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Lunes, 13 de Marzo de 1916 EL IMPARCIAL PAGINA nuestra limitación mortal, aun en ellas sus tesoros volanerstamist. El retorno a la Patria LOS LUNES El Imparcials El verbo de la noche y el verbo tiempo para modeli isto de las El Támesis glorioso SI todas almas culYa desde las riberas det Ket os verbos sean eternidades en el tura helénica, oirán entonces la seno de la luz, como explicaba el voz profunda de la India Sagra El retorno a la tierra natal ha sido tan Gardens, remontando el curso, mago Apolonio de Tyana. Para da. Aguilas y topos son las bes Sentimental, y tan mental, y tan divino, el Tiinesis tiene el encanto de el iniciado que todas las cosas tias que simbolizan los modos del Que aún las gotas del alba cristalinas están los ríos legendarios, que en EDE tro tiempo se representaban eh crea, y ninguna recibe en heren humano conocimiento! Aguilas En el jazmín de ensueño, de fragancia y de trino.
los blasones ciudadanos como cia, la luz es numen del verbo. de ojos soberanos, y topos auditoPor el Anfión antiguo y el prodigio del canto viejos dioses apoyados en una Las palabras en su boca vuelven res!
Se levanta una gracia de prodigio y encanto ánfora o recostados en la pella, 66 a nacer puras como en el amaneEL VERBO DE LA NOCHE cer del primer día, y el poeta es Que suma carne y hueso, como en el pan y el vino.
de que brotaba un claro manan un taumaturgo que transporta a EL VERBO DEL SOL!
En el lugar en donde tuve la luz y el bien, tial, y con la faz ornada por it!
los círculos musicales la creación na inmensa y blanca barba que Ramón del Valle Inclán. Qué otra cosa podría, sino dejar un canto luminosa del mundo: en los núme mi Roma, mi Atenas, a mi Jerusalén?
intentaba copiar las espumas fluviales Como las lejanías, ros pitagóricos, aprisiona las Visión de la Guerra deas de Platón. Pero las imáge. Palabras de Exprimida de idea, y de orgullo y cariño, hasta en los días claros, hacennes, eternidades de luz, sólo deDe esencia de recuerdo, de arte de corazón, se aquí borrosas y desvaídas, el Concreto ahora todos mis ensueños de niño La guerra es hermosa para ti, ſbres pueblos lanzados al mar, al jan en la palabra la eternidad paisaje de todos los rincones Castelar Sobre la crin anciana de mi amado León.
meandros tiene un último tér oh joven arduo! que, lleno de viento y a la tumba.
de su sombra, un rastro cronolómino de ensuefio. Los cipreses lusiones de gloria, has nacido Para tí, político, que después gico de aquello que los ojos conBendito el dromedario que a través del desierto parecen ahilarse en la cimbre con buena estrella. te respeta de la carnicería irás a regocijar templaron y aprendieron de una En una guerra os toca ser, o Condujera al Rey Mago, portador de mi bien, de las colinas remotas; el agua rán las balas enemigas, mien. te con los restos de la desgra vez. El pensamiento humano es vencedores, o vencidos. Si sois que se dirigía por el camino incierto de la corriente mansa espejea y tras tus compañeros vayan ca. cia o a inflarte al amparo de la como el fruto sagrado del Sol. vencidos, la integridad de vuestra En que el astro de oro conducía a Belén.
yendo como frutas maduras de victoria y tramarás una nueva Los mitos helénicos nacen en apenas riza las imágenes inver patria corre gran peligro, porque una rama seca. saldrás victorin infamia para que, cuando la na las cristalinas cuevas de los mon crecerá mucho el ensoberbecimien Amapolas de sangre y azucenas de niere tidas de las arboledas cercanas, 80 en las luchas de tal forma, ción haya recobrado la salud tes, en el verdoso seno de las fronto de los vencedores.
