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PAGI NA осно MUNDO FEMENINO 13 Setiembre de 1957 CONFESIONES DE UNA MUJER COLECCIONES DE LICORES ESCRIBE: CARICIA ANDRADE EN BOTELLITAS MINIATURA 18 CLASES DIFERENTES DE LICORES EN SU CAJA DE EXHIBICION POR C15. 00!
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FABRICA NACIONAL DE LICORES obb DEPORTIVOS VISTAZOS No Señor, todavia no, suplicaba yo en silencio, deja que se duerman cansados, deja que seu de noche, cuando ya estén dormidos, concededme ia gracia de que hoy todavía pueda dormirlos yo, que mi última noche pueda aún darles el beso de Bucnas Noches Mamita que ellos siempre piden. No Señor, yo voy, pero no todavía, quieres. Me esperas un poquito. así, dialogaba con Dios en tanto que las sombras de la noche se acercaban a la tierra vellamente extenuada por un día de intenso entregar al sol que la acarició sin cesar como sus besos dorados por valles y colinas, bosques laga en tanto que las aves ebrias de trinos y de luz se aprestaban al reposo junto a sus crías, o al arroyo junto a sus amados.
La lluvia, esa pertinaz lluvia de octubre ha.
bía cambiado el panorama totalmente. Ahora todo era gris, nebuloso, frío, de un frío intenso que se comenzaba a meter en mis huesos, haciéndo.
me temer laaproximación del momento y rebe.
me temer la aproximación del momento y rebe.
lándome a aceptarlo de manera definitiva. No, yo necesitaba un poco de tiempo más y habría de conseguirlo. El llanto pugnaba por hacerse pre sente, pero no era hora de llorar ni hacer cosa alguna que debilitara mi espíritu, porque si bien contra la invasión de glóbulos blancos había re.
medio, no se conocía ninguno embotellado ni en capsulado contra la debilidad de espíritu. Ese re.
medio sólo lo podía tener yo con un poco de fuer za de voluntad, y lo tendría a toda costa, pues continuaba empeñada en dormir a mis adorados hijitos aquella, que yo supuse última noche de mi vida.
Por un momento sentí la necesidad de una EL PINTOR BOLIVIANO inmediata reconciliación con mi conciencia, ca.
Viene de la Pág. PRIMERA be decir con Dios llamando, al Confesor para que al escucharme diérame la absolución y los sacra. cargo de Enrique Muñoz Herra ce sentir una total identificación con el motivo expresado.
mentos que como cristiana yo deseaba recibir, Todo ello sin caer en la exagepero hacerlo ya habría significado dar la voz de ESTADIO NACIONAL pié nunca hay nada escrito, los ción morbosa de algunos pintores alarma a todos los míos, así que decidí esperar Morados llegaron al terreno de jue que a fuerza de querer ser humaun poco más, entre tanto que iba examinando mi conciencia para tener a mano todo el fardo Domingo de setiembre go dispuestos a ganar y lo consi nos, sin serlo en la realidad, dede pecados cometidos, los naturales de un ser hu.
guieron. En el equipo perdedor forman la idea y prostituyen el mano que lucha por no salirse de esa fasoeta, Cumplieron su segundo partido hubo la mayor falla y esa fue en arte. En Alandia Pantoja hay arcon mucho amor a sus semejantes y una indede Campeonato los equipos Sapris su línea media, quien no dió apo monía perfecta entre el dolor y la cible ternura por los suyos.
sa y Cartaginés ante regular con yo a su línea delantera, teniendo realidad, es más, la presenta con Así que decidí esperar un poco más, en la currencia de público. El encuentro ésta que venir muy abajo en bus tal sentido armónico y tan bien seguridad de que el suceso no sería súbito. En.
en términos generales resultó dis ca de juego, pues creemos que all concebida la idea que sin restar tre tanto llamé a mis hijitos junto a mí, hacien.
creto ya que el Campeón Morado fue donde estuvo la principal fa simpatía e identificación con el do un nido de mis brazos en los que les acuné sin cuatro de sus jugadores titula lla, siguiendo la atacante quien no dolor, lo hace ver amigo. Alandia sintiendo la dicha infinita de hacerlo, al mismo res y los Brumosos no dieron todo supo aprovecharse de la fallas, Pantoja es un poeta con los pince tiempo que luchando con la pena que para mí el rendimiento que de ellos se es muy grandes, del portero Sapris les, y lo es más todavia, porque era el sentir que los hacía quizás por vez pos.
peraba. Los primeros en anotar sista, logra conmover al profano y contrera. Oh, Dios mío, qué momentos horribles a.
fueron los capitalinos al cobrar quistar al escéptico.
