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Egina DIARIO DEL COMERCIO Domingo 17 de junio de 1923 Discurso leido anoche en el Teatro Amé del Partido Agrícola a la presidencia de Amigos y Copartidarios: Congreso debía hacerse extensiva y proporcio De todas las acusaciones que me hizo el canSean mis primeras palabras un homenaje re nalmente a todos los empleados; pero no pe. mi didato del Partido Jimenista en su discurso del verente para la patria. El alto grado de cultura, tiéndolo así los ingresos del ferrocarril y están 16 de Mayo, la única que creí necesario desautoel avance de sus instituciones democráticas, el dole prohibido por el decreto que la estableció rizar sin dilación es la que se refiere a un supues ambiente de libertad en que vivimos, son factores crear deudas, o echar mano a las entradas gène to ofrecimiento de dinero para mi candidatura, que constituyen al pueblo de Costa Rica en rales del tesoro para pagar sueldos, resolvió no hecho por el ex Presidente de Guatemala don dueño absoluto de sus destinos, y ellos permiten desobedecer lo resuelto por el Congreso, sino Carlos Herrera. El señor Jiménez no dudó en que las luchas electorales para el nombramiento diferir su cumplimiento para cuando de ello no lanzarla, sin más fundamento que el dicho vago del Jefe de Estado y de representantes al Con resultara una injusticia. Nunca me arrepentiré de un periodista, del cual no citó ni el nombre ni greso se decidan, gracias a la tribuna, la prensa de haber contribuído en esta ocasión a evitar que la nacionalidad, y sin tomar en consideración, y la propaganda, por el más alto poder que existe se cometies un acto de favoritismo, que tendia que esa especie, según el mismo afirmó, se refea establecer una desigualdad patente e irritante, ria a una oferta que el señor Herrera había tenido en la época contemporánea: el de la opinión pública que de seguro no se hubiera decretado, si los se en mente, a un propósito que jamás llegó a mi Considero como un singular privilegio en nores representantes hubiesen conocido las razo conocimiento. Tal proceder del señor Jimenez nes del caso mereció la improbación casi unánime del país y contrarme entre vosotros y un gran honor el poder interpretar los sentimientos que a todos nos La opinión favorable que emiti sobre el lla ésta ha sido para mí la mejor de las satisfaccioinspiran. Veo aquí reunidos agricultores y co mado Pacto del Tacoma es, en concepto del se nes.
merciantes, profesores y profesionales, artesanos ñor Jiménez, una de mis mayores culpas. Ese Si he rechazado las ofertas de dinero de los y labriegos, ancianos venerables y jóvenes vi convenio, firmado por los Presidentes de El Sal nacionales sobre la base de devolución con el imbrantes, todos los grupos de la sociedad. Un so vador, Honduras y Nicaragua el 20 de Agosto porte de las rebajas hechas a los sueldos de los plo de ideales, un deseo patriótico los acerca: la de 1922, se compone de ocho articulos. Los cua empleados públicos. cómo sería posible que yo esperanza de mantener a Costa Rica a la misma tro primeros tienen por objeto precaverse recipro pudiera sucumbir a la tentación de un auxilio altura, con el altivo decoro que la recibimos de camente contra las invasiones de emigrados representado por el oro de afuera? No necesito nuestros padres que fundaron y defendieron su políticos organizadas en los países vecinos, Pue insistir sobre un tema ya definitivamente fallado autonomía sagrada, y por eso digo que esta asam de alguien dudar de que esta precaución, con en mi favor, salvo para expresar una vez más el blea contiene entre tantos y tan valiosos elemen pacto y sin él, sea un deber ineludible de buena deseo de que se eliminen del debate las armas de tos, las esenciales virtudes cívicas: el trabajo, el vecindad internacional? Por su parte Costa Rica esa clase espíritu de iniciativa que engendra todo progreso, nunca ha dejado de cumplirlo. El articulo quinto El caballo de batalla de mis adversarios poel amor a la libertad que conduce hasta el más dispone la convocatoria de una conferencia para líticos la pretendida supresión de la Enseñanza heroico sacrificio. Estas virtudes son las que han tomar medidas de acercamiento entre las Repú Pública. no podía faltar en la catilinaria del secaracterizado en el curso de la Historia al esfor blicas hermanas. mi juicio esto es útil y nece ñor Jiménez. Sobre este asunto hice desde el zado y fraternal costarricense.