He mirado no lejos del divino laurel, de las torrecillas, de los tejados que cuando regreses entre ellos perdida y sus venas hayan vuel das, en la azul ribera del mar. Si de pizarra, de los mástiles con si sois vencedores, el venceY he sabido que el vino de nuestra vida breve lleno de orgullo de vencedor, ta to a hincharse, busques nuevas el eremita ama su yermo, es por dor es el César, su carro de guePrecipita hondamente la ponzoña y la hiel.
banderolas, y las frondas de los sauces caen como cabelleras, y aclamarán como a los primeros discordias que traerán una nue que su pensamiento se reposa fue rra se ha dorado en la electrici Mas, sabe el optimista, religioso y pagano, las masas de castaños, de ol hijos de la patria.
ra aventura de odios y de enri ra del mundo, y para mantener dad de los combates, su púrpura Que por César y Orfeo nuestro planeta gira, mos, de álamos negros, forman Para ti, mercader, que harás dias.
lo en quietud huye las solicitacio se ha tenido de nuevo en la san que hay sobre la tierra que llevar en la mano el caldo gordo, explotando ini Para tí, artista pensador, que nes de la naturaleza. Toda llanu gre de vuestras venas, su herenun mismo fondo, con todas las Dominadora siempre, o la espada o la lira.
cuamente a los patriotas nece. encuentras un campo admira. ra es yermo espiritual. En la lla: cia se ha asegurado por un testagradaciones del verde, sobre las sitados y negociando con la Re vle donde puedes dejar volar nura sólo florecen los cardos del verdes praderas que parecen a mento El paso es misterioso. Los mágicos diamantes de engrandecimiento, de quietismo. El criollo de las pam fortuna, de gloria. No esperéis publica, bendecirás esa discor tus fantasias.
De la corona o las sandalias de los pies, rrancar en suave declive del dia, que te habrá llenado el bol pas debe a la vastedad de la lla la libertad en muchos lustros! En Pero para aquellas viejas que fondo del mismo río.
Fueron de los maestros que se elevaron antes, sillo de dinero y el vientre de sa no harán más que llorar, para lencio, y si alguna emoción des la libertad, si vencidos la patria.
nura su alma embalsamada de si la guerra se pierde, si vencedores, serán de los genios que triunfarán después.
En este escenario encanta dor pasan una semanas, los a: Tisfacciones.
Wool aquellas mujeres pálidas, aqueParece que Mercurio llevara el caduceo ristócratas ingleses. no sólo Para tí, banquero, que pres illos pobres niños desampara. piertan en ella los ritmos pagaEmilio Castelar.
De manera triunfal en mi dulce país, en los hoteles y en las quintas tarás tu dinero con un interés dos. para aquellas pensiones nos, es por la mirra que quema en que brotara pura, hecha por mi deseo, ocultas entre las umbrías o ago crecido; para ti, manjar de la solicitadas, para aquella luz de el sol latino, la lengua de EspaEn cada piedra una mágica flor de lis.
madas al borde del agua, sino muerte demás máquinas de matar hom quinas de coser. para aquellos den con medida monótona y tarseñor de la pólvora y noche, para aquellas tristes maña. En la llanura las imágenes son tristes y menguadas, se suceen barcos que tienen algo de ya Palabras de Por atavismo griego, o por fenicia influencia, bres, que venderás tus hierros a vestidos negros.
Siempre he sentido en mí ansia de navegar, tes y algo de hoteles, que son sesinos a precios fabulo808 da, son las sombras arrastradas como cajas de cristal y al mig Jasón me ha legado su sublime experiencia sangre y oro. y verdugo de pol Rubén DARIO.
en los pasos de un lento caminar.
oro ino tiempo como enormes cékY el sentir en mi vida los misterios del mar.
Allí la emoción está en lo largo de tas de flores. Palacios flotanlos caminos, y en lo largo del Oh, cuántas veces, cuántas veces oí los sones tes anclados en los rincones Qué gran diferencia entre el di De las sirenas líricas en los clásicos mares!
propicios, donde el agua es más cosas. Aquel horizonte monótono neral que se gasta en matarse los cuántas he mirado trapeles de tritones clara y el paisaje más bello. Bay curvo ante el cual los ojos se a hombres y las 3, 000 pesetas que cortejos de ninfas ceñidas de azahares!
del Sol jeles en que no hay trepidacióti duermen un día entero de jornada costó el descubrimiento de Améride motores ni humo de otras Cuando Pan vino a América en tiempos fabulosos aquieta y aniquila las almas. Es ca por Colón, que enorgullece a chimeneas que las de la cocina, La edad de oro amanecía, y los de los valles a rados, verdes, inten el desierto donde la fantasía mue la humanidad!
