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LA REPUBLICA. Vlema 26 de enero de 1979 Viva el Papa gritan en México POR JAVIER BAENA MEXICO, AP). Veinticuatro horas antes de la llegada del Papa Juan Pablo Il a esta nación de 65 millones de habitantes, México vive momentos de intensa emoción El Pontifice polaco, quien realiza su primera peregrinación fuera de Italia. es la superestrella en la cual se centra toda la atención de este país que tiene la población católica mas grande del mundo, después de Brasil disponibles 200 cupos y los boletos distribuidos entre personalidades del gobierno, en el congreso y la diplomacia se agotaron pocos minutos.
En el atrio de la Basílica hay personas ofrecen hasta mil pesos mexicanos (40 dólares) por un boleto, pero no hay nadie que quiera venderlo. Estar alli será un verdadero privilegio Otras 40. 000 personas podrán estar fuera de la Basilica millares más se tendrán que quedar en las calles adyacentes o a ver la ceremonia en la televisión.
El viernes a la llegada del Papa, el centro de esta capital.
habitualmente, congestionada de vehículos, quedará vir tualmente paralizado. Las autoridades de tránsito ordenaron cerrar la principales vías de la ciudad entre las 12 y 18. 00 horas.
El rostro del Papa se ve en todas partes, en los almacenes, hoteles, cafeterías y hasta en las tiendas de revistas donde debe compartir los anaqueles con las revistas pornográficas. Viva el Papa. el grito que atro nara las calles y plazas de México a partir del sábado, es también una frase que se ve por doquier México católico. otra frase que anuncia la bienvenida que esta nación dará al vicario de Cristo, contrasta con los esfuerzos que hacen grupos anti religiosos ansiosos de mantener la tradicional división entre la iglesia y el Estado impuesta desde los tiempos de Benito Juárez.
El Presidente José López Portillo a pesar de no tener México relaciones con el Estado Vaticano, estará el viernes en el aeropuerto para recibir al Papa, según el mismo informó, y sostendrá una entrevista con el como huésped distinguido del pueblo mexicano, pero no como jefe de Estado.
Las autoridades mexicanas y los organizadores de la II Conferencia General del Episcopado Latinoamericano a cuya inauguración viene Juan Pablo Il consideran que las muchedumbres que atraerá la figura del Pontifice serán incalculables. Este país no sólo es ferviente católico, sino que la.
religiosidad de las gentes llega hasta los límites del fanatismo, dijo Ramón Yzar Zetina, funcionario de una empresa ensambladora de automóviles, al describir la ansiedad que ha despertado la visita papal.
Los periodistas son asediados por personas influyentes que desean, aunque sea en préstamo, una credencial de prensa para poder asistir el sábado a la Basilica de Nuestra Señora de Guadalupe a la inauguración de la Conferencia Episcopal que estará a cargo de Juan Pablo II.
Las autoridades mexicanas temen que en esta capital de 12 millones de habitantes el desbordamiento humano pueda causar tragedias en la recepción al Pontífico polaco, quien llegará aquí a las 13:00 horas EST del viernes (hoy. procedente de la República Dominicana, primera escala de su viaje por América Latina. Es el segundo viaje que realiza un sucesor de San Pedro a este continente que alberga casi la mitad de los 700 millones de católicos del mundo. La primera la hizo a Colombia en agosto de 1968 el finado Pablo VI.
Todos los balcones a lo largo de la calzada de Guadalupe, por donde pasará el Papa rumbo a la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe en automóvil han sido alquilados. Los precios varían desde 100 dólares en la primera fila hasta 20 en las azoteas, según informó uno de los funcionarios encargados de organizar la recepción al Pontifice.
Por radio se recomienda a los mexicanos que, para evitar peligrosas aglomeraciones, se queden en sus casas y vean por la televisión los actos centrales de la visita de cinco dias de Juan Pablo II. La señal de TV será enviada a una audiencia mundial estimada en 400 millones de personas.
Sin embargo, los mexicanos desean ver al Papa personalmente. Si no lo veo ahora, no tendré nunca la oportunidad de verlo personalmente. dijo un lustrabotas. Este sentimiento los comparten millones de mexicanos que desean ver, y ojalá, tocar al Papa, cuya personalidad ha roto los severos moldes del protocolo vaticano y lo ha llevado a mezclarse con las multitudes, Para asistir a la inauguración de la conferencia episcopal en la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe sólo había Aunque el viernes será dia habitual de trabajo, se espera que muchas oficinas y almacenes cierren sus puertas después de mediodía pues son millones los que desean dar la bienvenida a Juan Pablo II.
El gobierno mexicano ha tomado especiales medidas de seguridad y ha dispuesto que unos 50. 000 hombres están.
atentos a mantener al Papa fuera del alcance de multitudes.
incontrolables.