El resultado final de x como quellos! Sin embargo, a cada instante volvía a Catato Cordero un castigo de pena victoria del Deportivo Saprissa.
No se podría hacer referencia mí el propósito de alargar los minutos, de máxima. Los provincianos pierden particular a ninguno de sus cua char brazo a brazo la que propuesta estaba a dos brillantes oportunidades de em dros, porque en todos está preFUTBOL INTERNACIONAL: arrancarme del lado de los míos, y, al proponér.
patar el partido cuando el portero sente su estupendo arte, en el cual melo, una nueva oleada de valor venía a mí ani.
Morado rechaza dos remates tese revela el artista tanto como el mándome tanto, que por instantes casi dejaba niendo los defensas Saprissistas BUENOS AIRES, Rep. Argentina hombre, acaso no común en el arde sentir tremendo frío que como preludio del que entrar en su auxilio. Minutos te, en donde siempre uno elimina otro, ya yo estaba sintiendo desde rato hacía.
River Plate después terminaba el primer tiemal otro, desluciendo en consecuen De esta manera me encontré de pronto con San Lorenzo po. En el segundo, los primeros cia el mérito verdadero de la obra, mis dos hijitos lado a lado y mis tres sobrinos, Racing minutos el equipo Cartaginés pero, para mejor decir, aminorándolo. también todos pequeños rodeando mi cama, en Boca Junior dió la oportunidad mejor cuando No es este felizmente el caso de la semi penumbra de la alcoba escuchando uno Huracán se castigó al Saprissa con tiró de Alandia Pantoja, en donde, para de mis relatos de ex profeso para ellos hecho, en Estudiantes doce pasos siendo el encargado de lelamente marchan ambos, lo que los que les hablaba de las cosas que a los niños Argentinos Jr.
ejecutar el portero Meneses quien ha permitido lograr en su arte esa gusta escuchar: cuentos y fantasías acordes con Atlanta con poco control envió la pelota expresión maravillosa de huma su espíritu ingenuo y soñador.
fuera de la portería y fue ahí don nidad, colocándole a él entre los lo lejos escuchaba el rumor sordo de la de los provincianos perdieron la Domingo de setiembre pintores jóvenes que lograrán ver vida en la calle: pregón de los vendedores, sil.
confianza en el partido, y el sedadero renombre.
bidos, apresurados pasos de los que corren en pos Gimnasia y Esgrima gundo tanto Morado vino en buen de algo por qué o por quién vivir; ruido de ca. Oeste remate de Carboni al recibir gran Suscríbase a rros que ahogan por momentos la voz humana, Lanús servicio de Herrera. Sigue la atay todo ese maremagnun insoportable de la civi.
cante Saprissista martillando consj Veles Sarfield Tigre MUNDO FEMENINO lización. tantemente muy bien apoyada por Teléfono 1024 De pronto, dejóse escuchar el rasguear de Independiente su línea media y el tercero lo con Rosario Central Apartado 4343 una guitarra dentro de la casa. Era un cuñado C 25 el ejemplar al pregón de mi hermana que, ignorante de que estaba siguió Cuty Monge en jugada de Noboys profundidad y con remate rasante.
o por suscripción bajo el mismo techo de una moribunda, al regre.
Sigue el dominio del equipo ca MONTEVIDEO, Uruguay pitalino y cuando Herrera se cortó por su extremo derecho de ahi Domingo de setiembre mandó bonito centro sobre la valla de Cartago y Marvin Rociri Peñarol guez con potente remate consigue Nacional el cuarto para su equipo del en Rampla Junior cuentro.