En que habían gigantes, y conquistaban Pan donde el maitre hotel ad. Baco tierras incógnitas, y tigres y molosos griegos, divinos pastores, contem sos, experimentaban la emoción re de sed. Estas llanuras, cuando tua de oficial de cuarto. Rasoldel.
plaban aún las pálidas estrellas. mística de la Suma. Lo que ha son recorridas por los pasos del Custodiaban los templos sagrados de Copán, Todos estos navíos de placet Era en el silencio de las majadas, bían aprendido de una manera se hombre, parecen largas como una Se celebraban cultos de estrellas, y de abismos, tienen una terraza llena de flosobre las colinas con olivos, entre moviviente, era gozado en quie. vida. En ellas los ojos, si no mi.
Se tenía una sacra visión de Dios. era res gayds, protegidas por tol los perros vigilantes. Sus almas tud. El conocimiento cronológiran al cielo, jamás gozan un acOdiemos la Ya la vital conciencia que hay en nosotros mismos dos de lona, donde las damise se rveelaron con la aurora. Aque co se hacía extático, y las almas to puro, la emoción de ser centros.
De la magnificencia de nuestra Primavera.
las, vestidas de colorés claros llos cabreros tenían los ojos sobe se despojaban de la memoria, co Ay! faltan las suaves Guerra simplemente ataviadas con un ranos de las águilas, y todas sus mo de la tela del tiempo, para a montañas que ofrecen desde sus Los Atlántidas fueron huéspedes nuestros. Suma intuiciones las arrancaron a la ce prender por el divino camino del cumbres la visión circular de los Revelación un tiempo tuvo el gran Monctezuma, jersey, para remar después, to Yo he visto la guerra; he preman el té, o tocan el piano, o lete entraña del Sol. Los bosques Sol. Aquellos hombres místicos, valles. Falta el conocimiento go senciado toda la tristeza de la luY Hugo vió en Momotombo órgano de verdad, leen. los quatro vientos se de sagrados senderos, los arroyos después de arar el pardo regazo zoso de la suma. a través de las páginas fatales de la Historia, abren los miradores. De un cha; he contemplado el dolor de claros, las grutas de donde vue de la llanura, de conocer sus sen son tan estériles para los o los heridos en las frías salas de Nicaragua está hecha de vigor y de gloria, barco a otro se tienden pasarelan en los ocasos los pájaros de deros uno a uno, como largos re jos, que el sentimiento clásico só los hospitales, y he visto los muerNicaragua está hecha para la Libertad.
las, por donde los amigos se largas alas, las sombras de los lau latos, se hacían centro y concienilo se nutre en el seno de las pala tos en el campo de batalla.
Pueblo vibrante, fuerte, apasionado, altivo; sitan: en el remate de los pa reles, las playas lejanas y doradas cia de visión sobre las cumbres. bras, mágicos espejos evocadores Pero más que todo esto, me ha Pueblo que tiene la conciencia de ser vivo, los que sostienen los toldos con el mar azul, fueron los pobla y cada noche estrellada, reunidos de rostros y mundos lejanos. horrorizado la crueldad que la que, reuniendo sus energias en un haz letean al viento las flámulas, co dores de sus almas. Con ojos ma en torno de las hogueras, sintien Qué enormes, silenciosas y des guerra despierta. Cómo remueve Portentoso, a la patria vigoroso demuestra, mo ilusorios pájaros tropicales ravillados bajo la luz, recibían to do el vaho de los rebaños, era el nudas las Pampas Argentinas! el fango en nuestras almas; cómo Que puede bravamente presentar en su diestra ly cautivos.
das las imágenes, que en ellas se goce de recordar las imágenes del En aquellas soledades, las pala nos habitúa con el sufrir ajeno, El acero de guerra, o el olivo de paz.