sario. El sexto establece el libre cambio de pro principio de la campaña declaraciones categoriNo por espontánea iniciativa, sino acatando ductos nacionales entre las mismas. Hace pocos cas en carta abierta al Profesor don Luis Dobles el deseo manifestado por muchos de vosotros, años nuestro Poder Legislativo decretó, motu Segreda. En esa carta declaré y ahora vuelvo a vengo a tomar la palabra en esta ocasión solemne. proprio, esa misma franquicia. El sétimo institu declarar, que mi anhelo es que la Enseñanza, al Todos sabéis que no soy hombre de discursos. ye el arbitraje para todas las cuestiones presentes capacitar a los jóvenes para la lucha por la vida, Si con discursos fuera posible labrar el bienestar o futuras entre las Partes Signatarias, principio cada vez más ardua, responda mejor a las necedel país, a estas horas habríamos alcanzado un que es el ideal en el mundo civilizado, y el octavo sidades actuales del país. Consultado sobre la alto grado de prosperidad; pero ya el pueblo de contiene una invitación a Costa Rica y a Guate educación que debía darse a un sobrino suyo, Costa Rica está cansado de frases estériles, que mala para adherirse al Convenio. Como puede Bolívar escribía en 1825: Siendo muy difteit se desvanecen como fuegos de bengala, y encarece verse, el tratado del Tacoma es muy semejante apreciar donde termina el arte y principia la cienaquella progresista sentencia: acción, acción y a otros pactos centroamericanos en que nosotros cia, si su inclinación lo decide a aprender algun siempre acción. De aquí mi renuencia a seguir hemos sido parte y no contiene ninguna cláusula arte u oficio lo celebraría, pues abundan entre el camino trillado de nuestra política electoral. que entrane una amenaza para el país. Tampoco nosotros médicos y abogados, pero nos falar En esta misma tribuna, al celebrarse hace ha sido el único que en Centro América se haya buenos mecánicos y agricultores que son los que celebrado a bordo de un barco de guerra norteel país necesita para adelantar en prosperidad y poco una reunión política, el Licenciado don Riamericano. Me bastará recordar Tratado de cardo Jiménez, formuló contra mí varias acusabienestar. Este juicio formulado hace un siglo ciones Me propongo refutarlas, porque mi Paz que Costa Rica firmó con la República Mapor el Libertador sigue siendo una verdad intansilencio podría interpretarse torcidamente. Con yor de Centro América a bordo del Alert, el 26 de gible, al menos en Costa Rica. Dije también en fieso que la lucha personalista me repugna por Abril de 1898 mi carta y repito aquí, que los padres de familia pequeña y desmoralizadora. Mi deseo era mantePor estas razones sin duda, lo que el señor pudientes deberían ayudar al sostenimiento de la ner el debate en el campo de las ideas; pero nece Jiménez censuró no fué tanto mi opinión favoraSegunda Enseñanza Oficial sito hacer mi defensa y tengo que acudir al terre ble al pacto del Tacoma, como la circunstancia Mucho se dolió el señor Jiménez en su discurno escogido por el adversario. El ex Presidente de haberme divorciado con ese motivo del criterio so del dinero gastado en la Legación extraordinade la República, señor Jiménez, es un estadista de la mayoría de mis compatriotas. Opinar con ria que ante los Gobiernos de las otras Repúblicas de merecida fama y sus palabras tienen por conla mayoría en materia de politica es indudablede Centro América desempeñé hace tres años.
siguiente resonancia en el país; pero ni en Costa mente lo menos expuesto y más provechoso; peSobre este punto debo declarar desde luego que Rica ni en ninguna parte basta el prestigio del ro yo creo que el ciudadano debe siempre y ante de ese dinero no entró un céntimo en mi bolsiho, acusador para justificar un cargo, si éste no tietodo ser fiel a su conciencia y a sus convicciones, pues servi la misión sin devengar honorarios; arne sólido fundamento. Muy duras resultan a diciendo leal y sinceramente lo que piensa, sin tetes bien gasté en ella dinero de mi peculio. De veces las necesidades de la política; tan duras que mor a las consecuencias. Por lo tanto, cuando se otra parte, ni yo solicité la misión, ni ésta fué llegan a extraviar el sano criterio de los hombres.
me pidió opinión al respecto, no aguardé para creada para mí. En el caso de que yo no hubiese En el riguroso inventario de mis culpas leemitirla hasta estar bien seguro de lo que pensara querido aceptarla, no por esto habría dejado de vantado por el señor Jiménez, no faltan ni las la mayoría de los costarricenses.
