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Domingo 18 de Mayo de 1917.
EL IMPARQIAI Página cinc ttttttt Selecciones de EL IMPARCIAL cargo de JOSE FABIO GARNIER tttttttt Página cristiana De la risa SERIE 34 Muerte de San Antonio Come conoce a Dios el cristiano, for Origenes (griego. Las divisiones de la Iglesia, por San Basilio (griego. Os he de contar cómo acabó decrepitud, les dijo: Voy a se.
De la risa, por Clemente de Alejandría (griego. su vida, pues deséais escuchar guir la ruta de mis Padres, coLos beneficios de la desgracia, por San Juan Crisóstomo (griego. este relato, y no hay otra, entre mo dice la Escritura. pues creo Muerte de San Antonio, por San Atanasio (griego. las acciones de Antonio, que sea que el Señor me llama. Sepul.
Contra el lujo y el adorno, por San Cipriano (latino. más envidiable.
tad, pues, mi cuerpo vosotros; Sobre el matrimonio, por Tertuliano (latino. Había ido, según su costum escondedlo en la tiera, y sed bre, a visitar los monasterios de fieles a esta prevención: que na la montaña que está de esta par die, fuera de vosotros, sepa te del desierto. advertido por dónde queda mi cuerpo. El día Cómo conoce a Dios la Providencia de que su fin se de la resurrección de los mueraproximaba, dijo a sus herma tos lo recibiré incorruptible de el cristiano nos: Esta es mi última visita, las manos de mi Salvador. DisMucho me admira que nos vea tribuiréis así mis vestiduras. Todo remedador de cosas ri: su explosión. El pudor yla ho jarnos de oírlas, no sea que pa mos otra vez en este mundo. Ha daréis al obispo Atanasio una dículas o de acciones visibles nestidad resplandecen en una rezcamos consentir en jubilos llegado la razón de mi parti de mis dos pieles de oveja, con Celso, por una especie de pro blas han visto una gran luz, y será proscrito de muestra repú risa modesta; la intemperancia culpables. Si a nuestra presen da, pues es el caso que tengo el manto en que me acostaba. sopeya, introduce un interlocu la luz es decir, Jesús, se ha blica, pues siendo las palabras estalla en una risa estrepitosa. cia se habla de cosas aflictivas, cerca de ciento y cinco años.
tor que exclama: remontado sobre los que esta expresión del pensamiento y de No privemos a los hombres de compondremos un semblante a nuevo me dió él y lo ha vuelto Oyendo estas palabras sus viejo el mucho uso. La otra piel. por qué vía conoceré yo ban aposentados en la región y las costumbres, es imposible lo que les es natural, pero aco fligido; seria prueba de cruel discípulos, rompieron a llorar, dadla al obispo Serapión. Vosoa Dios. Quién me enseñará el la sombra de la muerte. Así, que no haya algo de ridículo en modemos el uso al tiempo y las dad proceder de otro modo. Na y estrecharon al santo anciano tros, tomad mi túnica de pelo.
camino para ir a E1. Cómo me pues, nunca un cristiano pre quien se place en pronunciar circunstancias. Ha de reir da, por otra parte, más inmo entre sus brazos. El, semejante. Adiós, hijos míos! Antonio se lo mostraréis? Ponéis tinieblas guntará, ni a Celso, ni a ninguno ridículas palabras. Aquí hay siempre el hombre, porque tie desto que la risa en todo mo a un hombre que abandona ex va y no estará más con vosode los calumniadores de la doc caso ante mis ojos y no veo nada distrina cristiana: Por qué vía del Evangelio: El árbol bueno sin duda, pues, el caballo, te de los ancianos y personas a patria, les habló con aire jubide aplicar el pasaje ne la facultad de la risa? No, mento. No hay que reír delan traña ciudad para volver a su tros.
tinto. Después, como para resPronunciadas estas palabras, ponder a esta dificultad, y ex conoceré yo a Dios. pues que produce buenos frutos, y el ár que está dotado de la de relin. quienes se debe respeto, a me losó. Les exhortó a no aban los dos discípulos le abrazaron.