Alrededor de esta ciudad flow cifraban las normas del conoci. día y hacerlas revivir en el relato bras, a pesar de su esencia crono hasta casi la indiferencia. y sotante y efímera, que solo durit Cuando Dante llevaba a la Sorbona su ciencia miento. El sentir de los griegos de los más ancianos.
lógica y de representar todas las lo que duran los días de sol, un su maravilloso corazón florentino, fué hijo del mar y del cielo, de los fué un ciego cantor, para cosas en teoría, son más fecundas bre todo, cómo penetra el odio en enjambre de esquiſes, de yolas, Creo que concretaba el alma de Florencia; bosques con genios y de la lujuria quien la noche parecía eterna, que las imágenes del paisaje, más los corazones!
de botes, de barquichuelos de de las formas. La varia emoción quien primero en la música de las llenas del secreto de la vida que Sí, con la barbarie de la guerra su ciudad estaba en el libro divino.
todo género van y vienen inceque iban devanando los ojos por palabras hizo arder la corona del buscaba en la forma sensible el di surgen los atavismos bestiales La Patria es para el hombre lo que siente o que sueña santemente. Unos son alarga los agrios caminos, dió agilidad Sol! El padre Homero pudo lla vino Platón. Todo el conocimien borrados de nuestra selección. El Mis ilusiones, y mis deseos, y mis dos y afilados, con la proa y a los cuerpos y a las mentes. No mar a sus versos con un nombre to délfico de los ojos, es allí con enemigo no es ya nuestro hermaEsperanzas, me dicen que no hay patria pequeña.
la popa alzadas, como las pira.
recibían el conocimiento del mun de flor: HELIO TROPOS. vertido en ciencia de los oídos y León es hoy a mí como Roma o París.
a guas indias; otros rematan en do como una herencia fría en la Son las palabras espejos, mági en sutil aprender de topos. se no. Sentimos el deseo de matar.
espiral, al modo de las góndoQuisiera ser ahora como el Ulises griego urna de las palabras; para aquecos donde se evocan todas las ente el paso de las sombras cla. Qué horror! Si dejáramos hablar las venecianas, como mástiles Que domaba los arcos, y los barcos, y los llos pastores, las ideas significa mágenes del mundo. Matrices sicas, pero ninguno puede verlas a los corazones, no habría guerra, de violoncellos; otras son anban números y formas bajo el rit cristalinas, en ellas se aprisiona llegar. Aquellos criollos de las no habría enemigos.
Destinos. Quiero ahora deciros hasta luego!
chas y planas, y dejan flotar 80mo del Sol. Cuando se reposaban el recuerdo de lo que otros vieron Pampas, cuando hayan levantado Porque no me resuelvo a deciros Adiós!
bre el agua el terciopelo de un en las alturas mirando al fondo y nosotros ya no podemos ver por sus pirámides, habrán de sepultar CARMEN DE BURGOS.
RUBEN DARIO.
cojin sobre el que reposa una silueta femenina con un libro en la mano. Los herrajes son dorados o niquelados; las maderas, finas y pulimentadas.
140 Biblioteca de EL IMPARCIAL EDGARD POE 141 111 Biblioteca de EL IMPARCIAL EDGARD POE na bada previsora parece eut darse de ahuyentår de estos panotable y muy raro: esta coincidenmundo, hubiéramos pasado por dos loen en. y me paré para asegurarcolmo del buen jugador: pero el taleu rajes las cosas feas.
cia nos hizo simpatizar. Cada día que cos, tal vez pos dos locos inofensivos.
me de que realmente había adivinado to del analista se manifiesta más alla Apenas comienza el crepús.
pasaba nos veíamos con más frecuenNuestra reclusión era completa y no en quien pensaba.
de los casos señalados en la regia. Sug culo, enciéndese bajo las blan.
cia y me interesó mucho su historia de recibíamos visita alguna. El lugar de. En Chantilly. dijo. por compañeros de juego puede ser que ha su familia, que me contó minuciosanuestro retiro había quedado secreto.
qué se detiene? Usted mismo se hacía gan otro tanto; y la diferencia de excas lonas de los toldos los ar mente con ese candor y ese abandono, cuidadosamente oculto para mis antila obseraveión de que su pequeña estatensión en los informes así adquiridos cos voltaicos. Su luz violeta con ese olvido del yo, propio a todo guos compañeros. En cuanto a Dupin, tura le impedía dedicarse a la trageno reside tanto en la validez de la dese difunde dulcemente en el frattees que habla de sus asuntos perhacía varios años que no se trataba dia.
ducción, como en la calidad de la obclaror postrero del día, y chissonales.
con nadie.
