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MUNDO FEMENINO LUNES DE JULIO DE 1952 PAGINA SECCION LITERARIA Las Obreras Miranda Meditación (Para. Aramburu. regetar sin juventud.
Como nubes volanderas van rodando las obreras de la cuna al ataúd!
iTitilar de estrellas en la sombra inmensa!
La noche parece que piensa que calla y medita hundida en su lecho de paz infinita; y es el firmamento como un gran cerebro, donde el pensamiento luz que centellea enciende fulgores sublimes de idea.
Calle arriba calle abajo van las hijas del trabajo cuando empieza a atardecer.
Lentamente y en hileras van saliendo las obreras por las puertas del taller.
En las calles asfaltadas van rimando sus pisadas una trémula canción.
la canción de los que luchan silenciosos, y no escuchan ni un rumor de aprobación.
Son las víctimas dolientes, las humildes combatientes del ejército del pan, que después de las jornadas se retiran fatigadas al hogar. ique tristes van!
Desde el nativo valle a la blancura sin término de nieve, Caballero del ideal te diste por entero a la gloria en magnifica aventura.
La humilde criolla con su tez oscura o el alabastro y el marfil señero de Emperatrices te rindió su fuero.
y la justicia cruel quebró la dura.
sentencia al brillo de tu enseña altiva. al culminar tu empeño en la nativa tierra a quien gloria diste con tu gloria de desengaños se cubrió tu senda que son reflejos de tu clara historia el dolor, el amor y la leyenda.
Calle arriba, calle abajo van las hijas del trabajo cuando empieza a amanecer.
Lentamente, y en hileras van llegando las obreras a las puertas del taller.
Con su rostro resignado y el andar acompasado causan lugubre impresión.
en su calma y sufrimientos hay un germen de lamentos y una muda imprecación.
Claridad de estrellas, timida y discreta que unge con su beso la frente al poeta.
un lucero rasga, correo aéreo saola, la serenidad del cielo que duerme. Silencio profundo.
Corazón del mundo: se oyen tus latidos en la soledad.
Alicia Larralde Venezolana medida que se alejan sus pisadas se asemejan a quejidos de dolor, uniformes y calmosas van diciendo muchas cosas con su trémulo rumor.
Las obreras son cual rosas doloridas y llorosas, sin perfume, ni arrebol; son cual pétalos carnales que en jardines otoñales, mueren huérfanos de sol Estrellas fugaces saben y se esconden. Preguntan? Responden?
Palpitan incógnitas en el más alla! hay interrogantes. Esas lucesitas, siempre parpadeanles; son quizá, señales que los navegantes de pasadas vidas dejaron prendidas para que nosotros sigamos sus rastros?
Tu Cabello Pasa el tiempo lentamente resbalando por su frente como un hálito sutil. es el tiempo que se escapa como esponja que se empapa en la gloria juvenil.
Ensayo poético de Isabel Muñoz Valenzuela.
Para MUNDO FEMENINO.
Al cruzar por las aceras van fingiendo las obreras una lúgubre espiral: el taller es la partida y girando por la vida va a morir a un hospital.
Largas trenzas perfumadas con olor a cerezos.
suelto a veces el cabello, cual cascada de hilos de oro.
Son faros distantes, acaso los astros?
Pupilas abiertas por largo desvelo?
Almas de los nuestros, que en amante celo hechas llama vivanos miran de arriba como si asomaran al balcón del Cielo. de las víctimas humanas.
oh, vencidas del montón!
Oh, anónimo heroísmo que vegeta en el abismo funeral de la ambición!
Van huyendo con los dias ilusiones y alegrías de su mustio corazón; y ellas siguen sus faenas, levantando sobre penas el altar de la aflicción.
iInfelices peregrinas, que avanzando sobre espinas.
van al término fatal. Qué dolientes son los viajes por los áridos paisajes de su vida siempre igual!
Cuando en la fuente desnuda te inclinas, tu sedosa cabellera envuelve tu cuerpo marmoreo, y cuando tu figura virginal se refleja en el agua, pareces una musa escapada del lienzo de un pintor.
Sus fosforecencias, son talvez, rezagos de otras existencias?
Tu cabello tiene natural perfume de nardos y rosas, de fruta madura, que hechica, que embruja.
Oh, las pálidas figuras, misteriosas sepulturas del ensueño juvenil. Oh, las mustias primaveras que retratan las ojeras de sus rostros de marfil. Robres huérfanas de amores, de esperanzas y de flores, que no saben del placer.
Icuántos brotes de ternura ha truncado la amargura en sus almas de mujer!
Qué sublime y angustioso debe ser su doloroso Tatilar de estrellas en la sombra inmensa; la noche parece que callando piensa.
y envuelta en el manto de suave tristeza, la luna, en el templo de los cielos reza.
ANDREA ROSE Peruana.
