Debido a los elevados costos del mantenimiento de las imágenes, se ha restringido su acceso solo para las personas registradas en PrensaCR.
En caso de poseer una cuenta, hacer clic en “Iniciar sesión”, de lo contrario puede crear una en “Registrarse”.
.
aN Ade Deming, 17 de Fue de 2905. o. o. PIARIO DE COSTÁ FICA o PAGINA oscE. A ESTI. o Los: GRANDES VUELOS. e. a. El vuelo de los oficiales VWilk 21 cmmocioas ln todos dm dejeis Za ko ey To o. ños la ala ot ¿1 ratas Doria zerito hr per TO Wios y uezelós ep eólco, y. A A construcción de s3 monoplano y del motor, a la excelencia de los carburantes habricantes emJuces ni ni Eta fotecrafía es de hon capitanes Jecce Wilkias y Elcinea, coyue svcstares señor el Pole Jerte se relatas en ento crónica.
su y un pozo también a la buena anerte. No es dudoso que intervinieron, zobre toda, el factor hombre y el factor máquina, mparte las condicion armostéricas favorables Las dificoltades de la salida El aeroplano pesaba vacio 900 kilos, y el lastre total, 1, 700, a sea 600 kilos en conjunto. Sólo aviadores en linea recita bacia sa destino, sigoiendo: una ruta tangente al gran circulo; ruta que babia de cambiar veintidós veces en otras tantas horas, a veces hasta en. una. proporción de 25 grados, sezún las indicaciones del compás. Tanto la observación constante de los freás magrético, hecha por medio del sextante, como el pilotar el aparato pudo elevarse después de tres inen aquella irmnensidad grís. in kEscirron el vuelo bastante peno32. Huelga añadir que se nece siítan unos nervios de acero resistir la opresión de aquella inmensidad helada y silenciosa.
Explorando el camino Hubieron de atravesar el principio de nubex que se esforzaron en evitar ga nando elevación, pues el interés principal de la expedición residía precisamente en poder Un verdadero germicida que en verdad mata microbios con todo cuidado las in mensas extensiones de hielo que constituían su camino. Afortanadamente, se aclaró ta atenósfera y lograron su deseo. Hacia el Oeste, donde Peary, Stefansson y Macmillan creyeron ver indicaciones de tierras próximas, no vistumbraron Wilkins y Elelson ninguna isla. Agua holada tan sólo, un desierto de hielo easi sin límites; de hielo, por la general, escabroso y surcado en todos sentidos por. pequeñas cordilleras, donde el aterrizaje hubiera sido sumamente peligro BO, La temperatura en la cabina Durante esta parte. del viaje disfrutaron Jos exploradores de agradable temperatura. Al emprender el vuelo el termómetro registraba 20 grado bajo cero Fahrenheit al exterior, pero molamente 22 grados sobre F. en la cabina. Esta temperatura despara y de su esa plaga inmunda acos de que se mutáplique. Pi Pulvenoe Fi zzaza la poltta y ms larvas que des. Escaza da ropa, nor bee. Alramoete ho Fic Ea cl domar esoriécro pare to pos Loa isapectoera de Saniiad Devenoa.
Si quiere Ud.
de venta en la JOVER pida el Secreto de Tuvence. frente al Siglo Nueve)
estar siempre PARISIANA cendió a 10 grados al cab de ocho horas de viaje. Cuando pasaron por Tierra de. Grant la temperatura exterior llegó a 48 grados bajo cero y al interior de la cabína bajó a cero pese a los esfuerzos de Jos aviadores para calentar su aérea morada. Afortunadamente pudieron echar mano del café caliente que llevaban en sus termos y del chocolate y galletas que constituían parte de mus provisiones de boca.
La Tierra de Grant o Esperaban los aviadores poder comprobar su ruta al vislumbrar la Tierra de Grant. Poco después de pasar un punto situado a 841 grados de latitud y 75 grados de longitud, encontraron densas barreras de nubes. Divisaron a gran distancia el ban.
eo de nubes que señala la costa de la Tlerra de Grant; y aliserada ya la máquina de parte de su peso, procuraron elevarse hasta los 000 meiros, par enclma de la cortina que lea cerraba el pasa impedía la obdiervación eflicar.
Uxo tormenta amenaradora les ublizó entonces a dirigirse más hacia «l Sor, y eesdia bora más tarde, o ma a las trece boras de emprender. eld varo, const suleroa solumbrar los picos más errado las, monfañas que coránan la rra de Grant emer gienda a travía de lus muben cea lontameasa.
