tal como lo pide la Constitución Sacrosanctum Concilium del Concillo Vaticano li. Lamentablemente, algunos grupos han sido reacios a la renovación, y otros han introducido abusos. Para la celebración de los Sacramentos a pesar de resistencias encontradas a los comienzos, la Iglesia ha obtenido ya el establecimiento y la aceptación, tal vez con algunos excepciones, de cursos catequéticos pre sacramenteales y, en la celebración misma, la proclamación de la Palabra, con lo cual la vida cristiana va ganando en iluminación y en profundidad. 62) El hecho de dolorosas tensiones doctrinarias, pastorales y sicológicas en el seno de la Iglesia, entre agentes pastorales de distintas tendencias, si bien subsisten aún, van siendo gradualmente superadas, mediante la práctica del diálogo abierto y constructivo. Los sacerdotes, para ayudarse y sostenerse mutuamente en su vida espiritual en su labor pastoral, se han orga.
nizado, en muchos lugares, en equipos. veces, colaboran en estos equipos religiosas y seglares. 63) La generosa ayuda que han recibido nuestras Iglesias e incluso el CELAM, de las Iglesias hermanas de Europa y Norteamérica, en personal y medios económicos, ha contribuido significativamente al esfuerzo evangelizador en todo el continente. Este hecho es un signo de la caridad universal de la Iglesia. El esfuerzo de encausar todo este aporte dentro de los planes de nuestras iglesias locales, constituye un signo de respeto y comunión. 64) Para terminar esta somera descripción de la realidad eclesial, queremos hacer notar que, en la Iglesia de América Latina, se está viviendo la comunión, naturalmente con vaclos y deficiencias, a diversos niveles: Hay la comunión local y la comunión de las bases en las famillas cristianas, en las comunidades eclesiales de base y en las parroquias, y se realizan esfuerzos para una intercomunicación de parroquias.
Hay la comunión intermedia, la de la Iglesia particular o diócesis, que sirve de enlace entre las bases más pequeñas y lo uni.
versal. De igual manera, hay la comunión entre diócesis a nivel nacional y regional, que se expresa en las Conferencias Episcopales y, a nivel latinoamericano, en el CELAM.
Existe la comunión más universal que podria llamarse comunión intraeclesial que nace de su vinculación con la Santa Sede y de la conciencia que la Iglesia de América Latina tiene de si misma, de su papel y aporte al conjunto universal de la Iglesia, que se expresa en el contacto de amistad con las iglesias de otros continentes. Esta comunión eclesial tiene su expresión culminante en su adhesión al Santo Padre, Pastor Supremo de la Iglesia La incipiente práctica del ecumenismo, expresada sobre todo en el diálogo y en la promoción humana lleva camino de acercarse a la unidad anhelada.
La revalorización de la religiosidad popular, a pesar de sus desviaciones y ambiguedades, expresa la identidad religiosa de un pueblo y, al purificarse de las deformaciones, ofrece un lugar privilegiado a la evangelización. Las grandes devociones y celebraciones populares han sido un distintivo del catolicismo la tinoamericano mantienen valores evangélicos y son un signo de pertenencia a la Iglesia.
La parroquia rural se encuentra identificada en linea general en sus estructuras y servicios con la comunidad existente. Ella ha tratado de crear, ser CEB que correspondan a los grupos humanos dispersos por el área pararoquial. Las parroquias urbanas, en cambio desbordadas por el número de personas a las que tiene que atender ha enfatizado más el servicio cultual litúrgico y sacramental. Cada vez se hace más necesaria la multiplicación de pequeñas comunidades territoriales o ambientales para responder a esa necesaria evangelización más personalizante.
Estructuras de evangelización Las parroquias (65) Se ha visto que la organización pastoral de la parroquia sea terrotorial o personal depende sustancialmente de quienes la integran, de la unión que existe entre ellos como comunidad hu.
mana.
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