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2 EL TESORO POPULARAl lado de estas hay en cada sante delirio son las cosas que la virtud, del cariño, de la sincepueblo una o más que son sol atañen a su santo servicio. ridad; fortaleciéndolo con los aliteronas por vocación. Habrá ella muy bien pudiéramos aplicar mentos del trabajo, del dominio personas que no sabiendo distin las palabras del Apóstol: El que propio, de la mortificación vaguir el oro de la escoria, las pon casa a su virgen, hace bien; elliente, de los esfuerzos generosos; gan en el grupo despreciable ya que no la casa, hace mejor. en una palabra, procurando hadicho y no entre las mujeres úti. Dichosas heroínas, vosotrascer de su corazón un corazón les y honradas.
batís la palma de la virtud, sólo bueno. El corazón bueno forma éstas no las dejó el tren; por agradar al celestial Esposol al hombre bueno; y el hombre ellas quisieron dejarlo partir por Incansahles apóstoles, vosotras bueno, sea pobre, sea rico, sea que no vinieron al mundo a de corréis trás los ungüentos que noble, sea plebeyo, sea príncipe, sempeñar la difícil misión de es no se disipan. Si os consideráis sea súbdito, es siempre hombre posas y de madres. Quizá enQuizá en olvidadas y ocultas cual la viole viril, hombre feliz, hombre amacontraremos algunas feas como ta, vuestro aroma delicadísimoble, hombre bello, hombre digno.
el pecado mortal; otras bonitas Dios lo percibe y aprecia en suFRINMOSAREA como la inocencia infantil, pero mo grado!
bonitas y feas en el cuerpo, son encantadoras a los ojos de Dios FILODEMO y a los ojos de los hombres que Un discípulo de Jesús saben aquilatar el mérito de la honradez y de la virtud.
La bondad del corazón había pasado ya el toque de la La misión de la madre se ciñe oración, cuando en la plaza mayor de al hogar; la solterona sale del un pueblo de la montaña se oyeron Una educación esmerada, bien gemidos y gritos de socorro. La estrecho círculo de la familia pa bruñida y cincelada con las hepuerta de la casa cural que camunicaTa derramar la ternura de su co rramientas sacratísimas del cri ba con la plaza, se abrió y un sacerrazón sobre el pobre abandona terio religioso cristiano, produce dote de unos treinta años, asomándodo, el afligido enfermo, el niño los siguientes amabilísimos efec se, se puso a escuchar; y después, ignorante del Catecismo. Como tos: cohibe las inclinaciones pro seguido de una mujer con una luz en ora la monja en su claustro, ella tervas del espíritu; domeña las la mano, se dirigió al punto hacia donde se olan los lamentos. Yacía ora en su aposento y es el mode pasiones inicuas; abrillanta los en el suelo un hombre teñido en la lo de recogimiento en el templo; instintos generosos; dulcifica el sangre que chorreaba de sus heridas.
trabaja como la religiosa por el carácter, estimula las energías; Todavía se veía a un lado la navaja bien de la juventud. Consagra torna límpido el espíritu y hace con que acababa de abrírselas. El como la religiosa sus horas de bueno el corazón. cuánto sacerdote lo recogió y como pudo lo Una vez allt ocio a fin de que las iglesias no vale un corazón bueno? Oid: introdujo en su casa.
estén tan desmanteladas y su más vale un corazón bueno que volviera en sí, y le dejó en su cama dentro, le curó las heridas, hizo que cias.
riquezas acumuladas; más precio bien abrigado, después de haber heSin embargo, a menudo su tiene un corazón bueno, que in cho desaparecer la navaja, instrumenmérito es superior al de la mon teligencia atiborrada de conoci to del delito. Después fué el médico ja: vive en un mundo corruptor mientos; más merece un corazón y le hizo curación, volviéndose luego y con todo es bellísima mariposa bueno, que el brazo fuerte del para su pueblo, distante legua y media de la casa cural. las dos de la de irisadas alas. La caridad la guerrero triunfador; más aprecio madrugada el enfermo mandó llamar impulsa a salir de su casa y en logra un corazón bueno, que los al Cure, porque, según el decía, se tonces es superior a la religiosa diamantes del Transvaal; que las encontraba muy mal y quería hacer la cual no puede quebrantar la perlas del mar Indico; que los confesión de todos sus pecados. El clausura; en tales ocasiones pu filones auríferos del Perú; que el sacerdote se sentó junto a la cabezera diéramos compararla al sacerdo aloe y las esencias de la Arabia; de su lecho, y el penitente dijo: te secular que vive en el mundo que las vistosas y gallardas aves Yo, aquí donde me veis, soy on mas no es del mundo. Ella es el de la Oceanía; que los floridos perdido. Si os hubiese de referir todos los crímenes que he cometido desmejor elemento para el arreglo vergeles de la América encanta de que estoy en el mundo, no conde una iglesia; es la más activa da.
cluiría. Pero os referiré el mayor de y desinteresada propagandista en Por tanto, el trabajo de un ni todos, porque, si de él merezco absopro de una fiesta religiosa o del no, de un joven amante de su lución, estoy cierto que también la florecimiento obtendré de los demás. Hablad, dide las cofradías. porvenir, debe ser: Moldear bien Como todo corazón necesita el su corazón, arrancando de él las jo el sacerdote. De lo que voy a perfume del amor y como su comalas hierbas; secando en él las noche; yo vivía en un pueble del valle; contaros hace ya 23 años. Era de razón no está puesto en este lagunas de agua putrida y ba un día me dijo un hombre si quería mundo, sino en Dios, su ince ñándolo en las frescas linfas de gaoar 50 onzas de oro. Le respondi Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.

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