Hacía Spilesbercon parte de s2 viaje que constitala La riplecación propiamente dichas; icro cualiuiloí serra de Lio viento, favoreciendo notablemente la marcha de los aviadores.
Nubez y montañas. Aprestáronse Wilkins y Eielson a luchar de nuevo contra la defettuosa visibilidad, en previsión de las nubes, todavía más densas, que no dejarían de formarse en gray cantidad al encontrarse el fuerte viento norveste, acompañado de bajísima tenperatura, con el aire tibio y las aguas relati del mar abierto, en las inruediaclones de Spitzbergen. Fué así, en efecto, y al acercaree la última etapa de su viaje, cuando sóla les faltaba un poco más de 300 kilómetros paro llegar a Spitzbergen, halláronse envueltos en. espesa y altísima cortina de nubes, pesar de estar muy alirerado el aparato, érales imposible remontar por encima de aquéllas. Se elevaron a exrca de 000 metros, y pro curaron abrirse paso entre aquella masa ingrivída, que no les dejaba ver la tierra mi les permitía máx observación que la del compás y de la posición del Set. fuleron volando durante hora y media, columbrando de vez en cuando extre lsa nubes, el mar oscuro, taxi fibee ya do hielos, Según eu» cálculos, debían de hallaro» muy cerca de laz montañas septentrionales de Spitzbergea. Pero como hasta el mia alto picacho habla de estar em centra alfusa mentaña, Sablan que les guetdabe gasoaliza ron por azuella Tuta y de ro Ppexza surgiena arte sa vista ds aruios pil deseadiente algo les asriaéntes 00m el Tis de recomucer el 2armia Aserrizaje em la tecmexta mella e se aora a la wide rr, «a forraa qe e terri el se alle Goeiada. Exa por a a rato el pas seus del aria e Ea tan dificiles condiciones ale envolvía los intrépidos aviadoTer. que Bevaban en la cabína, descubrieron que habían aterri zado sobre ua banco de hielo ez comunicación con la tierra flirme, Habían, pues, logrado su propótito de volar de costa a costa tras estar veinte horas y veinte minutos en el aire, El descanso en lz csbina. El despertar. Imposibilitados de reconocer su posición exacta por la tormenta de nieve, decidieron esperar hasta que aclarase ta atmósfera y mientras tanto descansar en la cabina. Cuando despertaron lucía timidamente el sol, y en lontananza, en la otra orilla, ereyeron columbrar casas, Temían, sín embarxo, ser víctimas de algún espejismo, frecuente en los países árticos. Pero supieron más tarde que, en efecto, el azar les había hecho tomar tierra a 30 kilómetros de un lugar habitado.
Durante cuatro días hubieron de permanecer encerrados en la cabina, comiendo galletas y chocolate, resg del viento glacial: pero sin poder reanudar el vuelo. Habiendo nterrizado en Spitzbergen el lunes, a las veinte horas de salir de Punta Barrow, tuvieron: que esperar una acmana entera en aquel islote, sin que les fuera posible niquiera averiguar su posición de que. en, yóle ya exbido, y empezó a elevarse. Pero el eapitáin Wilidns resbaló una vez más sobre el foselzje y cayó de nuevo en la nieve. Mo se hizo nrocho díLo; pero al relatar su aventura decía que aún se le movían 2lganos dientes, si bien contaba con que recobrarizn pronto su firmeza. En estos dos ensayos infructuomos habian consumido la mitad de idi intentar por tercera vez emprenadxesrril te Greez, ez la Pabiz de dos Din loa, y se enterados 235 de que el ¿onde da esturieron aidados la ausencia de tierra en aquel a región polar, asa ineploar da artes de cruzaría el manos plano de Wilkins y Fielson. 3)
éste un puuto que hasta la re: lización de esta hazaña dió con gen a, muchas controversias, y que ha quedado finalmente ¿lios cidado merced al arrojo de lus dos Hient, TT re las zonas cálidas. El exacta.
IPARDCE Sics Pepiso et egunde, papás AS. engo el gusto, de presenfarles a. m4 Badring Suave y blanea. se consigue al usar diariamente en el baño el JABÓN Bager!
Se evita toda. clese de efecciones de la piel, granos, eczemas, etc; tan fáciles de adquirir en puede considerarse, además, como el único espe Cífico contra el sarpullido. bEAFRIDOL.
Boya de YT dote Zed, Ss ado se Tano de ya Fianriizo ha mao, ha Pr en balsa, Deva mee GriasPiri NA no y too de se excede e el cigras os tableros, ez tor prado ada1 p eo torpurnada cn 20 Emuurte de exa e rez e Dr, a os e Ciara.
Este documento no posee notas.