acreditarse: porque el Gobierno del señor Acosta medidas que tomé, siendo Secretario de Fomento, El tratado del Tacoma no prosperó; sin emconsideraba como un deber nacional imprescindipara combatir una plaga de langosta que amenabargo el Gobierno hubo de aceptar la invitación ble, no sólo expresar así a los países hermanos zaba arruinar a nuestros agricultores. Si en preque se nos hizo para la Conferencia Centroame nuestra gratitud por la simpatia y el interés que sencia de tan grave peligro me hubiera cruzado ricana que se reunió en Washington en Diciembre mostraron en favor del restablecimiento de la paz de brazos por la magnitud de la empresa, justifide 1922, cuando precisamente la participación en en Costa Rica, sino también corresponder al encado estaría todo reproche; pero mi proceder fué esa Conferencia era la única causa que podia invío que hicieron de legaciones especiales con otro; dicté las disposiciones usuales en tales casos ducir a los recelosos de la Unión Centroamericamotivo de la toma de posesión del nuevo Goy el país se vio libre de la plaga. Eso lo saben na a no entrar en el Pacto. El Poder Ejecutivo, bierno.
todos al enviar su delegado, hizo bien, porque donde Sus mayores esfuerzos oratorios los reservó Sigue el cargo de no ser yo respetuoso de las quiera que se trate de asuntos que interesen a el señor Jiménez para hacerme aparecer como un Centro América debemos estar presentes, como leyes. En su apoyo citó el hecho de que habienenemigo del pueblo y de la República, que predo decretado el Congreso Constitucional el parte que somos de ella, bien para apoyar, bien tende entronizar en ella el imperio de la oligaraumento de los sueldos de algunos empleados para combatir las tesis de las Repúblicas hermaquía. Dichosamente para mí y sobre todo para el del Ferrocarril al Pacífico, esta disposición no nas. No termina aquí el asunto. Enviado nuestro imperio de la verdad, Costa Rica es un país pefué acatada por la Junta Administrativa, a la cual representante, el Gobierno fué consultado acerca queño en que todos nos conocemos lo bastante patengo la honra de pertenecer. Esta Junta, como de si quería admitir al de los Estados Unidos cora saber los puntos que calza cada cual. Entienmo parte interesada en la Conferencia. Sin vacido que el señor Jiménez no tenia es sabido, fue creada para armonizar el sistema tan mala peligroso de independencia absoluta, instituído lar se contestó que no. Entonces se hizo a nuestro opinión de mí antes de aceptar la candidatura a por el señor Jiménez durante su administración, Gobierno el ruego de que se reconsiderase su la Presidencia de la República. Al menos asi lo con el centralizador que establecen las leyes adnegativa, y para resolución de tanta trascendenmanifestó a la comisión que se la fué a ofrecer, ministrativas y no se aviene con la expedición cia fué consultado el parecer de varios de nuessi no estoy may informado, pero es natural que necesaria en el movimiento de un ferrocarril. La tros ex Presidentes. Algunos de ellos estuvieron ahora no me juzgue con tanta benevolencia y hasJunta habia elevado ya los sueldos hasta donde por la negativa; pero el propio señor Jiménez ta explicable que ponga el grito en el cielo per las circunstancias lo permitían y los había graopinó que se revocara la resolución, aceptando haber dicho yo alguna vez que las elecciones se duado, con criterio de estricta justicia, tomando que los Estados Unidos participacen en la Con hacen, entre otras cosas, con dinero y aguardienen cuenta, no los nombres de los empleados, sino ferencia. De suerte que no firmamos el Pacto te. Podría afirmar el señor Jiménez que en la la importancia y cantidad de su trabajo, su mayor del Tacoma, contra mi modesto parecer, y no obscampaña electoral que se lleva a cabo en su favor tante fuimos a las Conferencias de Washington y no se gasta dinero ni se consume aguardiente?
o menor responsabilidad y la salubridad del lugar en donde tenían que desempeñar sus funciopor consejo del Licenciado Jiménez se adimtió en Claro está que no. Qué valor tienen entonces nes. Ahora bien, el aumento de sueldos decretado ellas la intervención del Gobierno de los Estados los comentarios declamatorios con que acompañó por el Congreso, tan sólo para ciertos empleados Unidos. Tuve razón o no para aconsejar que la cita de mis palabras. Pero ya lanzo do en este que gozaban de la protección de los representanse aceptace el Tratado, con el cual también estaba camino escabroso, habló de mi desdén por el tes que iniciaron la medida, era una grave injusticonforme el Licenciado don Pedro Pérez Zelepueblo, a quien, según él, pretendo arrebatar el cia respecto de otros funcionarios tan meritorios dón, primera columna del Jimenismo, evitandoderecho de sufragio, cuando al contrario, uno de como los agraciados, pero que no disponian de nos asi aquellas rebeldías que poco después se los anhelos del Partido Agrícola es que las autolas mismas influencias en la Cámara. La Junta disiparon. Está justificada acaso la censura ridades políticas locales sean electas popularque por motivo de este asunto formuló contra mi mente.
pensó entonces que la medida acordada por el el señor Jiménez?
Estos son, es suma, los pecados políticos de que me acuso el señor Jiménez en su discurso, Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.

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