EL DIA MONTREAL Canadá, SAN SALVADOR DEL PAIS.
Damos especial atención a los pedidos de provincias.
sibles ramos de olivo, como las Suplican moralidad, la palabra soez calumniosa, tes de la clásica antigüedad, desde luego el pensamiento obeesno y criminal lleGRAN DEPOSITO que su misión es de paz. Deseamos que vado cabo, creemos que se debe castitengan grata permanencia entre nosotros gar la prensa calumniosa iufame, ha DEpara que lleven buenos recuerdos de ciéndola por l, menos callar, porque esGuatemala, sobre todo, que hagan bien to no implica un ataque la libertad de la digestión de los festires de la política imprenta, sino la reprensión del abuso y CIGASSOS TABACOS en los que se necesita de mucha dieta pa del libertinaje. DEra que no les hagan daño los tentadores Creemos que los gobiernos de Conmanjares y los exquisitos vinos.
tro Amèrica, hoy que la más perfecta armonía reina entre todos ellos, hoy que se 3, VAAN, Prueba de amistad. Una se dan las más sinceras y entusiastas muesfiorita decía que entre los hombres nunca tras de amistad, debían tomar ca tas en existe una amistad tan verdadera como el asunto para cortar esa serie de abusos, DIRECCION. APARTADO NUM. 105 entre las muchachas.
esa cloaca de calumnias, que sino prueban También entre nosotros hay ver nada por su desautorización, manchan y. Especialidad en toda clase de Puros y Cigarros.
dadera amistad le replica un caballero. Cuando un amigo mío se quería casar, cha y avergüenza todo lo obsceno y avergiienzan al que los lee, como man Inmenso surtido de las más acreditadas fábricas de la Habana, Santiago de Cuba, me lamó con toda confianza para comu descomedido.
nicármelo y rogarme le ayudara.
Kingston (Jamaica. México, Hamburgo, New Orleans, New York, La señorita ¿Y le ayudó de ve dos hermanitos muchísimos periódicos, Se les quedaron en el tintero a los ras realizar la felicidad de su vida!
casi todos los de Costa Rica, Que no El eaballero Oh por supuesto: le habrán leido El Heraldo, ni La Prensa quite la idea de casarse.
Libre ni El Padre Español?
VENTAS AL POR MAYOR DETAL.
Nos gusta aquello de que creen que Ezetunadas Un periódico de los gobiernos de Centro América, hoy los dos heroes del Salvador, El Eco Na que la más perfecta armonía reina encional, trae extenso y curioso artículo de tre ellos, cortarán los abusos es decir, fondo contra la libertad de imprenta Se extrangularán la libertad de imprenta.
titula ese editorial La prensa controameYa pueden esperar seutados los héricana, y dice, entre otras enormidades, roes del Salvador. Reina Barrios, quien DE LA GUARDIA lo siguiente: le propusieron que cortara los abusos. Misión ingrata misión innoble la contestó resaeltamente que nones, y en de esos perversos piedra de escándalo y Costa Rica se expondría pasar una No hay otra igual en la ladibrio y baldía del invento de Gu buena temporada en el Manicomio el República ttemberg.
que viniera cou semejante embajada. Si Sin buscar mucho, ahí tenemos El en Honduras triunfa Bonilla, no es creiContiene siempre excelente calDiario de Centro Américaly La Repúbli ble que corte abusos de esos que tanto zado de toda clase y para todas las ca de Guatemala, El Siglo XX de Ni molestan a los Ezetas. Sólo Sac isa, en edades y condiciones.
caragua, El Combale de Honduras, El toda la América Central, es hoy capaz Diario del Comercio de Costa Rica, pren de secundar las ezetunada: horrendas Precies sin competencia sa venal inicua, por donde salen luz y vergonzosas.
todos los fétidos miasmas de uno cuan Enseñanza Ha sido nombratus malvados, encargados de cubrir de do jeje del Observatorio meteroológico vergüerza la patria contro americana, de y profesor de Liceo de Costa Rica don llenarnos de bochorno en el exterior, ya Miguel Ramirez Goyena. Ha ganado que en el interior no pueden hacerlo por la enseñanza. BAR ROOM ser demasiado conocidos por sus malas artes.