Precisamente este era el tema de mis servación. Lo importante, lo princiTambién quedé muy asombrado con Mi amigo tenía un extraño capricho, reflexiones. Chantilly era un exzapate pea en la argentería y en la cris pai, es saber lo que es preciso observar.
la prodigiosa lista de sus lecturas, y, cómo definir eso? amaba la noche por.
ro de viejo de la calle de San Dionisio, Nuestro jugador no se limita talería de las vajillas, sobre los su juepor encima de todo, me sentí iteresa la noche. la noche era su pasión, y yo que sentía locura por el teatro, y hago, y, aunque este juego sea el objeto blancos manteles. Vestidas 06do por el extraño calor y la fresca mismo cal tranquilamente en esta mabía abordado el papel de Jerjes en la actual de su atención, no desdeña por mo para un salón, lås mujeres vitalidad de su imaginación. Buscannía, como en las otras que le eran protragedia de Crebilón: sus pretensioeso la deducción que nace de objetos se sientan en sillones de mim.
do en Paris ciertos objetos que constipias, dejándome arrastrar por la cones eran irrisorias y todos se burlaban extraños al juego. Examina el rostro tufan mi dnico estudio, vi que la amis rriente de todas sus extrañas originabre. sobre el fondo campes de su compañero, lo compara cuidadotad de tal hombre serta para mí un lidades con un perfecto abandono. La Por el amor de Dios. qué método samente con el de sus adversarios, obtre de la decoración, los fra tesoro fnapreciable. Así, pues, deci negra divinidad no podía estar siememplea usted, si hay método para eso, serva la manera de dar las cartas de ques y las camistis brillantes te dimos vivir juntos todo el tiempo que pre a nuestro lado.
pero falsificábay cómo ha podido penetrar en mi alcada jugador y, frecuentemente, gra.
los hombres son de una elegan.
durara mi estancia en esta capital: y mos. Al amanecer cerrábamos las pema?
cias a las miradas que dejan escapar cia ceremoniosa. el agua del como mis asuntos estaban un poco mesadas ventanas de nuestra casucha, en En realidad, estaba más asombrado los jugadores satisfechos, sabe los nos embrollados que los suyos, me encendíamos un par de bujías muy perfu río parece aquietarse más, de triunfos que tiene cada uno. Echa de de lo que aparentaba.
cargue de alquilar y de amueblar, en madas y que lanzaban rayos muy de El frutero es quien le ha conduciver los movimientos de la fisonomía, tenerse perezosamente, resistir un estilo apropiado a la melancolía fan biles y pálidos. En el seno de esta esdo a la reflexión de que el zapateril a medida que avanza el juego, y recoge se a seguir su camino haela tástica de nuestros caracteres, una ca casa claridad, nos entregábamos a los personaje no podía representar papeles un capital de pensamientos en las vaLondres, como si presintiera la sita antigua, ruinosa y extraña, de la ensueños. lefamos, escribíamos o hatan difíciles como el de Jesjes.
riadas expresiones de certeza, de sorgrasa de las máquinas y de las que habían ahuyentado a los inquiliblábamos hasta que el reloj de pared El frutero! me llena usted de asom presa, de triunfo o de mal humor. En grúas, el carbón de los remol: nos ciertas supersticiones, que habíanso, anunciaba la vuelta de la verdabro! no conozco a ningún frutero.
la manera de recoger una baza, adividera oscuridad. Entonces, corríamos a mos desdeñado oir, y que estaba situacadores, el horror de los docks. No se acuerda del hombre que na si la misma persona podrá hacer da en una caile apartada y solitaria través de las calles, cogidos del brazo, tropezó con usted cuando entramos donde a esa hora estarán ace.
otra después, y reconoce lo que ha sidel barrio de San Germán.
continuando la conversación del día, en la calle, hace cosa de un cuarto do jugado para hacerle caer en un labando su tarea las multitudes rondando al azar hasta uma hora muy Si la rutina de nuestra vida en este de hora?
20. Una palabra accidental, involunmiserables.
avanzada de la nochey buseando a tralugar hubiera sido fonocida por el En efecto, entonces recordó que un taria, una carta que se cae o que se Juan Pujol y azules 187 sagt de él.
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