10 LA REPUBLICA, Miércoles de julio de 1975 LA REPUBLICA Do Re Mi Rodrigo Madrigal Nieto, Director Julio Rodríguez Bolaños, Subdirector Yehudi Monestel Arce, Jefe de Redacción Alvaro Cedeño Gómez, Gerente General Los empleados del Banco Anglo Costarricense. los más pacíficos del Sistema Bancario Nacional han decidido elevar la voz y reclamar sus derechos. Cuál es nuestro prestigio en el exterior?
000.¿Por qué? Porque en el Estado costarricense todavía no hay justicia nl una medida común en la fijación de salarios en las distintas instituciones descentralizadas. Cada una de estas es un estado que se rige sin sujeción a normas comunes.
000 En otros bancos del Estado, hubo aumentos de salarios el año pasado y reajustes en el presente. Sin embargo, los empleados del Banco Anglo quedaron fuera. Por otra parte, en esta institución se acordaron aumentos para los altos jefes, pero no se tomó en cuenta al resto de los empleados.
000 Lógicamente, en estas circunstancias, al observar los aumentos considerables en otros bancos y la posición desventajosa de los del Anglo, estos no pueden seguir poniendo la otra mejilla por lo que decidieron formular, una vez más, sus peticiones, que, por cierto, no consisten en aumentos porcentuales, sino en una suma fija, lo que favorece básicamente a los empleados con salarios más bajos.
pro del 000 ¿Qué nos demuestran estos conflictos? Que pese a tanta paja que se ha hablado sobre la coordinación de las instituciones auto was. ni siquiera se ha logrado que, en punto a aumentos de salarios, hava una politica común. como esta no existe, los conflictos están a la orden del dia.
000 Del Banco Anglo pasemos ahora a las cárceles.
000 Quisiéramos saber por qué trasladaron a los llamados Hijos del diablo de la cárcel de La Reforma a la Penitenciaria Central? Si se habían construido celdas costosisimas en La Reforma para tenerlos a buen recaudo, no hay razón para premiarlos trasladándolos a la Peni.
que es la antesala y plataforma de lanzamiento de las fugas.
000 Tampoco se ha explicado quiénes fueron los guardianes o los empleados que les suministraron seguetas y otros instrumentos a los reclusos de La Reforma para que cortaran los barrotes de las celdas de seguridad y escaparan.
000 En una de sus últimas intervenciones por la radio y la televisión, dijo el señor Presidente de la República que la reunión que celebrará este mes en San José la ORGANIZACION DE ESTADOS AMERICANOS, dará prestigio a Costa Rica. No sabemos si el supuesto del señor Presidente parte de la idea de que el simple hecho de ser sede de una conferencia internacional le da prestigio al país, o si atribuye él esa nueva cuota de prestigio al hecho de que el carrereo de nuestro canciller en régimen de Fidel Castro, dará sus frutos en esa asamblea, o si su propósito se circunscribe a estimular al pueblo de Costa Rica para que una vez más dé muestras de civismo y compostura ante los visitantes oficiales, a fin de que estos se lleven esa buena impresión del país.
No nos interesa hurgar en ese aspecto del pensamiento presidencial, pero sí hacer reflexionar al Primer Mandatario en el sentido de que no son esas asambleas los factores determinantes para pulir y abrillantar nuestra imagen en el mundo exterior.
Muy difícil había sido la tarea de forjarnos un nombre en el conglomerado de naciones y que se nos conociera como un pueblo de vida limpia, de gobernantes honestos, con más maestros que soldados, y menores diferencias económicas entre sectores de la población, que las abismales distancias predominantes entre esos mismos segmentos populares de otras naciones vecinas, lo que hacia surgir en Costa Rica una clase media activa, emprendedora y bien orientada. Ese esfuerzo no fue obra de un día; nuestros diplomáticos de antaño, escogidos casi siempre por su ilustración y su laboriosidad, iniciaron con paciencia benedictina ese esfuerpara trasmitir al mundo las virtudes de nuestra patria, como lo hizo, por ejemplo, don Felipe Molina en el siglo pasado para darnos a conocer a los países europeos, con su BOSQUEJO HISTORICO DE COSTA RICA. que buscaba ser la tarjeta de presentación de un país desconocido, pobre y pequeño, que otrora constituia la Audiencia de los Confines del Gran Imperio Español. Desafortuna damente no todos los diplomáticos nombrados en los últimos tiempos tienen los quilates intelectuales o la vocación de servir de aquel embajador nuestro acreditado ante las cortes europeas. Ahora ocupan esos cargos, en su mayoría, gentes que simplemente gozan del favor personal del mandatario o quienes, sin más mérito que el parentesco con el ministro, quedan de hecho enchufados al presupuesto nacional. De esta manera empezó a decaer nuestra imagen.