Pero, la seguridad personal del Papa no preocupa a los organizadores de la III Conferencia General del Episcopado Latinoamericano. Sabemos que los propios mexicanos velarán por la seguridad del Papa hemos recibido ofrecimientos de toda clase para protegerlo. Un mexicano ofreció un perto doberman, especialmente amaestrado. dijo un portavoz de prensa del CELAM.
La expectativa ante la visita papal y el desarrollo de la conferencia episcopal se mide en 300 solicitudes de credenciales elevadas por periodistas de todas partes del mundo, incluso de la Unión Soviética. Estado ateo.
Ni siquiera los periodistas se han librado de las medidas de seguridad. Todas las solicitudes han sido examinadas por los organismos de seguridad del Estado mexicano, aunque las credenciales son oficialmente expedidas por el Consejo Episcopal Latinoamericano CELAM. Las opiniones que contienen los artículos que se publican en esta página, son las personales de qalenes los firman y no coinciden, necesariamente, con las del periódico.
Los bigardos del ron Hacia años sentia el deseo de buscar esta obra de José Marin Cañas, por alguna tentación enfermiza que su titulome sugeria. Conodiendo, como conozco, la prosa de sus libros mayores, valga citar El infierno verde o Pedro Arnaez. me imaginaba Los bigardos.
como alguna obrita cursilona, primeriza y renca, de elas que llamamos pecadilos de juventud.
y carajo! Ya se acabaron los eufemismos, don Pepe me he dado un gustazo leyendo este libro. Porque, desde la crueldad del padrastro, en La mala noche pasando por La soberbia del calvo. tardes de toros, arena y sangre, hasta los Bigardos. sin olvidar el Yantar navideño. Rota la ternura o La tragedia del pregón. el libro está Deno de humanidad, de buena prosa, y de un estilo que ya adivinaba algunos de los juegos que hoy buscamos como moda los que nos atrevemos con las letras. Mucho de su lenguaje, arcaico si se quiere aún en los años treintas, es parte del lenguaje que un neobarroquismo ha empleado en la literatura moderna, especialmente en las zonas del Caribe. Pero allí estaba de cuerpo entero el narrador, que más tarde sería uno de los mejores de nuestras letras, por más que su estilo sea criticado por muchos e irreverenciado por otros tantos. Los bigardos del ron es un escaparate de esos personajes que a ratos nos recuerdan la picaresca española piruetistas del Cuatro para tomar café. los dolorosos cuadros que con otro fin, no literario, un día escribió Sinatra, pedazos de una vida desgajada a lo largo de años de sufrimiento. Duverrán los define mejor: En estas cortas piezas Marin Cañas logra acuflar en personajes concretos (indefinibles porque tienen connotaciones diversas y este es uno de sus aciertos. toda una atmósfera del desamparo de la poesia de las vidas sombrias, y que es como una historia del fracaso humano. Algunos son pícaros, pero pícaros soñadores. En varios mezclan sus rasgos el mendigo, el sablista, el desilusionado, el bohemio. El narrador los mira desde abajo, desde su propio mundo.
como el cronista que ha de salvarlos para siempre al inscribirlos sabiamente en su retablo.
Entendamos que Los bigardos del ron no es ni mucho menos, de las mejores obras del autor. Es una obra humana, muy humana, que salva los defectos de una prosa en evolución, que se manifestaría más tarde en toda su calidad.
La pesadez de encliticos, el mal uso del pretérito de subjuntivo, que aún hoy se mantiene en el autor. un pequeno libro que allá por los tiempos de mariscastañia editar la Imprenta Borrasé. Prólogo a esta edición. el temor al disfesmismo que acentúa la groseria a base de letras sueltas, cierto sentido crítico del narrador hacia sus propios personajes, son pecata minuta, si nos atenemos al todo que es la obra. Citamos estos errores, no por afán crítico hacia un libro que se publicó hace cincuenta anos.
sino para demostrar que una obra puede darse el lujo de tener errores, y mantenerse dentro de una buena calidad.
Cuando lo malo supera lo bueno, ya no hay eseritor. por más nóvel que sea. Pero José Marin Canas era escritor y lo sigue siendo por derecho propio.
Marin Cadas, José Los Bigardos del roa. Editorial Costa Rica, 1978.
Marco Retana El mismo titulo, que considero infame para un conjunto de narraciones, o crónicas. como muy bien explica su prologuista Carlos Rafael Duverrán, me insinuaba un telenovelón de esos de cuatro de la tarde por los que suspiran muchas damas y otros tantos caballeros. La Editorial Costa Rica puso en mis manos la ansiada obra.
Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.
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