señor, una peineta de muy dorcito y no muy enamorado. Sin Me lo aseguraron ban y decían: ese es el matador El cadáver tenía el rostro des Así es, señor.
vivaracho, dice: largos peines.
vicios y muy serio. El estuvo de Quién. de Silvia. De la Estación marché cubierto y nos acercamos al a Y, dígame Ud. doña GenoCuando regresábamos, Silvia y Quiere decir que esa peincta alta, de sargento en el Cuartel de Otra mujer a una cantina y allí fue donde utaúd.
veva: notó Ud. que Saturnino esyo a nuestra casa, ella me suplila llevaba la joven bien asegura Artillería, en San José y hace Su nombre?
nos amigos me dieron noticias fiLa muerte no había hecho es tuviera tomado de licor có que la dejara sola, a lo que yo, da en su cabellera.
muy pocos días, ocho o diez pró Me lo reservo.
tragos en aquella simpática fiso momentos?
dedignas de la muerte de Silvia. Seguramente ximamente, que regresó a esta Hace Ud. mal, joven. No de Ellos me preguntaron por qué la que tenías ganas de jugar, accedi nomía. No lo estaba, qué, bah. separándome de ella. No sé que Y, digame Ud. señor cicero ciudad. Sa urnino, que es zapate be Ud. esconder la verdad de los había matado a lo que no quise Absolutamente. Está cual era. nos dijo una viejecita que se acercó Tanto como eso, señor, le di dirección tomara Silvia, pero me he. el cadáver tenía la cabellera ro, goza de algunas simpatias cn acontecimientos. Por su pro contestar. Minutos después fui en desorden?
tre la clase obrera de Heredia en pia defensa conviene exclarecer capturado y aquí a nosoparece que marchó al centro de la me tiene Ud.
ré con franqueza, no lo puedo atros.
ciudad. No ví cuando Saturnino Hombre, yo fui una de las la que se le estima y hasta se le los hechos.
dispuesto a sobrellevar con pafirmar. Si. respondimos noso Bien; pues la persona que ciencia y resignación las conseocurrió mucho rato después de primeras personas que llegaron a distingue. Por estos datos ya ve Bien: transcurrido aquel inquí cuando Silvia fue asesinada y, rá Ud. señor repórter, que abo me aseguró que Silvia me enga cuencias de mi crimen.
tros, pues se comprende que cidente ¿qué ocurrió luego?
mató a mi hermanita, suceso que francamente, no me fijé en ese nan a Saturnino magníficos ante naba. fue. fue No me atrefue Silvia una niña primorosa y Y, con la sonrisa en los labios. Le contaré a Ud. algo más, que yo la abandonara en la calle.
detalle.
cedentes.
vo a decirlo, señor no me atrevo.
atrayente.
falta un antecedente importante.
De la casa de los esposos Ca Yo sí que me fijé en ello y Desde luego, señor cicerone. Por miedo. aquel gallardo y arrogante joven Mi hija servía en la casa de don macho Arce nos dirigimos al lu es cierto que Silvia csaba des y lo creo porque veo que Ud. me penetró de nuevo tranquilamente tanto, agregó la anciana, Enrique Saborío y de allí hube gar donde Silvia fue asesinada. greñada cuando se encontró No; por vergüenza.
al salón destinado a criminales. que muchos jóvenes la preten de sacarla anteayer para evitar Tomamos al Oeste y después de cadáver. dijo una su habla con ingenuidad y fran ver, diga Ud. resuélvase confundiéndose bien pronto entre dieron. Era además tan bueseñora que queza.
a dar ese nombre.
todos los infortunados.
na, tan hacendosa y tan dócil. que en la noche, que ella regresa un cuarto de hora de caminar por por allí estaba metiendo la cuba a casa, se encontrara en la ca calles casi despobladas y polvo chara en la conversación. diay la verdad ante to Sí, fue una sirvienta, compado.
NOTA Mañana daremos am como se fue a enamorar de lle con Saturnino; esto hice pre sas, llegamos al barrio de San Fefiera de tareas de Silvia, la que su victimario. Lo que demuestra señores. Y, andando andando llegamos viendo el crimen. Ayer en la ma lipe, situado al sureste de la po dijimos a las personas que nos a a la Cárcel Pública.
me hizo aquella afirmación plia información gráfica de este. Cosas de Dios o. del Dia iana Silvia marchose a su con blación.
compañaban. que hubo lucha Inmediatamente nos avistamos Una sirvienta. a los suceso con el retrato del matador blo, señor; porque novios le so cierto para avisar a la señora de Tomamos luego por unas es entre la víctima y asesino. con el Alcaide de aquel centro pe chismes de una mujer de esas hi ly reconstrucción de las escenas braron Blvia. Sinembargo, Sa Saborío mi determinación dicamentoteeshasedaj dsolitariasca realbejuelasse Probablement del Sete maell esionburgeasibilitvene iletidnigtere daplicare duvenquecostalikda caso y fue lo suficiente pa del crimen que lamentamos.
Ud.
que hice.
en sus manos.
en esos su