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Lunes 28 de Noviembre, 1955 MUNDO FEMENINO PAGINA NOWOWA WOWOWOWO WOWA LOWA OWO ROYAWOWOWA WOWA NUESTRO HOMENAJE LA MEMORIA DE DON FLORENTINO CASTRO SOTO EN EL QUE HABRIA SIDO EL DIA DE SU JUBILEO alrededor de la cual compartimos el sentimiento que mañana ha de embargarles.
HOMENAJES No podemos callar en este día los elocuentes homena jes que al señor Castro Soto han rendido distinguidos repre.
sentantes de la intelectualidad costarricense, verdaderos conocedores del valor humano. no lo hacemos por cuanto ellos vienen a corroborar nuestras palabras. Son algunos jui.
cios recibidos con motivo de la publicación de la Biografía del señor Castro. Vengan ellos a esta página como un homenaje más a su memoria.
De Don Luis Dobles Segreda: La vida de los patriarcas es la historia de los pueblos, ya sea tocando concertina o haciendo millones. Felicitaciones por la justicia hecha al eminente varón Don Florentino Castro Soto.
De Don Rodolfo Castaing Florentino Castro Soto uno de nuestros más destacados compatriotas en el ejercicio de su amor al terruño. Su ejemplo de laboriosidad inteligente y bien orientada le hace me recedor al homenaje en que tan justamente se le exalta.
Licenciado Héctor Marín Torres Para nosotras que tuvimos la satisfacción de hacer de su vida un ensayo biográfico el cual se publicó a fines del año pasado, ya casi en las postrimerías de su existencia valiosa en ejemplos cívicos, sociales y morales para el país que tuvo la honra de tenerle por hijo, para nosotros que le admiramos tanto, que escogimos su nombre para iniciar una labor literaria tendiente a estimular las mejores virtudes y más sobresalientes méritos de las juventudes de hoy y de mañana, es sumamente impresionante referirnos en fecha tan señalada a él, quien con aquella visión que siempre tuvo, fruto podríamos decir, de su inteligencia, de su gran sentido de observación y de su perspicacia, nos dijo cuando apuntaba el alba de sus setenta y nueve años: No habrán ochenta, no habrá jubileo.
Tuvo razón. Una triste razón que hoy conocemos y la cual hace que la vista de nuble y tiemblen las manos agitadas por la angustia de lo irremediable. en verdad, no estará mañana físicamente presente Don Florentino Castro Soto para la celebración de su Jubileo, y decimos físicamente, porque en el aspecto espiritual su vida se proyecta día con día al recordar todos y cada uno de los actos que le señalaron como hombre probo, justo, enérgico, valeroso y digno; titán del trabajo que hizo de éste su escudo con el cual se enfrentó a la miseria de la que salió tres veces triunfante, ya que la adversidad salióle al paso dispuesta a abatir sus esfuerzos, como abate el rayo al frondoso roble que fustiga con el cuchillo de su furia; paladín de las batallas cívicas libradas airosamente desde las columnas de los diarios contra toda clase de adversarios, fuesen éstos quienes fuesen; soldado del deber del cual no se apartó jamás, porque cumplirlo en el más exacto sentido de la palabra fué su divisa perenne. Devoto del honor que fué en su vida única estrella que señaló sus pasos y amante padre que volcó en sus hijos toda la ternura que espléndida aflaraba corazón.
Por eso, por todo eso la fecha de mañana será para su familia y para cuantos tuvimos el privilegio de su amistad, día de emocionados recuerdos, dolorosos porque su ausencia física nos priva de estrechar su mano franca, generosa, presta al amparo de sus miles de empleados, presta al aporte para las obras culturales o de beneficencia, para todo aquello en donde fuese precisa la colaboración del ciudadano interesado en el buen marchar de cuanto beneficiase al empleado, al amigo o a su propia patria.