Wanderes Danubio Como se puede deducir de ezLiverpool te partido, el Saprissa jugó, poCerro dríamos decir, remendado y por Defensor eso se tenía al Cartaginés como River favorito en este partido, pero como todo el mundo sabe que en balom CIUDAD DE MEXICO, México sar de la oficina sentóse en la sala a tocar, como todas las noches, su guitarra, la que, por su se mejanza con el cuerpo de una mujer, bien podría hacer suponer que es una cintura la que se estrecha, y que el vibrar de sus cuerdas son suspiros y sollozos producidos por las caricias. Al escucharlo, todos guardamos silencio, yo con una extraña nostalgia pues muchas fueron las veces que llevada de mi entusiasmo y de la emoción canté junto a mi padre acompañada por este maravilloso instrumento; los niños, particularmente mis sobrinitos, sorprendidísimos de lo que ellos juzgaron un horror, olvidando que fue mucho mayor la bulla por todos hecha poco rato antes. De pronto, la mayor de mis sobrinos, salió corriendo mientras pretendiendo bajar Ja voz decía: Callese, que mi tia está muy enferma, que está muy grave. La guitarra enmude.
ció súbitamente. Yo, que todo lo había escuchado protesté alzando la voz todo lo que dentro de mi estado se pudo: No, no por favor, que siga tocando, yo quiero escucharle más, yo quie ro oírle, que venga aqui.
Por supuesto que mi pedido causó, de momento, sorpresa, pero luego, ante mi insisten.
cia, y acaso hasta presumiendo que era un rue.
go de moribunda, el buen muchacho vino a mi cuarto y sentándose junto a la cama comenzó, primero quédamente, luego con más brío a interpretar a ruego mío, canciones que vivían en mi recuerdo desde la niñez. Yo, había levantado las almohadas, y sentada un poco, en pugna perenne con el malestar que se empeñaba en hacerse más y más presente, pretendia seguir el ritmo de los cantos.
Así pasó un buen rato, durante el cual mi entusiasmo creció olvidándoseme por momentos mi dolencia, lo que esperaba, lo que temía. el cantor se fue también entusiasmando al ver có mo me estaba levantando el espíritu, hasta que, de pronto, su voz y la mía se confundieron, pues yo, que siempre tuve a flor de labio una canción tanto como una risa, no pude sustraerme, ni aun en aquel instante al embrujo del canto, y canté, canté, sí, primero quedo, muy quedo, luego más y más fuerte, hasta que, sin duda alguna los que me escuchaban pensaron. hoy puedo reirme de aquello y así lo hago que era el canto del cisne, y salieron a todo correr llamando a mi hermana que atendía sus quehaceres en su farmacia. Llegó, no cabe duda que alarmadísima, y lo primero que hizo fue tomarme el pulso que, lógicamente estaba acelerado, pero hoy todavía puedo asegurar que aun cuando ella lo aseguró no se debió esta vez sólo a la fiebre, sino al entusiasmo, al júbilo que por unos instantes me embargó.
Se acabó la sesión de música, por supuesto, y el deleite de los oídos lo sufrieron los brazos a los que como penitencia se les impusieron los pinchazos de otras inyecciones restauradoras, las que, en verdad dieron a mi cansado cerebro el reposo que yo le estaba negando a fin de no ser vencida por el definitivo. Recuerdo todavía cómo al sentir que el sopor me invadía, me re.
belé prometiéndome que apenas descansaría un ratito, sólo un ratito.
Pero, el sueño reparador se posesionó de mí durante muchas horas, y, cuando desperté el silencio más profundo me rodeaba. mi la do, mis dos hijitos dormidos con la dulce expre sión de la inocencia confiada. Di tic tac del re.
loj parecía señalarme que el tiempo seguía implacable su marcha, pero que mi vida seguía también marcando su compás al tic tac de mi corazón. Qué había pasado? Era esto la muerte?
No, no podía ser. Tomé mi pulso que se encon.
traba más sereno. El frío, tampoco estaba jun.
to a mí, antes bien un sudor copioso bañaba mi rostro pero tampoco me sentía abrasada por la fiebre. Continuará)
पHH0 dei cauipo. co Cuidando la salud del pueblo, velando por la pureza de los alimentos se hace patria Domingo de setiembre OPTICA TRENANG Eso hacen las INDUSTRIAS GARRIDO LLOVERA al elaborar con gran cuidado y productos de primera calidad el inigualable Zacatepec detrás Iglesia La Merced León Atlante Dr. TREJOS Irapuato América EXAMEN GRATIS DE OIDOS Zamora CON AUDIOMETRO Cuantla Toluca Audífonos de alta potencia Guadalajara electrónica Morelia Atlas Tel. 1836 Ap. 1811 Nexaca San José Costa Rica Tampico Oro 5 2 2 0 0 1 0 ACEITE VENCEDOR Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.

    Deportivo Saprissa
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