10 LA REPUBLICA, Lunes 17 de noviembre de 1975 LA REPUBLICA Do Re Ai Rodrigo Madrigal Nieto, Director Julio Rodríguez Bolaños, Subdirector Yehudi Monestel Arce, Jefe de Redacción Alvaro Cedeño Gómez, Gerente General Dicen los diputados de Liberación Nacional: Nuestra banca estatal debe contar con directores compenetrados al máximo con la filosofia que inspiró la nacionalización bancaria.
El desafio de ANEP Es correcto. Pero, más importante aún es que los directores de la Banca Nacionalizada sean excelentes banqueros.
La fórmula del 3 no es, por cierto, el mejor sistema para seleccionar a los directores bancarios o de las instituciones autónomas. Es un método antitécnico, politiquero y personalista.
en No son, por consiguiente, los enemigos de la Banca Nacionalizada quienes le han asestado a esta los golpes más duros, sino precisamente sus fundadores. La fórmula del 3 es una aberración técnica.
a con si, ahora, le agregamos la exigencia de que los directores estén compenetrados de la filosofia de la Banca Nacionalizada, en lugar de pedirles, en primer lugar, conocimientos a fondo sobre la ciencia bancaria, la situación se nos complica aún más.
Además, como comprobar que una persona está compenetrada con la filosofia que inspiró la Banca Nacionalizada. Sólo hay un medio: la fidelidad al Partido. Pero, dado el personalismo que distingue a nuestros partidos, habrá entonces que hablar de fidelidad a los dirigentes, en cuyo caso preguntémonos en qué grado se beneficia, con este sistema la Banca Nacionalizada.
Por otra parte. qué ocurriría cuando el partido en el Gobierno no sea Liberación Nacional. Cómo se le va a exigir al Presidente de la República que investigue la compenetración filosófica del aspirante a director antes de designarlo. La Asociación Nacional de Empleados Públicos (ANEP) emitió, en dias pasados criterio sobre el problema de la corrupción. Sus declaraciones fueron categóricas y concretas.
La síntesis del planteamiento de la ANEP constituye un desafío para el Poder Ejecutivo. Por una parte, se apoya en el ya clásico grito del Presidente de la República alto a la corrupción del 19 de mayo de 1974, al tomar la banda presidencial, en el que juzgó y sentenció la Administración anterior y a nuestra sociedad y, al mismo tiempo, levantó una bandera esperada por todos los costarricenses. Por otra parte, se compromete la ANEP a luchar a brazo partido contra la corrupción que avasalla al país.
No cae esta Asociación tampoco en el error de pretender salvar a los suyos. Por el contrario, censura acremente a quienes han pervertido la función público para su provecho personal Esta apertura y sinceridad de la ANEP fortifica nuestra democracia y acrecienta nuestras esperanzas. Tras el silencio enervante de las principales asociaciones del país, temerosas de denunciar la corrupción que carcome la sociedad costarricense y a la política nacional, la ANEP, tal como lo hizo a su hora la Asociación de Profesores de Segunda Enseñanza (APSE) no teme denunciar este mal y tampoco se arredra ante el Gobierno.
Nos interesa hacer hincapié en el reto respetuoso que la ANEP formula al Gobierno de la República. Este debe hacer buenas sus palabras algún día del 19 de mayo, que, como dice la ANEP, fue sólo para las galerías y, como tal, más bien contribuyó a afianzar la corrupción. así como dar respuesta a la grave denuncia del Presidente de la República, planteada hace algunas semanas, cuando afirmó que en la Administración Pública sobra el 50 por ciento de los empleados públicos.
Tiene aquí el Gobierno dos desafíos a la vista, directos, insoslayables. Ojalá esta vez responda, pues no cabe aqui el pretexto tantas veces usado de que en estas acusaciones o denuncias incuban oscuros intereses políticos.
Ya es hora, pues, que el Gobierno acabe de una vez por todas con tantas denuncias y comentarios sobre la corrupción. Si no levanta de nuevo esta bandera que ondeó 24 horas el 1º de mayo. la corrupción se tornará en un tema manido y cansino, que no hará mella la conciencia ni preocupará más a nadie. De este modo, la corrupción habría llegado a su climax.