Mas no han de ser únicamente dolorosos los recuerdos, no; que no pueden ser únicamente dolorosos cuando se contempla la maravillosa proyección de una vida pletórica de méritos y virtudes que honran a su descendencia y enorgullecen a la sociedad que le tuvo por hijo predilecto y que tendrá en su ejemplo la mejor inspiración para orientar a las juventudes del futuro.
Val ga pues la satisfacción de tan inapreciable herencia moral para que el dolor muy justo que ha de embargar a los suyos mañana al no poder celebrar el que con la presencia del patriarca habría sido un día plenamente feliz, sea mitigado por la satisfacción de saberse descendientes de un hombre cuya memoria perdurará en el tiempo, que agigantará.
indiscutiblemente, la veneración debida a quien de manera tan amplia y tan profunda supo rendir culto al trabajo, perfilándose como el primero de los trabajadores costarricenses, ya que supo arrancar a la tierra que regó con el sudor de su frente según el mandato divino, el fruto que sólo logra quien con mérito verdadero, propio de los titanes de la poluntad y del esfuerzo se imponen a todas las adversidad e imposibles.
Por tales méritos y virtudes y con motivo de la fecha que sus familiares y amigos hemos de conmemorar emocioen su El itinerario excepcional fecundo del señor Castro Sota en las actividades a las cuales ha destinado los atanes todos de su vigorosa vida, lo hace digno del propósito plausible de enaltecerlo.
DON FLORENTINO CASTRO SOTO Doctor don Antonio Peña Chavarría Don Florentino Castro Soto uno de los ciudadanos ejemplares para los jóvenes de Costa Rica por su espíritu de empresa y de trabajo.
Don Alejandro Aguilar La vida de Florentino Castro, es una de las más dig.
nas de Costa Rica, una de las que más ejemplo ofrecen.
De Don Edwin Meoño Vincenzi nados mañana, rendímosle este sincero homenaje a su me.
moria, que debe ser honrada por todo buen costarricense, porque él, no por el solo hecho de haber levantado una fortuna, sino por la forma en que la levantó, merece ese reconocimiento, que no es solo nuestro, sino de cuantos le justipreciaron. al rendirle este homenaje, sea oportunidad para pedir otra vez se otorgue su nombre a la calle cuyo terreno tan generosamente dono: la que comunicará el Aeropuerto del Coco con la entrada a la ciudad por el Paseo Colón. Lo pedimos porque lo juzgamos de justicia, pues así como se levantan estatuas y monumentos, columnas y placas a quienes se distinguen en la política, las artes, las ciencias, etc. así, creemos, deben levantarse también en honor a quienes como el hicieron del trabajo un culto no sólo para su propio beneficio como es Igico y humano, sino que además lo pusieron al serficio y engrandecimiento de la economía nacional.
Mucho es, ciertamente lo que podríamos escribir alrededor de su nombre, pero más cierto es que la emoción diluye pensar en oración ferviente que silenciosa musitamos evocando los tantos y tantos actos de su vida ejemplar para la patria, para la sociedad y para la familia, muy especialmente de su señora esposa, de sus hijos, nietos y bisnietos. Don Florentino Castro es un hombre que ha destaca.
do en la vida nacional por su esfuerzo, su dedicación al trabajo, su honradez y su dinamismo sin límites, hasta convertirse en legítimo exponente de la industria, el comercio y la agricultura del país.
De Don Noé Solano Don Florentino es un símbolo y un ejemplo dignos de ser admirados e imitados. El elogio a Don Florentino es justo, y aunque a él nada puede envanecerlo, creo que es nece.
sario en esta época de pereza e irresponsabilidad que corre nuestra juventud, y así su ejemplo pueda cobrar caracteres de faro. Eso es provechoso y necesario.
re Ultima fotografía del patriarca con un grupo de nietos.
La última fotografía de don Florentino con un grupo de sus hijos.
COMMONUWAKOMODOMOMUNION UMUMONONOMON IMUNOMORUNUMU KONUMUROINONDOWA OWOWIATOWY Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.

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