Pero de pronto, cuando nos convertimos en reducto para estafadores internacionales, nuestro prestigio se vino al suelo. Hace poco dio cuenta la prensa costarricense de la angustia de nuestro embajador en Washington por los relatos que la radio la televisión norteamericana hacían de ciertos episodios de nuestra vida nacional.
Todos nos sentimos indignados de que hechos vergonzosos para el país, fueran revelados por los medios de difusión extranjeros, mas no obstante, hemos de preguntarnos si no es la conducta de nuestros gobernantes la que da pie para esos enjuiciamientos que tanto perjudican la buena fama de que gozábamos.
Véase por lo siguiente si no tenemos razón en lo que decimos.
Acaba de aparecer un nuevo libro del escritor norteamericano Arthur Hailey, autor de la famosa novela Aeropuerto. Las obras de Hailey se venden por millones en los Estados Unidos. En esta última, titulada Los Cambistas. trata en un pasaje de la vida de un truhán internacional, que ha escapado a la justicia, y en un diálogo, los personajes de la obra, hablan así: Durante las últimas dos semanas él había tratado varias veces, sin éxito, de telefonear al Gran Jorge en Costa Rica. El presidente de la Su Nat Co. se mantenía incomunicado. Los informes que se filtraban lo describían viviendo en su esplendor feudal, con un pequeño ejército de asesinos para protegerlo y manifestaban que él no tenía la intención de regresar jamás a los Estados Unidos.
Se admitió que Costa Rica nunca respondería a los procedimientos de extradición de los Estados Unidos, tal como lo habían probado otros esta.
fadores y fugitivos. No hemos de admitir con pesar que el pasaje de la novela se parece mucho a la realidad que vivimos. Deploramos como costarricenses la desafortunada cita del señor Hailey, pero más aún que la conducta de nuestro Gobierno, sea la que ha dado base para que millones de norteamericanos nos conozcan a través de situaciones tan denigrantes.
Es tan generalizada esta nueva impresión acerca de nuestro país, que otro libro de reciente edición, esta vez el de Michael Norman acerca de Robert Vesco, lo define como la máquina de hacer dinero, que compró un país para sí mismo.
Para que Costa Rica no tuviera que soportar estos agravios, cientos de costarricenses le pidieron el año pasado al presidente de la República, de manera razonada y respetuosa que acabara con la amenaza que representa para nuestras instituciones y para nuestro buen nombre, la presencia de aquel fugitivo en el país. El primer mandatario respondió en la forma desabrida que todos recordamos, y aquí están ahora los resultados de esa conducta.
No guardamos la menor esperanza de que el presidente rectifique su actitud. El se encuentra en imposibilidad de hacerlo, pero sí queríamos hacerle ver que más daño recibimos de sus debilidades y complacencias, que bien recogemos de las reuniones que tienen lugar en el suelo patrio.
Posiblemente, fue un marciano quien les recompensó tan esplen.
didamente por su buen comportamiento.
000 De las cárceles del país se han escapado, en los últimos meses, centenares de internos. Una de dos. el Gobierno decide ponerles coto a estos abusos en forma tajante o entrenamos a estos veloces fugitivos para que sean nuestros representantes en atletismo en los Juegos Olímpicos en Canada.
ZO 000 Hace algunos dias, CODESA publicó una licitación para comprar unos terrenos para la siembra de caña en Guanacaste. Desgraciadamente, la licitación está tan maravillosamente hecha que a lo mejor don Daniel va a resultar profeta y el gran ingenio de azúcar de Puerto Rico lo instalan en Guardia, cerca de Liberia.
000 Por cierto, dicen que hay millares de pequeños productores de caña que andan en busca de un ingenio.
000 Le aconsejamos que vayan a Puerto Rico a comprar uno, pero antes tengan cuida de no pasarle el volado a nadie. Si no escuchan este consejo, se exponen a que alguien les robe la vuelta.
000 En tiempos de inflación y de recesión estamos a puñalada por bollo de pan.
000 también cuando no hay recesión.
000 Uno de los principios esenciales de la socialdemocracia, según nos contaba abuelita, es procurar el progreso de los pequeños productores.
000 Pero, nosotros somos socialdemócratas para la exportación.
000 Es decir, para reunirnos con los socialdemócratas de otros países.
Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.