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MUNDO FEMENINO MAYO DE 1953 PAGINA TRES PAGINA LITERARIA POEMA DE LA SOLEDAD Subamos a la cumbre de aquella gris montaña.
Allá estaremos solos y más cerca del cielo.
Cogidos de la mano subamos la pendiente que nos ofrece el sueño.
may.
No temas a la vida: mis ansias te protegen.
Hay que tocar la luna y besar las estrellas. Desde la cumbre amiga te besaré los ojos. rozarin mis manos tus cabellos de seda. Solos, cerca de estrellas y de lunas inmensas, en un lecho formado con pétalos de rosas y alas transparentes, perdidas en el vuelo de alguna mariposa, soñemos tu y yo. Solos. Con el roce del viento, el aletear de un pájaro. el perfume de un beso y el parpadear de los luceros. Subamos lentamente y aparlemos las piedras (aunque sangren tus manos con las mías, no importa)
Para encontrarnos solos hay que subir la cuesta, porque sólo en las cumbres la soledad se encuentra.
MUNDO FEMENINO en esta edición dedicada a la hermana República de Cuba, presenta una selección poética de autores cubanos, algunos de ellos poco conocidos de nuestros estimados lectores, pero que en su patria tienen ya un me recido nombre cimentado no sólo en la bonda emoción de sus versos, sino en la depuración del estilo en los mismos, pues Cuba con mucha razón puede ufanarse de ser cuna perenne de poetas cuyo nombre será un eslabón más en la historia de la poesia universal.
Premetemos, en la medida de nuestras posibilidades, conlinuar presentando en futuras ediciones a otros nuevos valores, a fin de que vayan ellos también conquistando ſuera, el renombre que han logrado dentro de ese vaso de pooesía que es Cuba, la más perla de las perlas.
Iniciamos la página con una composición de La Avella neda, figura cumbre en la Literatura Femenina.
RAUL GONZALEZ DE CASCORRO. Profesor cubano, autor de varios libros, del que lleva por título MOTIVO Hemos tomado la presente composición poética. EL Por GERTRUDIS GOMEZ DE AVELLANEDA MI SECRETO ANNA Mi alma No creo en el amor. No creo en nada.
He perdido in ſé que en mi alma habia.
No puedo ya sentir lo que sentía, ni quiero recordar que fui tu amada.
No puedo creer en ti. Desengañada, sin ilusiones voy, triste y sombría, andando por la senda que otro día recorri de tu amor acompañada.
Pero nadie lo sabe. Es un secreto que guardo en lo profundo de mi pecho como joya sin par, como un tesoro; nadie al verme cruzar con paso inquieto creerá que llevo el corazón deshecho ni que mi pena oculta, a solas, lloro.
MARY CRUZ, seudónimo correspondiente a la joven prom ſesora camagueyana, Georgina Cruz Salazar. Dra. en Letras y Filosofía. Ha publicado varios libros de versos, y su colaboración es muy solicitada en las revistas femeninas de su patria.
Tu tienes la ternura doliente de la estrella y el remoto descanso del eter en las ondas; y llevas en las manos el gesto que remeda el perenne murmullo matinal de las frondas. tienes el encanto proclive de la tarde que avergüenza la seda de la fruta y la flor; y llevas la sonrisa profética del aire, y, en tus tibtas promesas, un ánfora de amor. tienes el misterio señalador de un faro y un enigma infiltrado de luz plenilunar; pues llevas la estatura luminosa de un canto y las profundidades abisales del mar.
RAMON ALVAREZ SILVA Profesor Universitario, autor de seis libros de versos y prosa siendo de CLEPSIDRA uno de ellos de donde tomamos la anterior selección.
CUBANO En la aurora lisonjera Yo temblando de emociónde mi juventud florida, escuché concento tal, en aquella edad primera y en cada palpitación breve y dulce primavera, comprendi que el corazón de tantas flores vestidallamaba a un ser ideal.
Recuerdo que cierto dia Entonces lah! de repente, vagaba con lenlo paso no como sombra de un sueño, por una floresta umbría, sino vivo, amante, ardientemientras que el sol descendia se presentó ante mi mente melancólico a su ocaso.
el que era su ignoto dueño.