Pero, cuando el Gobierno decida recoger este clamor nacional y demostrar hechos SU preocupación en este tema, ha de definir, claramente, que se entiende por corrupción, mejor dicho, ha de establecer una escala de prioridades en la lucha contra este mal social.
Desde este punto de vista, ha de quedar claro que corrupción no es sólo la mordida o comisión que cobra algún funcionario público para apresurar un trámite o para disimular la falta de algún ciudadano, sino algo mucho más profundo: la corrupción de las bases no es sino efecto de la corrupción de las alturas políticas del país. Por lo tanto, el combate ha de iniciarse en este nivel, en el de los grandes negocios, en la venta de influencia, el negocio entre bambalinas, en el favoritismo a los amigos. La falta o acto de corrupción del empleado de la escala inferior de la Administración Pública se detecta con facilidad. Este no tiene estilo para fingir. Nos preocupa el delito grande, aquel que se lleva a cabo con gracia y arte sin igual, aquel que cuida las apariencias, guiado por la norma máxima del cínico: lo grave no es la comisión de un delito, sino que lo descubran a uno.
Que el Gobierno de la República comience esta lucha para que se adecente la función pública y el pueblo crea en la política nacional.
Que el grito del de mayo vuelva a escucharse en todo el país, pero que se dirija no a los negocios facilones, a los llamados pichuleos, sino, primeramente, a los otros, a los que se realizan con estilo y con toda clase de precauciones, pero que dejan siempre una leve estela, unos hilillos, aparentemente imperceptibles, pero reveladores.
Si el Gobierno quiere ser sincero, que comience por este nivel. Todo lo demás vendrá por añadidura.
Pero, aquí no para el problema. Resulta que los partidos enemigos de Liberación Nacional han sido más respetuosos de la Banca Nacionalizada que los dirigentes de Liberación.
en a El Saopinazo nació en un gobierno partidario de la Banca Nacionalizada, no en una administración poco adicta a este sistema.
0; es que los que participaron en este financiamiento ultrasónico, en beneficio de un candidato presidencial, estaban tan compenetrados con la filosofia de la Banca Nacionalizada que olvidaron las normas bancarias. 0; hemos de suponer que precisamente para evitar estos enojosos problemas y conflictos es preciso nombrar directores bien compenetrados de la filosofia bancaria estatal. Si es así, completemos nuestro pensamiento y exijamos también excelencia de conocimientos y experiencia en cuestiones bancarias.
LA Banca Nacionalizada es, primeramente, banca y, luego, nacionalizada. Hagamos hincapié en el primer punto y allmentemos su desenvolvimiento con la filosofia del segundo. Así, tendremos una excelente Banca Nacionalizada.
Pero, si sólo reparamos en el aspecto de nacionalización y dejamos de lado el bancario, nos vamos a quedar con la filosofia, pero sin banca.
Esta deformación fáctica y conceptual se observa también en otras Instituciones del Estado. Cuando se hace hincaplé solamente en la vertiente social de las instituciones estatales. qué ocurre. Que la bancarrota es inmediata y la filosofia y sensibilidad social no son suficientes para levantar una institución que perece.
se YO DIGO QUE EL LAVADO DE CEREBRO NO EXISTE!
Por ayudar a los pobres el Consejo Nacional de la Producción ha sufrido en estos años pérdidas por varios centenares de millones de colones. El sofisma salta a la vista. Pareciera que necesariamente una institución del Estado ha de vivir permanentemente en la bancarrota, con tal de beneficiar al pueblo. Es que la ciencia y la técnica no son compatibles con los objetivos sociales. Mejor dicho, sin la ciencia y la técnica, sin la experiencia y la eficiencia acrisoladas, los fines sociales se tornan en una estafa.
TENÉS RAZÓN.
TENÉS RAZON.
TENÉS RAZON.
UNAN LADO CEDES PATRICIA HEMEST?
El problema está en que es más cómodo y de relumbrón proclamar sólo objetivos sociales y olvidarse de las duras cuestiones técnicas, cientificas y administrativas. Lo social es llamativo y rentable electoralmente. El trabajo silencioso, metódico, en cambio, sólo produce satisfacción espiritual.
lale El país está saturado de filósofos y revolucionarios de lo social. Lo que necesita son buenos dirigentes.
Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica