12 LA REPUBLICA. Lunes 15 de agosto de 1977 EDITORIAL Do Re Ai. Algunos dirigentes o ex dirigentes de la oposición se han convertido en los niños mimados de la prensa goblemista.
Ya es hora.
Revelador. verdad?
Una cosa es publicar lo que es y otra, aquello que queremos que sen.
Apenas comienza la campaña política, comienzan a aparecer los minipartidos o partidos turecas.
Generalmente, se les bautiza con nombres rimbombantes. El fin de estos partiditos que por lo común sólo tienen un partidario: el que da declaraciones y habla en televisión es cotizarse.
es la mejor forma de cotizarse es atacar a alguno de los partidos grandes. De este modo, la otra agrupación política está dispuesta a utilizar a este minipartido o tureca como instrumento para poner en boca ajena lo que no se atreve a decir por la propia, Es el tiro de la carambola.
Asi, en pocos meses algunos conciudadanos hacen su agosto y pueden ganarse una platilla sirviendo de testaferros a algún partido politico henchido e hinchado de dinero.
Los actuales problemas económicos, morales y sociales del país son algo más que un atractivo tema de discusión o un campo abierto para la propaganda política.
Exigen, de parte de los ciudadanos generosos y responsables, una respuesta inmediata y vigorosa, y de los politicos una atención inmediata, sin perder el tiempo en aquelarres o vanos debates.
La solución de los problemas nacionales corresponde a todos los ciudadanos. El desarrollo es, al fin de cuentas, una aventura común. No obstante, sus principales instrumentos de acción son los partidos políticos. Su excelencia intelectual y moral define el derrotero de una nación y, aunque se cuente con un sector privado y profesional y laboral, pujante y capaz, si las agrupaciones politicas y, concretamente, sus dirigentes no descuellan por su talento y honorabilidad, por su visión y calidad humana, dificilmente podrán los empresarios, los inte.
lectuales y otros grupos cívicos lograr las más elevadas metas para el país.
En la actual campaña politica sólo conocen los nombres de los candidatos y de sus vicepresidentes.
El resto del cortejo aún permanece en el corazón de los electores. Con todo, el escenario político está preparado para una lucha noble y eficaz. Pasado el tiempo de las escaramuzas y de las pugnas internas, es hora de volver los ojos no al interés personal sino a los grandes problemas de la nación. Sólo así la politica adquiere todo su sentido y su razón de ser.
El espectáculo brindado al país en estos meses, en los que la posición politica o personal se ha sobrepuesto, en todos los partidos, al interés nacional no ha sido edificante. Nos ha quedado a los costarricenses amargo sabor en el paladar.
Pero, si este ha sido el objetivo de algunos politicos, noveles o duchos en estas actividades, llegó el tiempo de trazar una raya y de detenerse en firme para ahondar en lo esencial. lo esencial es lo permanente, los graves problemas que el país está sufriendo.
La enumeración o descripción de los males nacionales no obra de especialistas. Cualquier ciudadano los conoce y puede plantearlos, pues han sido el tema favorito en estos años.
Corresponde ahora a los politicos resolverlos o, al menos, presentar las soluciones más adecuadas.
Mas, la politica no es sólo la oportunidad de formular soluciones.
Estas pueden ser engañosas, si no se acompañan de una actitud firme y de.
finida en ciertos puntos vitales para nuestra sociedad. Desde este punto de vista, la claridad del lenguaje y los antecedentes de los politicos son fundamentales.
No se les puede prestar fe a quienes, por cálculo o por miedo, han callado ante los más graves problemas del país, sobre todo ante aquellos que han brotado en la cima del poder politico. Nadie cambia de conducta o de actitud de la noche a la mañana o al llegar a cierta edad. El miedoso seguirá siendo miedoso.
El pillo continuará con sus pillerías. El cinico reforzará su cinismo. El domesticado afianzará su debilidad y su entreguismo.
Después de varios meses de zozobras, dudas y disensiones, los partidos politicos han encontrado su camino. Ya es hora, entonces, de hablar claro, de descorrer velos y de meter el bisturí hasta las vísceras de los problemas del país.
Las lamentaciones, los lloriqueos y la rebatiña han de ser una anécdota del pasado.
El partido grande hace la campaña limpia y su tureca, el juego sucio. como hay individuos para todo en esta viana del Señor. Tenemos que, de pronto, algunos, que a duras penas reciben un salario para alimentarse ellos y su familia, aparecen pagando costosos espacios en la televisión o anuncios en la prensa.
se ¿De dónde les viene el dinero? Si de ellos, son unos irresponsables, pues deberian orientar hacia sa familia los recursos que utilizan para Insultar. si viene de otros. con qué car se atreven a hablar?
Otra de las característica de nuestras campañias son los telegramas Ya aparecieron los telegramas.
Sin embargo, los de este año tienen una particularidad: se comenzó a hablar de ellos antes que se enviaran.
Un perlódico anunció que fulano de tal estaba recibiendo un alud de telegramas. Al día siguiente, se comenzaron a publicar estos mensajes de solidaridad.
un Pero, resulta que todos los telegramas se parecen. Poseen el mismo estilo, idéntico ritmo de la frase, igual contenido y apuntan al mismo objetivo SOY YO VIE, SOLO QUE REMODELADO Todos nos conocemos en Costa Rica. Sabemos porque somos perezosos de carné que sólo cuando alguna causa entusiasma a los ticos, estos se toman el tiempo de tomar un teléfono y dictar un telegrama, o de ir al telégrafo.
OOOR Todos sabemos en qué excepcionales circunstancias los costarricenses rompen su rutina y modorra, y ponen un telegrama. En el resto de los casos, las listas de telegramas son inventadas o bien dictadas por una sola persona. Existen el formulario y el texto, pero no así el cristiano de carne y hueso que firma.
poti Por otra parte. por qué si un cludadano es tan adorado, por qué si su causa es tan atractiva, casl nunca aparecen firmas de ciudadanos conocidos, pero si un cachimbal de nombres comunes y corrientes, como el del autor de esta columna!
HIP cos Se nos podrá decir que en una democracia sólo cuenta el pueblo y el pueblo lleva nombres de corentada. Pero, es que si ciertos dirigentes son tan importantes y conocidos sólo en cierto circulo social, por qué los de este no mandan telegramas!
SUENO DE ALGUNAS MADRES lale?
Asi es nuestra politica. De todos modos, mientras se manden telegramas y no bombas, todo está bien. mientras baya humor y gozadera, no habri bombas.
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