plicar al que le interrogaba potodos los cristianos lo conocen bol malo, malos frutos. El dis char, no siempre relincha. Sien nos que, por regocijarnos, ha donarse jamás en sus trabajos, Antonio elevó los pies, y miran en la medida que la flaqueza hu curso es el fruto del pensamien do el hombre un animal de ra yan dicho, de suyo, algo agra a no desalentarse nunca en los do como amigos a los bienavencubiertos de tinieblas, Celso di mana lo permite. Jamás, tampo to. Si, pues, los que excitan la zón, fuerza es que en todo muesdable y gracioso. Tampoco se ejercicios piadosos, y a vivir co turados que a su encuentro se co ninguno de nosotros dirá: risa deben ser proscritos de tre una prudente medida y que ha de reír con todo linaje demo si cada dia hubiese de ser el llegaban y cuya presencia lo ce: Aquéllos a quienes se hace pasar de las tinieblas a la luz. Quién me enseñará el cami nuestra república, no haya du no lleguen al exceso ni su serie. gentes, ni en toda coyuntura último de su existencia.
del sol, no pudiendo soportar la escuchado este oráculo: Yo mismos sernos licito excitarla, sión suave de las fibras del ros nas. La risa de las mujeres y nerlo para que consumase entre ares. Los dos discípulos comno para ir a El? El cristiano da de que no puede a nosotros dad, ni su alegría. Esa disten imponer a cualesquiera persocolmaba de alegría, rindió el esSus hermanos querían rete píritu y se reunió con sus pasu claridad, se creen lieridos y quedan como cegados por sus soy el camino, la verdad y la vi: pues sería absurdo imitar a los tro, que se produce como una de los jóvenes, con facilidad se ellos su sacrificio. mas él no plieron fielmente la orden que da. 5, marchando por esta vía, que se nos prohibe escuchar. armonía de algún instrumento, mira como una injuria; mas, de consintió; volvió a la montaña les diera. Amortajaron su cuerrayos. Nuestra respuesta es ha gustado todas las dulzuras Nas el extremo de lo absurdo toma nombre de una voz griega otro lado, un semblante adusto del desierto que tomara por e po, lo enterraron; nadie sabe muy sencilla. Todos los que, deque ofrece. En fin, jamás nin estaría en aplicarnos en parecer que significa sonreír. Si el sem. asusta y aleja a todo el mundo. ducadora, y pocos meses des en dónde está sepulto, excepto teniendo sus miradas en las o gjin discípulo de Jesús dirigirá ridiculos, es decir, en atraernos, blante de los hombres modestos La insolencia se detiene y re pués enfermó.
bras culpables de pintores, esa Celso esta pregunta: Cómo cultores y artífices de simula a sabiendas, el oprobio y el mese dilata más, ya es reír. Las trocede ante una moderada gra.
esos dos religiosos.
y Habiendo llamado a los dos me mostraréis a Dios?
nosprecio. Si nadie quiere dis carcajadas que desfiguran la vedad. El vino excita a los pla discípulos que moraban cerca cros, no quieren alzar los ojos San Atanasio.
Celso tenía, pues, mucha ra frazar su cuerpo, como se hace faz reciben nombre diferente, ceres vergonzosos, a la danza, a el, para servirle, a causa de sul al cielo, ni servirse de las cozón, poco há, cuando su supues en el teatro. querremos disfra según sean los que las profie la alegría loca, y acaba de co(296 373)
sas sensibles como de escala pa to interlocutor, después de ha zar nuestra alma, y aún, mani ren hombres o mujeres. El nom rromper las costumbres que em ra ascender hasta el Creador de berle oído, y reconociendo que fiesta y públicamente? No a bre dado a la sonante risa de piezan a malearse. De tales pla todo, que es la luz, están per sus discursos no eran sino con doptemos, pues, un exterior rilas mujeres significa un reir in ceres nacen las palabras licen Contra el lujo y el adorno saden. a nuestro entender, fusión yoscuridad, le responde: diculos en nuestras expresiones, modesto y lascivo, y no convieciosas, que bien pronto desciensumidos en las tinieblas. Por el Cubrís mis ojos de tinieblas. el deseo de ser o parecer ri ne sino a las cortesanas. El que den hasta la obscuridad y arras do la púrpura yla seda no pue Las mujeres que han revesti de negro; el de enmascarar las contrario, caminan a la luz a Celso y sus iguales se afanan ex diculos en nestras expresiones, se da a la risa de hombres espre tran a decir alto lo que más va den revestir a Jesucristo. Los ta, y los cabellos con tinturas.
