PAGINA SÁBADO 17 DE ENERO DE 1920 EL ROMBRE LIBRE Diccionario GeográNuevos días, nuevas costumbres que no La Mujer y la Casa Comentarios ROSA DE TE THE tico de Costa Rica La honradez es una manifesta nace. que no nace. pero sí, Ni Cicerón, ni Descartes, al un elogio, experimenté una soción de la belleza. La mujer en el mundo del alma.
La Bruyére dljeron nunca una berada drcepción.
Don Noriega, autor del honrada es una estrella en esa Para manifestarse, exteriori verdad tan grande como la del Pero lo dice usted de veras? Diccionario Geográfico de Costa noche tremenda, larga, intermi zarse, difundirse las buenas obras, sainetero español que echó a vo Si eso es una antigualla! Estos Rica, prepara desde algunos a.
nable, caótica, sin asomos de au buscan sus manos; los altos senti lar la conocida frase, digoa del poetas viven en la luna. Mirenos una nueva edición de dicha rora, por la cual atraviesa la Hu mientos, su corazón las palabras mármol: Hoy las ciencias ade manidad.
de oro. su boca, las firadas de lantan que es na barbaridad.
usted que iries con cuentos a los importantísima obra, y suplica a chicos.
las personas que tengan alguna La mujer honrada es una es piedad, sus ojos. las caricias La frase española es de ayer. Le parece a usted mejor me observación que hacerle sobre la trella colgada en el cenit de lo ioefables, sus manos, que no peexcelso; es una estrella en la que caron nunca. sus manos son de un ayer un poco lejano; pero atreví a replicar un tratado de misma, ya la inclusión de algún al correr del tiempo gana en Anatomía El origen de las es. nombre geográfico, nuevo omlbrilla su luz propia y la luz de las manos de ángel; su pecho, flor fuerza y en actualidad. Como el pecies?
tido en la primera edición, ya la que perdieron al caer en el fap de artificio; su boca cáliz de dulbuen vino, mejora en la solera. Nada de cosas raras argu enmienda de errores o suminisgo.
En ella anida el milagro de zura virgen; sus ojos brechas sl antes era aplicable a las cien yó la buena señora. Todo eso tro de datos y noticias pertinenvoluntad, el aroma de la pureza, abiertas en el azul.
cias de todas castas y colores, no son sino tonterías que com tes, etc etc. tengan la amabiliel encanto de la heroicidad callaSi el amor llega a ella, llega hoy lo es también a las artes y plican la vida y desvían la aten: dad de hacerlo durante el prida, el divino afán de progreso, de en la noche silente, desmayada, a las costumbres.
ción del verdadero camloo. No mer semestre de este año, contri orden, de perfección, de triunfo, blanca, plateada por la luna, do Por mi casa, que es la del a pasa el tiempo en vano, ni el vai buyendo así al mejor desempeño sobre la cloaca material, donde rada por estrellas, encantada por mable y complaciente lector, va vén de los días deja de abrir hue de esa empresa.
silban los sapos y croan las ranas el nocherniego trovador. Lle. frecuentemente una señora, ma lla en las costumbres. Yo tamde toda baja pasión ga hasta ella el amor sublimlzado, dre de dos niños monísimos, hem Así mismo suplica a los demás envuelto en azuliaa lumbre side.
bién sé cosas del señor Andersen periódicos del país, la insersión La mujer hoorada, por ser bon ral, en las melodías del laud, en bra y varón y Compañía, pero de más subsde esta nota, que comprometerá rada, es valiente, heróica, gran Son, en verdad, encantadores. tancia. Por ejemplo: Hoy las su gratitud.
de. Es la más acreedora a ser los suspiros del jardín, en los su lado se está como en el ciencias adelantan que es una amada. sin embargo. son versos de la cantiga, en las alas cielo. Ni tiesto firme, ni silla en barbaridad.
del aire, cuando el aire, movido beneficio de los las otras las que triunfan.
su sitio, ni cristal seguro.
Despues de este discurso, se por una ansia inefable, vuela con Hay una luz distinguida, las alas de lo divino.
Hace unos días, la respetable quedó tan fresca. Yo no supe huerfanitos de diáfana, célica, en sus ojos.
madre de estos angelitos de Dios contestar. Los aegelitos, entre Hay un maravilloso encanto ea exquisito, es el de la rosa de the. les uo obsequio.
El perfume más delicado, más me invito delicadamente a hacer tanto, no dejaron rosa sana en Cartago todo su cuerpo. Poseyendo el Es un perfume in confundible, una maceta.
dominio sobre sí y sobre el am Hombre, a ver cuándo dis. Quiere usted propuso la como el de la mujer honrada. tingue usted a mis niños con u.
biente, goza de un placer fico, madre obsequiar a mis niños Se celebrará en aquella ciudad e puro, elevado, mil veces más a plebeyas narizotas dei vulgo.
