8 LA REPUBLICA. Sábado de octubre de 1977 EDITORIAL Do Re Mi Está en el tapete la publicidad del Gobierno y de algunas Instituciones autónomas.
La denuncia sobre los pagarés El asunto se las trae, por cuanto no se trata de publicidad para informar al público o para anunciar algún nuevo servicio, sino de propaganda política en todo el sentido de la palabra.
Y, por casualida electoral.
esta propaganda coincide con la campaña por azar, el Partido Liberación Nacional retoma esta propaganda y la acomoda a sus objetivos electorales.
Bienvenida sea la propaganda política, el pan cotidiano de estos meses, pero distingamos entre la que realiza un partido de frente y con sus recursos y la que efectúa el Gobierno con fines eminentemente políticos.
Nunca hemos pedido que al Estado se le prohíba hacer publicidad. Sería un contrasentido proceder en esta forma. Lo que cabe es distinguir, como lo hemos apuntado, entre la propaganda y la publicidad, entendida como un medio para informar o para dar a conocer algún servicio, para enterar a los ciudadanos sobre alguna obra o algún plan.
Pero, lo que es intolerable es la propaganda persistente, tal como la llevada a cabo por una empresa comercial para vender un producto, o aquella que es del todo innecesaria.
La denuncia formulada por un grupo de diputados sobre los pagarés presentados por el partido Unificación Nacional para garantizar el pago de la deuda pública ha recibido la atención debida de parte de la Contraloría General de la República.
Anteayer el Contralor General de claró que esta institución ha sido cuidadosa en el adelanto de recursos del Estado a los partidos políticos, por lo que se exige un pagaré y una constancia firmada por un contador público sobre los ingresos del firmante. La Contraloría confía en estos profesionales y en los abogados que autentican estos documentos.
Los hechos de muestran, sin embargo, a juzgar por la denuncia presen.
tada, que no existen controles ade.
cuados o que, al menos, la Contraloria debería realizar alguna investigación a fin de comprobar si los pagarés presentados por los partidos políticos satisfacen los requisitos legales y económicos deseables.
Hay que recordar, a este respecto, que muchas veces la pasión política o el acicate del tiempo y de la toma de decisiones en tiempos de campaña electoral pueden inducir a algunas personas a incurrir en ligerezas o a no adoptar las providencias necesarias para garantizar adecuadamente la solvencia económica de los declarantes. No conviene, por ello, depositar toda la confianza en los profesionales que autentican, aunque no se dude de su honorabilidad. Los recursos del Estado deben resguardarse con celo excesivo, aunque, dados los malos ejemplos dados por este gobierno, los escrúpulos y la fidelidad a la moral pública sea, para algunos, moneda sin valor.
Ignoramos, a este respecto, cuántos pagarés presentados por la Unificación Nacional son legitimos y cuántos no reúnen los requisitos exigidos por ley. Con todo, la Contraloría debe, en este punto, llevar la investigación hasta sus últimas consecuencias. Al fin de cuentas, en alguna dependencia pública ha de depositar su confianza el pueblo en estos tiempos.
No adelantamos juicio sobre este espinoso y grave asunto. Con todo, seria inconcebible que algún partido político, que aspira nada menos que a gobernar el país, es decir, a dar ejemplo de honradez a toda prueba, de respeto a los recursos y bienes del pueblo, no sólo presente documentos sin respaldo financiero fuera de toda duda, sino que se atreva a utilizar a sencillos trabajadores para estos fines aunque aduzca argumento deleznable que no sólo los ricos han de respaldar estos pagarés o que a nadie consta que los firmantes no posean recursos.
En cuanto al respeto de los recursos del Estado, estas razones no pueden admitirse desde ningún punto de vista. Una cosa es la justicia social y otra, la administración honrada de los recursos públicos. En este punto, no caben poses demagógicas, sentimen.
talismos ni vagas declaraciones para salir del paso.
No podemos aceptar que una agrupación política o un ciudadano no garantice con documentos válidos y con recursos reales y propios una deuda con el Estado, mientras que si se tratara de negocios propios obraría con foda suerte de garantías y de condiciones.
Como los bienes del Estado son sagrados, el país confía en que la Contraloría General de la República proceda con energía y claridad, no obstante las presiones que habrá de sufrir.
Todos los costarricenses saben qué es el INVU, en qué consisten las asignaciones familiares, qué es el INA, cuáles son las tareas del Consejo Nacional de Producción, del MOPT y de otras instituciones del Estado. qué viene entonces la propaganda que se está efectuando desde hace varios meses. Quién no advierte que se trata de propaganda política monda y lironda?
Desde este punto de vista, el tipo de propaganda realizada en estos meses y utilizada luego por el Partido Liberación Nacional es una corruptela.
Es toda la maquinaria del Estado al servicio de un partido politico.
Si, en la lucha de tendencias se levantaron voces airadas contra el Gobierno, por cuanto estaba usando sus recursos para favorecer a un candidato lo cual fue revelado con toda clase de pruebas por el Lic.
José Luis Molina ¿qué no podrá ocurrir ahora cuando el adversario es diferente?
El cludadano ha de contar con toda clase de garantias elec torales. conspirar contra este derecho del pueblo no es sólo impedir el sufragio, asesinar, violar las urnas o desconocer el veredicto popular, sino también poner los recursos del Estado al servicio de un partido VICENTE ALEXANDRE POETA ESPAÑOL GANADOR DEL PREMIO NOBEL 1977 Esto es un acto de corrupción y, además, una violación del derecho electoral.
Resulta risible que el Tribunal Supremo de Elecciones les prohiba a los ciudadanos o a cualquier asociación publicar un campo pagado político, interpretando erróneamente el artículo 85 del Código Electoral, y, en cambio, observe impavido como el Gobierno gasta millones de colones en propaganda política para favorecer a un partido.
Si hay algo que el pueblo de Costa Rica ha censurauo siempre es la Intervención del Goblemo en el campo electoral, la utilización de la maquinaria del Estado para proteger los intereses políticos de una agrupación, en fin, la injusticia y la discriminación en este campo.
lalom No podemos tolerar los costarricenses que, con tal de defender ciertos intereses, se esté violando una conquista del pueblo cos tarricense y resulta extrano que sea un grupo del Partido Liberación Nacional el que esté quebrantando esta conquista de don Pepe.
SIGUIENDO LA TRAYECTORIA GLORIOSA DE NERUDA, ASTURIAS, JUAN RAMÓN JIMÉNEZ, GABRIELA MISTRAL, BENAVENTE ECHEGARAY, TAMBIÉN PREMIOS NOBEL DE ESPAÑA AMÉRICA LATINA Aún hay tiempo para eliminar este bochornoso espectáculo, este despilfarro de los recursos del pueblo.
Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.