mejillas con un afeite hipócriquellos que siguen los rayos del tendiendo nubes a nuestro alre tomando a juego la palabra y sa su insolencia y su impureza. liera, mil veces callar.
Verbo, de cuya boca han aprendedor; pero nosotros disipa la razón, las más preciosas cua El insensato eleva la voz cuan ornamentos del corazón desa. No es lícito jamás modificar la dido que el extremo de la ignomos, por la luz del Verbo, las Iidades del hombre: juego en do ríe; más el prudente sonriebres corrompidos se muestran y las joyas. Dios no ha dado teren sus rasgos primitivos.
Las costumbres de los hom parecen bajo el oro, la pedrería obra divina con engaños que al.
rancia, de la impiedad, de la tinieblas de esos dogmas im gran manera despreciable, pues apenas: porque el prudente se al desnudo en la licencia que al toisón de la oveja el brillo de Vos, mujer mundana, zcreéis estupidez, es desatender a Dios píos. Pues el cristiano replica to que los que en él se ejercitan impresiona muy de otro modo produce el vino; por ella, dese la púrpura o de la escarlata; poder retocar impunemente la por adorar a seres inanimados: rá a nuestro adversario, que no no merecen ni ser escuchados. que el insensato. Sin embargo, chan todo temor y disimulo; no ha enseñado a colorar la la imagen de la divina sabiduría?
a este Dios que conduce al Dios le dice nada claro ni fundado Por otra parte, esos discursos no se ha de ser triste y tacitur por ella, su razón mengua y pa na con el jugo de yerbas y con No habéis violado, es cierto, el soberano, increado, la inteligen en verdad: Nada distinto per inpertinentes con frecuencia no, sino grave y reflesivo. Lo rece extinguirse. Todas sus ma chas; no ha labrado esos rubies tálamo conyugal. Vuestro afei.
cia de quien quiera que procucibo en vuestras palabras.
conducen a acciones vergonzo mejor es que la faz guarde la neras son rudas, semisalvajes; engastados en oro, o esos colla te no es impúdico: sea; pero co re trabajar en la propia salvaOrigenes seriedad al sonreír; porque es ción. Pues las naciones que es (185 253) Se ha de hablar de un modo ta sonrisa que se mitiga no da su pasión los posee yesclaviza. res de perlas que ya corren en rrompéis la obra de la Provitaban aposentadas en las tinie.
largas sartas, ya caen en racidencia. Sois peor que la mujer pulero y agradable, y, lejos de tanta ocasión a la chanza. No Clemente de Alejandría mos, para cargar vuestro cuello adultera. Creyendo solamente tender a provocar la risa, se ha debemos sonreír por cosas de vi y ocultar, bajo las invenciones ornar vuestra cabeza y embe.
Las divisiones de la Iglesia de poner cuidado en contener lipendio, sino más bien sonro (160 215)
del demonio, vuestra carne, lecer vuestro cuerpo, destruís bra de Dios. Es Dios quien or la economía divina. Mentís a dena esas heridas que es forza la Verdad! Está escrito del Se.
