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ACTUALIDADES La estrella de los Magos Sociales Personales rayo, y derritieron las entrañas feroces, y las Algunas veces asocio al recuerdo de mi tro deliquio. Mientras los dromedarios carefundieron en aquella forma dulcísima, todo ficción candorosa la idea de esas súbitas conminaban, proyectando a la luz de la luna so ello mientras declinaba la curva del salto que versiones de la voluntad, que, por la devo bre el desierto lívido sus cuellos de serpientuvo por arranque la intención de hacer da radora virtud de una emoción instantánea, te, nosotros perseguíamos una visión interna.
ño. Agregaba mi cuento que el Señor, mi consumen y disipan para siempre la endu Quizá íbamos hasta con los ojos cerrados, rando a las flores que a sus plantas había, recida broza de la naturaleza o la costumbre: porque ciertas luces divinas se ven así mejor.
hizo sonar los dedos como quien llama a un Pablo de Tharsos herido por el fuego del Cuando nos arrodillamos ante aquel infante animal doméstico. Entonces, de bajo el man cielo, Raimundo Lulio develando el ulcerado desnudo y tembloroso del establo, la luz de to de flores se levantó, cual si despertara, un pecho de su Blanca, o el Duque de Gandía adentro quedó ecl psada por la luz de afuera, perro grande, fuerte y de mirada noble dul. frente a la inanimada belleza de la Empera por el fulgor que emanaba de los ojos del ce de la casta de aquellos que en las sendas triz Isabel.
niño misterioso. El lucero se había hecho del Monte San Bernardo van en socorro carne. del viajero perdido.
JOSÈ ENRIQUE RODÓ El romano, ligeramente conmovido por el relato del rey, miraba inmóv el metal de su copa, en el que ardía un tímido rayito de la tarde, que penetraba por una ventana abierta Quién sabe si, en efecto, ese niño de que hablas, ha venido a encender una estrella CUANDO los tres Reyes Magos hubieron que más allá del alcance de nuestros ojos hay nueva en las almas. cumplido su misión de adorar a Jesús otros planetas desconocidos. Ahora bien cuál Gaspar no contestó.
niño, y de ofrecerle incienso como a Dios, de esos siete planetas de que te hablo, podía lo lejos, entre los riscos ásperos del paioro como a rey, y mirra (amarga y acre) bajar al nuestro para guiarte? Me dirás que saje, más allá de los torcidos pinos, se desancomo a hombre, pensaron en tornar a sus la Lúna, que es el más cercano; pero, tras de graba lentamente el crepúsculo.
tierras distantes.
que tú afirmabas ha poco que veías el lucero El aliciente mayor de este retorno, era el «no obstante la claridad lunar. este satélite AMADO NERVO deseo de narrar a los suyos el maravilloso es todavía de tal suerte grande, que en vez viaje.
de guiaros os hubiese cerrado todos los caGaspar, empero, quiso detenerse un poco minos con su mole formidable. Por lo que en Palestina. Deseaba conocer las ciudades respecta a los cometas, tras de que ocupan romanizadas, a las que Herodes el Grande inmensas extensiones en el espacio, sería abhabía dotado de monumentos grandiosos. surdo suponer que, al bajar uno de ellos para Quería asimismo ver la metrópoli judaica, conduciros, no hubiese sido visto de toda la Jerusalén, y contemplar la opulencia y ma Tierra, y es por otra parte ridículo pensar, PRÓXIMA BODA jestad del templo edificado por Salomón. que un cuerpo tan tenue y de tal magnitud Así lo hizo, y se hospedó durante algu se hubiese detenido, como afirmas, sobre el Próximamente contraerán matrimonio la senos días en la ciudad santa, donde treinta techo de un establo de Belén. Tendrás por fiorita Margarita Umaña y el doctor don Clodomiro Picado.
y tres años más tarde el hijo del hombre tanto que convenir conmigo, oh Rey, en que Hacemos votos por la ventura del futuro debía ser crucificado.
tu estrella es absurda, y en que ni el más ig hogar.
Gaspar era muy ingénuo; a pesar de su norante de los pastores caldeos, bien famiCON LA MÚSICAA OTRA PARTE alcurnia, había visto poco mundo y a cada liarizados con las noches resplandecientes, paso, en Cesárea (la antigua Sebasto) y en creería una palabra de lo que dices. perLa semana pasada tomaron las de Villadiego, Jerusalén, sobre todo, encontraba motivos dona lo rudo de mi franqueza.
para trasladarse con la música a los Estados Unidos, Julio Osma, el maestro popular y capara admirarse.