Este perfume es inaccesible a las domingo próximo un Gran Turno.
na prueba de su agrado.
delicadamente? Pues a nuevos Entre otros atractivos habrá el de gradable que el de la prostitu Que no se hizo la miel para El día más inesperado le tiempos, nuevas costumbres. Llé.
ción. Ella que sabe vencer toda boca del asno.
la contesté.
velos usted de vervena a la pri servirse en el Bazar de San Luis un suculento almuerzo confeccionado flaqueza, toda debilidad, lonatas Pensé, pues, sentarles a mi la.
mera ocasión. Ya verá cómo baly atendido por estimables señoritas a la carne, que sabe salir airosa llamente significativo, es la per les un cuento. Uno de los mara La mujer honrada es algo bedo o sobre mis rodillas y contar.
lan los ricos míos. Darán el ml de la sociedad cartaginesa.
de ese cuarto de hora que a sonificación de la privilegiada ro villosos cueotos de hadas buenas, tia.
La orquesta del competente maestodos nos alcanza para pecar, no No hallé disculpa ni razón. tro don Ricardo Rojas amenizará el Igoora que el abrazo más cariño sa de the del jardía humano, tan princesas rubias gnomos bar Las ciencias y las artes adelan acto, ejecutando selectas piezas de música.
so es el que no se da, que el beso plagada de hedores, cárdos, abro budos, que nos contó la pobre a.
tan, y los nuevos días traen cosmás dulce es el que no se dió, Es de presumir que la concurrencia jos.
tumbres nuevas. aquí estoy en buela en noches de invierno será muy numerosa y más tratándose que el hijo más feliz es el Pedro ARIAS cantado de llevar a las monísimas fueron nuestro encanto en el lecomo se trata de un fin benéfico.
jano abril de la niñez. Con un criaturas a Chamberi o al Prado poco de fantasía, buscaría yo uennoche de alegría y holgorio.
on na moraleja final, que pudiera José MontERO.
Suscríbase a El Hombre Libre Quiere Ud. comer harino fresca? Compre la servir a los infantiles oyentes de MARCA sana emosión y saludable conse. LA IMPERIAE jo.
MAGNOLIA Federico RICO AYMERICH Esto, como digo, pensé. LueESCARRÉ HERMANOS go me pareció la idea frágil y Acaba de recibir un selecto y novedoso surtido de sombreros desconfié, con razón, de mi habi.
que ofrece a su selecta clientela more re lidad y mi donosura como su Establecimiento, contiguo a la BOTICA ORIENTAL dios de eocender una chispita de interés en las imaginaciónes de Farmacia mis dos amiguitos. deseché mi pensamiento. Mucho mejor sería Nuestros Precios no admiten competencia regalarles una edición de los Nuestros artículos son siempre frescos e importados directa cuentos de Andersen de Grim.
mente. Nuestro propósito: Agradar al público coosumidor, Me decidí. Expuse a la oron tanto en la baratura de los artículos como el esmero en atenderlo Las preferidas de la Sociedad da señora mi ocurrencia de regaGRILLO HNOS. FARMACEUTICOS DROGUISTAS lar a sus hijos con primorosas e.
diciones de los famosos cuentos, Situada 50 varas al del Mercado. San José y cuando esperabı haber ganado 0000 0000 la montaña toda se desplomaba sobre ellos y El tiempo cambió y empezó a caer nieve; te. Si. Entonces aquel hombre moribundo y con ellos. Sin embargo, no se había desvaneci mieron verse sepultados vivos. Sus ropas, em a quién sólo tormentos ofrecía el resto de vida do, y aunque sentía el dolor y el maltrato de papadas y congeladas luego y llenas de sangre, que le quedaba, desechó la tentación en un Nieve sobre las huellas taban intactos. Su compañero, peor librado, los golpes, comprendió que sus miembros es ya no les daban el menor abrigo.
postrer estremecimiento de voluntad, animán. Sí, añadió Marcos, hubo que cortarlas o dola a resistir más: Vendrán, vendrán, aseguPor Henri Bordeaux tardó en recuperar el sentido: tenía la pierna arrancarlas, pues estaban pegadas a la carne. raba él; para mí será demasiado tarde, pero tú derecha fracturada en dos partes, y creo que El padre Sonnier lo contempló con la mayor podrás vivir. Veo por mi parte, un acto de fe (Continúa)
una roca le había roto también la columna ver piedad; faltaba lo más cruel del relato: allí. él hizo algo más: debe usted saberlo.
tebral. Cuando volvió en sí, experimentaba, se Ahora comprenderá usted todo el horror No solamente le ha anunciado que viviría, sino Marcos con devorante atención repitió: gún parece, atroces dolores. Entonces empezó del desastre, señor. Sola, hambrienta y helada, que viviría con su marido y con su hija, y que. Se lo ha pedido así ella?
su verdadero martirio. Hay que hacerles justi al lado de aquel desdichado que rugía de do, tudo sería para su bien. Me lo ha suplicado con instancia. Mi pro cia, señor. Por oficio tengo que saber lo que es lor y a quien no podía dar ningún alivio, llegó. Basta! interrumpió Marcos que se había Desa la tranquilizó un poco. en el carruaje se valor ante la muerte. La montaña es una es en su deseperac ón a dudar de Dios. El abismo puesto en pie.