Mi alma que el campo enajena Reflejaba su mirada se agiiaba en vago anhelo, el azul del cielo hermoso; y en aquella hora serena no cual brilla en la alborada. de místico encanto llena sino en la tarde, esmaltada bajo el tórrido cielopor tornasol misterioso.
me pareció que el sinsonte Ni hercúlea talla tenía, que sobre el nido piaba; mas esbelto cual la palmay la luz que acariciaba su altiva cabeza erguía, la parda cresta del monte, que alumbraba parecía cuando apacible espiraba; por resplandores del alma.
y el céſiro, que al capullo Yo, en profundo arrobamiento, suspiros daba fugaz; de su hálito los olores y del arroyo el murmullo cogí en las alas del viento, que acompañaba el arrullo mezclado con el aliento de la paloma torcaz; de las balsámicas flores; y de la oveja el balido, hasta su voz percibia y el cántico del pastor. llena de ertraña dulzuray el soñoliento rumor en toda aquella armonia del ramaje estremecido.
con que el campo despedia iTodo me hablaba de amor! del astro rey la luz pura.
iOh, alma! di. quién era aquel fantasma amado y sin nombre. Un genio lun ángel. un hombre? Ahi lo sabes! era él. que su poder no te asombre.
Volaban los años, y yo vanamente buscando seguía mi hermosa visión.
Mas dió al fin la hora: brillar vi tu frente, y es él. dijo al punto mi fiel corazón.
Porque era, no hay duda, tu imagen querida. que el alma inspirada logró adivinaraquella que en el alba feliz de mi vida iniré para nunca poderla olvidar.
Por ti fué mi dulce suspiro primero; por ti mi constante, secreto anhelar.
y en balde el destino mostrándose fiero tendió entre nosotros las olas del mar.
Buscando aquel mundo que en sueños veía, surcolas un tiempo valiente Colón.
Por ti sueño y mundo del ánima míatambién yo he surcado su inmensa extensión.
Que no tan exacta la aguja al marino señala el lucero que lo ha de guiar, cual fija mi mente marcaba el camino de hallar de mi vida la estrella polar.
Mas iay! yo en mi tierra conozco serpiente que ejerce en las aves terrible poder.
Las mira, les lanza su soplo atrayente, y al punto en sus fauces las hace caer. quién no ha mirado gentil mariposa siguiendo la llama que la ha de abrasar. 20 quién a la fuente no vió presurosa correr a perderse sin nombre en el mar. iPoder que me arrastras. Serás tú mi llama. Serás mi oceáno. Mi sierpre serás. Qué importa? Mi piecho te acepta y te ama, ya vida, ya muerte, le aguarde detrás. la hoja que el viento potente arrebata. de qué le sirviera su rumbo inquirir. Ya la alce a las nubes, ya al cieno la abata, volando, volando le habrá de seguir.
Cruel Incertidumbre No quiere. dice Jacintoser rativo de New York, Aquí en mi Cuba he nacido, bajo su palma y su sol y no quiero, bajo el cielo de otra patria, otro ſulgor. Qué no hable inglés. Castellano es el idioma mejor.
Yo no quiero, lo repito.
ser nativo de New York.
Allá sería limpiabotas aquí puede ser dotor.
Allá puede que me linchen por pensar en alta voz.
Que aquí sólo hay democracia, otra patria no hay mejor. Aquí gozo de lo lindo con rumba parche y bongó Aqui venero lo mismo a la virgen. que a Changó.
Aqui busco a las mulatas que nacen bajo este sol, por el talle de Sandunga y el azúcar en la voz.
Me proteje el sindicato tumbe caña o siembre col y hasta un puesto a candidato de mis sueños voy en pos.
Que esto es Cuba y sólo en ella quiero haber nacido yo. Carmen Cordero otra joven poetisa camagueyana autora del libro PRESENCIA NEGRA.
Comprendo, amada, que tu ser no quiera compartir más mi desdichado sino.
Cómo pedirle que seguir prefiera de espinas y de abrojos el camino que a un pobre iluso soñador espera.
Porque sea mi pasión inmensa y pura y esté mi alma de tu imagen llena, no bastan a exigirte que mi pena, mi tristeza etemal, mi desventura, compartas siempre, compasiva y buena.
Si, justo es que tu noble corazón, sincero, alegre, cariñoso, puro, que su estéril amor llorando auguro, sus leves alas tienda a otra ilusión que paz le brinde y bienestar futuro. Vé en busca, vé, de la dorada palma que merece y persigue con empeño tu sensitiva y candorosa alma. plegue a Dios que tu amoroso sueño goces a par de mi perdida calma. aunque sumido en la orfandad me dejas, sin ansias, sin amor, mi ser deshecho, nunca mi labio expresará despecho; mis tristes ayes, mis profundas quejas vida tendrán en mi agitado pecho.
No maldiré tu decisión, mi vida; no eres culpable de la adversa suerte que mi amiga presiente hasta la muerte.
Piadosa muerte que hallará encendida de amor el alma que juró quererle.
Mas un favor, en mi penar, le imploro: cuando encuentres el gozo y la ventura que compensen del hoy tu honda amargura, brote en lu faz el sonreír que adoro y por mi eleva la oración más pura.
MOISES GARCIA LLANO, de su libro de versos ALBA miembro a la Asociación y escritores de Artemisa. Cuba.
Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.
Este documento no posee notas.