12 LA REPUBLICA, Lunes 29 de diciembre 1975 o EDITORIAL Do Re Mi Nada más parecido a los días anteriores al juicio final que los días posteriores a la navidad.
000 Turistas sin comodidad Las oficinas públicas y numerosos comercios están cerrados. La Avenida Central y las vías públicas de San José se encuentran desiertas.
000 En las otras ciudades y en los barrios josefinos se forman grupos o corrillos en las esquinas, como en espera de un ataque aéreo o que se abran los cielos 000 no El sonambulismo es la nota característica de los costarricenses en estos días. Ni siquiera las fiestas populares nos despiertan, pues éstas tienen lugar en un reducto de Zapote.
000 a Todo se detiene. Es una especie de agotamiento, tras las fiestas navideñas, repletas de tamales, y de espera de algo que llegará, pero que no sabemos cuándo ni dónde.
ΕΙ Instituto Costarricense de Turismo ha ocultado SU complacencia por la renuencia de millares de norteamericanos a visitar México. Estiman nuestros funcionarios que Costa Rica podria incrementar considerablemente la afluencia turística norteamericana, mediante una inteligente publicidad.
En un punto ha sido consistente el Gobierno en estos diecinueve meses: su esfuerzo por estimular la actividad turística. Con este fin, se han anunciado diversos planes y el propio Presidente de la República no ha perdido oportunidad de apoyar los planes o iniciativas formulados sobre el particular.
000 en o se quiere, es un dulce nirvana, aunque en el budismo éste constituye un estado de paz inefable y descanso etero, después de haberse extinguido las pasiones, y entre nosotros, el nirvana tico de estos días es una mezcla de indolencia indigena, de ocio hispano y de aburrimiento tico.
000 Claro, en vez de aburrimiento podríamos decir otra cosa, usar otro término más gráfico, pero aún no hemos adquirido un grado de confianza tal con nuestros lectores para estamparlo en esta columna.
000 (Una de las formas ticas de expresar intimidad y familiaridad con otras personas es proferir, delante de ellas, malas palabras. lugares públicos, los servicios telefónicos o las carreteras que conducen a las playas o parajes turísticos.
El estado de nuestras vías públicas urbanas o que comunican las ciudades entre sí son un desastre no sólo por la existencia de millares de huecos, sino por su mala construcción, su pésima atención y la forma descuidada como se rellenan los huecos las zanjas que, constantemente, se abren en nuestras carreteras. Si los turistas valoran el país que visitan y muchos proceden en esta forma, por la eficiencia de estos servicios de infraestructura, posiblemente quedaremos a la zaga de cualquier país latinoamericano. No creemos que honre a nuestros ingenieros, a nuestras municipalidades y al Ministerio de Transporte, la construcción de nuestras vías públicas y la y forma como se mantienen.
Lo mismo cabe decir de la limpieza reinante en San José y las principales ciudades del país no sólo externa, sino de los lugares de diversión y de los restaurantes. La suciedad que muestran muchos de estos establecimientos, así como la deficiencia de los servicios sanitarios, nos colocan en una posición poco digna como país civilizado.
Urge, pues, que el Instituto Costarricense de Turismo se preocupe también de estos asuntos, no porque le competan directamente, sino porque las enormes fallas existentes en estos campos no riman con la publicidad que se lleva a cabo sobre nuestro país y porque estas palpables deficiencias en diversos órdenes de la vida nacional afectan el prestigio de Costa Rica y significan, en lo interno, una grave despreocupación hacia los intereses y derechos de los propios costarricenses.
000 Aclaramos este punto no como expresión sociológica, sino con fines eminentemente turisticos.
000 Al fin de cuentas, Costa Rica es cada vez más un país para turistear.
Posiblemente, ese será nuestro fin y nuestro destino histórico.
Sin embargo, los planes turísticos han de abarcar suponemosdiversos campos. No se trata, como algunos creen, de establecer algunos hoteles en la capital o cerca de las playas solamente, o de realizar una nutrida propaganda en el exterior, sino de una vasta red de obras, de tal suerte que el turista encuentre, además de paisaje, belleza natural y tranquilidad política, comodidad y los servicios elementales de un país civilizado.
Aunque sean perogrulladas, el turista no viene a enclaustrarse en un hotel o a contemplar en éxtasis la belleza de nuestros paisajes.
Necesita, además, ciertos servicios indispensables, comodidad, limpieza, excelentes vías públicas, es decir, todo aquello que forma lo que actualmente se llama calidad de la vida.
Decimos esto porque hay relación alguna entre la propaganda turística y las manifestaciones gubernamentales al respecto, y el estado de nuestras vías públicas, la limpieza de muchos restaurantes y 000 Pero, nos apartamos del tema.
000 El tico no pasea, no se mueve, no camina, no corre, no salta. El tico es un ser estático, hierático. Sera un marvilloso modelo para el arte egipcio.
000 Lo vemos en estos días. Dias libres, feriados, en los que no se trabaja. Sin embargo, el país cae en el sonambulismo, en el agarrotamiento fisico y mental, en la arteriosclerosis. Para que la gente se mueva es preciso citarla a un tope en la Avenida Central, al naval o al Zapote.
no 000 En otros países, en los días libres las montañas se llenan de paseantes y los campos de juego de niños, jóvenes y adultos.
000 Aquí, en nuestra amada Costa Rica, sólo los parques y las aceras abundan en jóvenes y en adultos.
000 Asi deben ser los días anteriores al juicio final.
PUÑA.
CREO QUE CON ESE CAPOTITO TENDRA QUE JUGARSELA MUCHO 000 Sin embargo, en aquellos días apocalípticos al menos se estará en espera de algo, pero, en estos días. qué esperamos?
000 Lo cierto es que, desde el 1o. de diciembre, estamos viviendo en el tiempo de nadie, en esta larga espera sin esperanza del advenimiento de enero, a fin de comenzar de nuevo a ascender por la cuesta del año.
000 AUGURIOS PARA EL COSTO DE VIDA Después de la navidad, el país cae en la modorra. Antes del 24 de diciembre, si bien se había reducido en un 70 por ciento el ritmo del trabajo, un suave regocijo embargaba los corazones. En estos dias, en cambio, en el tiempo de nadie, es la modorra nuestro tirano.
1976 000 No estamos preparados aún para disfrutar del ocio creador. Esa es la verdad.
Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.