Gaspar, que había seguido con profunda marada ameno, Fellito Serrano y Carlos Durán Tenía poco que referir, y como se halla atención este discurso, traducido por uno de Salazar.
ba aún estremecido por el milagro que ha los presentes en buena parte, porque el rey Este último va en via de estudio que lo ponga en condiciones de aprovechar su prodigiosa bía visto, era éste el objeto predilecto de oriental ignoraba casi por completo el latin, sus conversaciones.
después de algunos minutos de perplejidad, El maestro Osma, lo mismo que Serrano, Cierto día, en la casa donde se hospe y en medio de la atención unánime, ya es van solamente a hacer una gira musical y prondaba, púsose a la mesa cerca de él un ro pectante, ya sorprendida, ya burlona, resto volverán al patio costarriqueño.
Es nuestro deseo que tengan muy buen suceso mano, recién llegado a Jerusalén con una pondió así: estos artistas que se lanzan a ensayar su vuelo misión secundaria del Emperador. Te confieso que al principio, cuando vi por cielos más espaciosos y claros.
Este romano era hombre instruido, había la estrella anunciada en sueños por espíritus estudiado filosotia con un sofista griego, se harmoniosos, no pensé en la posibilidad o LA BODA DE ANOCHE había leído a Platón y a Plotino, a los imposibilidad de que me guiase, ni de que Alegria, mucha alegria fué lo que hubo en la poetas y a los filósofos, y sus juicios estaban hubiera podido descender a la tierra: me fiesta fritima con que se celebró el matrimonio Gurdián Montealegre.
generalmente inspirados por un elegante es contenté con seguirla. Los maestros que Merecido es el lugar de alta estima que amcepticismo.
condujeron mi infancia por los caminos de la bos cónyuges ocupan en nuestra sociedad: ella, Al oir narrar a aquel rey bárbaro su pe sabiduría, no habían leído a Aristóteles. Sa una encantadora rubia en cuya alma se dieron regrinación en pos de una estrella, el ro bían, si muchos secretos de las almas y mucita todas las virtudes; él, un esforzado muchacho que jamás le ha puesto mala cara a la mano se permitió, sonriendo dubitativamen chas propiedades y caracteres ocultos de las vida, ni aún en los más dificiles trances.
te, decir a Gaspar: cosas. Pero más tarde, cuando el examen Que la nueva vida abunde en felicidades pa Perdóname que haga una objeción a tu sustityó a la emoción producida por nuestra ra ambos contrayentes, es lo que deseamos de interesante relato: Pretendes haber visto con maravillosa aventura, he reflexionado en algo todo corazón.
tus compañeros un radiante astro que te de lo que tú ahora me dices, no con la clariindicaba, todas las noches, el camino. Pero dad con que tú lo piensas y expones más qué astro podía ser éste? Bien sabes que confusa quizá, pero más intensamente y De Administración no hay en el cielo sino estrellas fijas, pla considerando asimismo lo que mis compañenetas y cometas. Una estrella no puede ba ros Baltazar y Melchor me han dicho, y lo jar a la tierra. Nuestra pobre esfera seria que oí de los labios de muchos pastores, que Las personas que deseen adquirir la codestruída, abrasada en un instante. Si leye todos veían y seguían la estrella, he acabado lección de ACTUALIDADES pueden solicitarses a los griegos, sabrías que las estrellas por comprender que ésta era una estrella in lo a los agentes de La Linterna o bien peson soles enormes, que vemos tan pequeñi terior. Si continuó Gaspar con cierta emo dirlo a la Librería de Falcó Borrasé, tos a causa de su lejanía. En cuanto a los ción, que dignificaba aún más su noble y an7. Avenida Este, 42, Apartado 638.
planetas, son siete los conocidos, en los cua guloso rostro moreno, y ponía en sus grandes les los poetas griegos simbolizan los dioses, ojos de gacela pensativa quién sabe qué fulEl precio de suscrición es un colón, serie a saber: Mercurio, Venus, Marte, Júpiter, Sa gores sobrenaturales sí, era una luz inte de 10 ejemplares. Pago adelantado.
turno, la tierra que habitamos, y la Luna rior, un astro que había nacido en nuestros que ilumina nuestras noches. aún afirma espíritus. Lo veíamos en una especie de éxtaAristóteles, en conceptos quizá un poco obs. sis, sin acertar a decirnos si nuestro deliquio Suscríbase a COLECCION EOS curos, pero no tanto que no se entiendan, encendía el lucero, o el lucero producía nuesVoz.
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