HOTEL ESPAÑOL, En este acredita lo establecimiento da gusto entrar a Ahora instigados por la envidia, ANTES INTERNACIONAL.
mar un trago. En él se encuentran los mejore: Wiskys, la ambición bastarda, las bajas pasiones, han tomado la ingrats labor de ca. Excelente servicio, buena Cognacs y el legitimo Pisco del Perú. Completo surtido lumniar de la manera más villana y aoez de licores, vinos y cervezas, Aguas gaceosas y minerales.
al Salvador y su gobierno, a pesar de mesa cuartos bien frescos, Gran variedad de latas finísimas de carnez y conservas. En la justicia que la prensa de ambos conti para familia. Cantina surnent is nos hace. puros y cigarrillos no desear.
que tida, licores finos. Somos partidarios de la más am Tabacos y cigarrillos Habanos. Precios Hay un magnífico billar y un salon de recreo, donde se plia libertad de pensamiento, de la pala moderados.
bri, de creencias; pero así como la ley Puerto LIMÓN.
puede pasar agradables ratos. En todo, aseo y servicio es EL PROPIETARIO. merado.
astiga, y nosotros la aplaudimos en èsPedro Pérez.
la religión que tenga por base lainSan Josè, agosto de 1892, VILLASENOR ALMACENROE COLZADO STAIN 480P Abogado.
Managua.
LA FUENTE.
y nada. mo.
10. Demonio! esclamó Malivert dando un puñetazo en la mesa cuando hubo leído nuevamente la carta: soy un loco un sonámbulo. Extraño billete! Se parce una de esas litografias de Gavarni, donde se ven un mismo tiempo en la leyenda la frase escrita y la frase pensada, lo falso y lo verdadero. S6lo que aquí la palabra ro engaña. Mi mano, la cual quería forzar para una hermosa mentirijilla social, no ha querido prestarse ello y, contrariando la costumbre, ha brot. do en la carta la idea sincera.
Gay miró atentamente el billete y le pareció que el caráeter de la escritura no era enteramente el suyo. Hé ahí un autógrafo, dijo, que pondría en grave aprieto a los peritos si mi literatura epistolar valiese la pena de una confrontación. Como demonios se ha efectua lo tan extraña trasformación? Ni he fumado opio, ni he comido haschich. Dos tres vasos de vino de Burdeos no pueden haberme trastornado la cabeza. Me siento demasiado fuerte para ello. Que será de mí si la verdad se me escapa en los escritos sin sentirla? Afortunadamenie lie leído la carta, por que nunca estoy muy seguro de mi ortografia nocturna. Que efecto hubieran producido, por demasiado verídicas, estas amables líneas, y qué cara de stupefacta indignación hubiera puesto al leerlas la señora de Imbercourt! Quizás habría sido mejor que la carta llegase sus manos tal y como la he escrito: yo hubiera pasado por un monstruo, por un salvaje, indigno de llevar corbata blanca, pero al menos este lazo que me disgusta se hubiese roto como tin cristal; y el cristal no se vuelve a unir ni aunque lo encolen, Si fuera algo supersticioso vería en esto una advertencia del cielo en vez de una distracción incalificable.
Después de una pausa, Guy tomó una determinación resuelta. Vamos casa de la señora de lmbercourt, ya que no pue lo escribir esta carta Vistióse con rabia; y estand)
iba salire la habitación, creyó oir u suspiro, pero tun débil, tan ligero, tan aéren, que se necesitabı el profundo ailencio de la noche para que el oído le pudiese percibir, Aquel suspiro detuvo Malivert en el lindel de la paerta, y le produjo aquella impresión que lo sobre natural causa los más valientes. No había nada espantoso en aquella nota vaga, inarticuladı y, lastima, y, sin emburg. Guyque dóse tan turbado que no se atrevia confensárselo él mis¿Vaya será el gato de Angora que se habrá qnejado dur.
miendo, dijo Malivert, y tomando de muos de su mayordo mo un gabán de pieles en el que se envolvió con una corrueción que demostraba sus largos viajes por Rusia, bajó de bastante mal humor hasta el portal, donde le esperaba el carruaje.
II.
Reclinado en el rincón de su berlina, con los pies sobre un calorífero de agua hirviendo y el gabán bien ceñi lo al cuerpo, Malivert miraba sin ver los extraños juegos de soibra y de luz qua formaban en el cristal, ligeramente entur.
biado, los relámpagos súbitos de alguna tienda incendiad de gas, y auna abierta aquellas horas de la roche, y las perspec ivas de las calles estrelladas con algunos punto: brillantes.
El carruaje atrevesó en breve el puente de la Concordia, bajo el cuel se deslizaba oscuramente el Sena, con sus espe.
jismos sombríos y sus reflejos de linternas.
Al mismo tiem po que corría, Malivert se acordaba, contra su voluntad, de suspiro misterioso que había oído creído oir, en el no mento de salir de su habitación. Se hacía todos los razosamientos naturales que los excépticos alegan para explicar Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.