Calle arriba, calle abajo van las hijas del trabajo que no saben del placer: van con fúnebres andares del taller a sus hogares, y del hogar al taller. Una quedeja de esa senda de oro he guardado junto la mi corazón, y es como si todo tu ser estuviera dentro de él, como (si toda tu alma presa estuviese en la dorada maraña de ese (cabello tjera Tomás Felipe Camacho.
CUBA Tú Para: MUNDO FEMENINO ORBE DESPUÉS DE HABER LEÍDO EL LIBRO LLANTO SIN LÁGRIMAS Hoy le crecen versos a mi sangre En mis manos se queman las palabras en mi garganta se ocuna el timbre de tu nombre.
Pero estás lejano, dividido en fronteras, Lejano en el tiempo de la ruta y la estrella Un ligero paisaje caé en festones rubios Sobre la piel amarilla de la tarde Pero en mi cielo crece la azul pulsación de tu imagen.
Escribe: Maria Alvarez de Guillén Rivas. Amary Zalvera Un nuevo número de esta impor tante revista que dirige el dilecto amigo Gustavo Adolfo Ortega está próxima a aparecer, con un selecto compendio de importantes articulos y bellas selecciones poéticas. Es una gran revista centro americana que cuenta con las me jores colaboraciones de intelectua les destacados que está viendo la luz en nuestro país desde el pasado mes de diciembre. También de ella haremos un detenido comentario en nuestra próxima edi ción.
Siguen creciendo versos en mi sangre, Apenas pulsarás un latido en los cristales el viento detenido detrás de los celajes Murmurar mi nombre sin detener su cauce.
Sobre tu piel voy quemando mi vida.
En tus manos la llave cerrará mi partida.
Yo te traigo en mi lágrima viva el testimonio de que te quiero más allá de la sangre.
Nélida Aurora Oviedo.
Argentina Mar con Alas ¡Eso es tu libro: Llanto sin lágrimas! El eterno femenino. la razón substancial de la vida de toda mujerl.
Amor, canalizado en dolor a través de las arterias estremecidas de tu cuerpo nervioso, basta colmar con ese ardiente vino el Vaso Sacro que, cual talismán, legas a los tuyos desbordante de amargura!
Llanto sin lágrimas. Porqué quieres negar a tu suplicio el valor purificante de la lágrima, si es ella la que penetra el ser intimo, la que honra las entrañas, la que abre surcos en la subconciencia hasta el momento lúcido en que brota a la superficie una eclosión de ricas gemas rutilantes: acción, vigor, heroismo!
Hay en tu ser gérmenes prometedores: exquisito sentimiento, rara sensibilidad, inquietud anímica, exaltado amor! Transforma tu dolor en gozo espiritual, vive, siente dentro de ti, a CRISTO, y olvidando lo minimo, acoge lo máximo, dejando lo efímero exalta lo eterno. para curar lo propio, escruta lo ajeno y acaso, cuando tú menos lo esperes, tu pequeño corazón doliente ya no te hará daño dentro del pecho! En una aspiración sublime las gavillas de tu carne se habrán abierto y podrás ver cómo crecerá en ti, una personalidad gigantesca abarcadora de humildadl.
ganarás profundidad y altura. las acres substanciales del dolor habrán subido desde la raíz a la superficie y en la copa florecida de tu alma purificada, harán nido las aves del cielo! toda tú. Hylda Pino de Sandoval, serás un canto estremecido y profético que AMERICA escuchará con emo El Amor y el Dolor dos alas que elevan a la Humanidad hasta los cielos! Tú las posees: ensáyalas. desde mi lar, contemplaré tu vuelo!
a Sotto Voce Sombra de la golondrina sobre los vidrios del mar!
Aérea canción divina pasaba la golondrina.
Yo la miraba pasar toda negra y blanca. Fina.
saeta la golondrina por los espejos de sal en el ciento la garota toda blanca y gris. Qué alta la gaviota en el cristal de este viento que voltea mar a cielo, cielo a mar! en el verde azul perdida la luna de la mañana, y la gaviota, cercana, huyendo de pleamar.
Ya vienen los alcatraces desde la isla!
Parece que no llegara su lejania.
Quién los prende en el aire, quién los desprende.
cuando caen sobre el agua que resplandece?
Los alcatraces!
Vuelan como palabras lentras y graves. Sobre la mar.
lleno de alas y olas va mi cantar!
ción.
Vamos que amanece tu corazón tranquilo y apenas si el péndulo se distrae en el circulo.
Vamos: Hacia el manglar atento, que sueña desasirse, al madrigal flotante y diluido.
Vamos, para tatuar la costa con artista pincel de labios únicos.
La mañana del madrigal gemelo, Finida.
Vamos, en el mar: iQué se llena mi corazón de olvido. Ney Colo Pinzón)
Panameño María Alvarez de Guillén Rivas.
11 San José, Junio de 1952. Meira Delmar De Secreta Isla Colombia es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.

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