Trmió.
cuela ruda, y me ha tocado conocer a más de se abría alli a sus pies. Era el término de sus Pero el padre Sonnier no desistió de la defenEl padre calló, no sin cierta satisfacción, al un valiente. Pern sólo Dios sabe la bravura de males. Bastaba arrastrar a su compañero hasta sa del muerto: por terminada su dolorosa tarea. Pero Mar estas dos almas.
el borde de la cornisa y precipitarse juntos. Duş, después de un breve silencio, empezó a aquel testimonio, dado por un hombre tan rante varias horas sin poder precisar el día, si Usted ha exigido la verdad, señor. Él ha diarlo con sus preguntas: duro consigo mismo, imponía su autoridad. el segundo o el tercero, si el martes o el miér reconocido sus faltas y renunciado a ellas. Re ¿Cómo e hizo para prevenir a Mme Notrándose aquel espacio y comprendió pronto diaba sin cesar. como el otro se quejaba más cuando nuestra vida recupera su verdadero sen Ella que podía moverse, recorrió arras coles, pues no lo sabía aquel proyecto la ase. nunció, sintiendo aproximarse la muerte, que es. La. la enferma (no se atrevió a llanar que no podía salir de allí. Tan sólo podían con y más a cada instante, ella llegó a proponerle tide: pronunció también el nombre de su hijo.
El prior intervino con dulzura e indulgencia: por su nombre) me dió también la dirección tar con algún socorro bien improbable y lejano. que murieran juntos.
esa señora.
No tenían si ao un pedazo de pan y un poco de Marcos, anhelante, repitió. El padre Sonnier practica el culto de las. Ah. en los tres días de agonía no le coña, en un frasco que había resistido por ca. proponerle que murieran juatos. Quien víctimas. Les hace en su corazón bellos funeras revelado nada a usted?
sualidad la caída. El era el peor librado y ella se lo ha dicho a usted?
les, sobre todo a los que fueron valientes sin Si. Pero con qué objeto. le brindó el pan y licor. El otro exigió que lo. Ella misma, en el Hospitalet, en un perío desfallecer. Termine usted, padre.
El pobre religioso, tratando de evadir las compartieran, pero no pudo pasar el bocado de do de exaltación en que no gobernaba sus pa He terminado. El tercer día, hacia la targuntas, se volvió hacia el prior para implo par. La primera noche no fué muy fría, y el labras. No fuí yo el único que la o. Tal vez de, cesó de hablar y la agonía comenzó. Ertar sol de la mañana logró reanimarlos. Esperaban comprendí yo mejor. us palabras. Por eso le hombre joven y fuerte. Én pos de un largo esa Diga usted la verdad, autorizó el padre todavía. Ella había arrojado diversos obje doy estos detalles.
tertor, exhaló en la noche el último suspiro. Lo Snaz: la verdad tiene virtudes que no siem tos al abismo, esperando que rodarían hasta el. Quién haoía allí?
encontramos con los ojos cerrados. Se los había Dei somos capaces de reconocer, pero que se fondo y servirían de señal. intervalos daba. Los hermanos Omer y Julio Menoud, de ce rado ella sin duda. Después pasó toda una mponen pronto o tarde, voces también. la noche llegó de nuevo. Él Bourg Saint Pierre, que habían pasado por Vala noche y una mañana a su lado. Quién puede der la arista, arrastrándolo a él consig. Roda. mentaba. Aquella segunda noche fué llena de Patricio, el criado de la casa, que me acompaña podía ni siquiera orar por él, tan convalea esta. Bien Fué ella quien resbaló al descen: perdía fuerzas y a pesar de su energía se la sorey y nos habían dado alcance. me. Cambién imaginar lo que fueron aquellas horas de media de on un trayecto de ciento cincuenta a doscien horror. Creyeron que no teniría fin, y el día, en mis excursiones. Puede usted interrogarlo ba su boca. Había sufrido tanto que había la is met os. Ela no sabe cómo llegaron a dete cuando despunto, no trajo el menor alivio. No hay para qué, padre mío. Prosiga us gado casi a la atonía.
terse en la cornisa donde quedaron, en vez de partir de aquel instante las horas y los recuer ted, se lo suplico, y no me oculte nada. Ella SED e botar y seguir cay. ndo. ella le parecía que dos se confundían un poco en su imaginación. propuso que murieran juntos. Continuará meen DO0000 GRILLO La Geisha y La Feria 000000000000000000 Si quiere ser chic, visite estas Cantinas 27 Nuestra Novela hs?
su auxilio Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.