Cuando contemplo el esta, y la mar. Se puede elegir a oLOS BENEFICIOS DE LA DESGRACIA da a sufrir la infancia, inocente mor: Su cabeza yeabellos eran do presente de las cosas, y veo tro que a aquel que se ha ejerEl año 387 estalló una sedi el estudio honores; sin aflic. superficie, sino que, penetran aún y poco iniciada en las vablar como lana blanca y colas dificultades que retienen co citado desde la infancia en los mo entrabas todo ardor por el combates, por la fe? Así, pues, ción en Antioquia, con motivo ción, descanso; sin invierno, es do en el seno de la tierra, pren nidades del siglo, a fin de que de mo nieve. a vos, los cabehorrorizan?
bien, absolutamente desespero ya todos los partidarios de la de un nuevo tributo que afecta tio. esto puedese aplicar, no derá fuertes raíces. Lo mismo esas orejas mutiladas pendan llos blancos os de nosotros. mas cuando pien verdad desean sinceramente ba a las provincias de Oriente; solamente a los hombres, sino hemos de hacer nosotros. La tri suntuosos joyeles, menos oue. Mas, decidme, oculta bajo ese 80 en vuestra firmeza y en que los ortodoxos comuniquen insurreccionado, el pueblo mal también a las mismas semente bulación, como una reja de ara rosos por su peso que por el di disfraz. no teméis que, el día vuestra sabiduría, cuando se me entre sí y se reunan, yo os ex: trató a algunos oficiales imperas. Para que se vea surgir una do, debe rasgar profundamente nero que costaron? Esas son in de la resurrección, el augusto representa que el Señor os ha horto a escribir a todos una carriales y derribó las estatuas de verdeante espiga. no se requier nuestros corazones. Si so venciones introducidas entre artífice no reconozca su obra, puesto entre nosotros como mé ta que nos indique lo que hemos Teodosio, de su padre, de sus ren lluvias abundantes, repeti mos diligentes, no sólo de la los hombres por los ángeles a y que, en vez de las recompendico que ha de curar los males de hacer. Los obispos desean hijos y de la emperatriz Flacci das, y que endurezcan la tierra tribulación no nos resultará póstatas y rebeldes, cuando, per sas que os llegaréis a buscar, os de la Iglesia, cobro ánimos, me que vos iniciéis las conferen:lla. Teodosio quería imponer los fríos? la estación de la ningún daño, sino que aún nos didor el celeste vigor, humilla rechace con los severos acentos sosiego y concibo mejores especias para la reunión de los or un ejemplar castigo a la ciu sementera no es a la vez la es ocasionará bienes sin cuento; si ron sus pensamientos a las in. de un censor y de un juez intiTanzas. Toda la Iglesia está en todoxos, mas como por su par dad. El obispo Flaviano, al fren tación de la lluvia? Pues que vivimos en la indolencia, la wis mundicias de la tierra. Sólo e tado?
desorden: vuestra penetración sada conducta pudiérais desconto de una diputación, partió a la tempestad se ha producido, ma tranquilidad nos perderá. los han enseñado a la criatura San Cipriano no puede ignorarlo. Desde lo al fiar de elos, ved aquí, mi religio presuradamente para Constan no en los aires, sino en las al La prosperidad y la adversidad el arte de realzar la vivacidad (200 255)
to de vuestro espíritu sublime, sísimo padre, el partido que os tinopla y dirigió al emperador mas, aprovechémosla para sem son igualmente funestas al hom de los ojos pintando las cejas como desde una atalaya, véis propongo Enviadme las cartas un discurso compuesto en parte brar, yen el verano amontona bre neggente, mas ambas apro todo lo que pasa. véis, como en que escribáis a los obispos, va por Crisóstomo. Teodosio, dice remos la parva. Sembremos lá vechan al resuelto. El oro conSobre el matrimonio mar inmensa, navíos que bogan con alguna persona de confian se, lloró, mas no pronunció las grimas ycosecharemos alegría. serva su brillo aun en el agua: revueltos, empujados por olas za, ya por ministerio de nuestro palabras de remisión que de el No mis palabras, sino el Profe y del fuego sale más luciente; El origen del género humano se mutuamente: furiosamente agitadas, naufra caro hermano Doroteo. Yo no se esperaban. Entre tanto, San ta os lo anuncia. Los que siem sumidas en el agua, gan, tanto porque una causa ex las reexpediré sino en tanto que Juan Crisóstomo sostenía los tren en lágrimas cosecharán en disuelve, la yerba se marchita: ha sancionado la ley del matri establecieron la ley del matritraña trastorna el mar con vio tenga seguridad de que obten: uimos ycalmaba las impacien alegría (s. CXXV, La llu ésta se consume, aquella se en monio, pues que manifiesta la monio. Serán dos en una sola lencia, como porque, en su con drán respuesta. Si caigo en falcias. Al fin, el perdón, tan espe via que cae en las sementeras durece al fuego. Esta es la ima regla establecida por Dios des carne. dice Dios. Así. pues, no fusión, los navegantes se estor ta consiento en que jamás mejrado, llegó, Crisóstomo dirigió no tanto las fomenta como, por gen del justo y del pecador. El de un principio, para servir de serán ni tres, ni euatro. Luego ban mutuamente y se destrozan lo perdonéis estar cerament la palabra a los habitantes de las lágimas, florecen las semi justo, en el seno de la paz, con ley atoda la descendencia de habrá una carne, y dos en una ellos mismos. No intentaré ex no obligaba más estrechamela Antioquia, para anunciarles la mas de la piedad; las lágrimas serva su esplendor, como el oro dán. Cuando Dios hubo creado carne, cuando se contrae matri.
plicar la comparación. demasiate al hijo de Jacob, que le boscía buena nueva. felicitacles porten purifican el alma, riegan el es en el agua; y si el infortunio so al hombre halló bueno darle u monio una vez; pero. si se reitedei cavidade sois para que haya a su padre, que a mí, que os la actitud y hacerles comprender píritu, hacen crecer rápidamen breviene. se acendra yacrisola. na compañera. De una de sus ra esta unión una o más veces, necesidad de que más diga y hago a vos, mi padre ita pietral que esta prueba les había sido te berhen dada ciencias Mas como el oto que el fuego ha pu. costillas hizo le najerw. como la carne cesará de ser una, ha: también hay que trazar surcos. Mas el di materia no faltaba, pues que tres o una. Opor otra parte, las circunstan Si desesperáis del éxito, permi provechosa. No es éste nuevo motivo de profundos. Esta es la preven suelve, se marchita en el seno Adán tenía más de una costi tra consideración es la de que cias no me permiten hablar li tidme a mí, al menos, que me bremente. Dónde hallaremos encargue del asunto, pues que dar gracias a Dios, quien del se ción del profeta. Removed vues de la dicha, como el lodo y la lla, y como por otra parte, las el Apóstol ha interpretado este un piloto bastante diestro para procedo com baseina de nens iporno de la tribiolación ha suscite tres barbechgenomysembréis en serba en el agua; la tentación manos de Dios eran infatiga: pasaje. cserán dos en una sola tanispeligrosa. un hombre que ver unidos a todos los ortodo medio de condiversidad, prove beind are la baino, pre pampo de fuego calciua el lodo. y devora hacer varias mujeres. a querer del Cristo con su Iglesiale dirigirnos en una navegación por un puro deseo de Porto do tan preciosos frutos. con las zarzas Jer. IV, El la. lo consume y la pierde, como el bles, muy bien hubiera podido carne. aplicándolo a la unión chos tan. No se reja del aradolo prepara re. la yerba.
lo; no lo hizo, y es y su San Basilio tendría, sin la prueba, corona; cibir y a gnardar simiente, que, jo de Dios, y Eva, hija de Dios. 329 379) sin el combate, recompensa; sin de esta suerte, no quedará en la (334 407) se casaron yhubieron de bastar. Pasa a la Ga. página)
sas.
tierra se esta suerte San Juan Crisóstomo Robe tenga bastante crédito con el xos.
Señor para advertirle y alcanzar de El que aplaque los vientos Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y juventud, Costa Rica.

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