El 2003 empezó con decenas de promesas, construcción de pasos a desnivel, préstamos para cambiar el alcantarillado sanitario de San José y más plazas para la Policía de Tránsito; pero estas y otras metas se quedaron para mejores tiempos.
La reducción de los presupuestos y los trámites engorrosos son los principales argumentos de los responsables de varias de las obras no realizadas.
En el caso del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT), se quedaron pendientes la construcción de los pasos a desnivel en las rotondas de Paso Ancho y San Sebastián.
El jerarca de la entidad, Javier Chaves, reconoció que las obras originales estaban previstas para cruces con semáforos "que resultaban con una vida útil inferior a los pasos a desnivel de seis carriles".
Esa diferencia los obligó a modificar los planos y atrasar todo el proceso. La esperanza es que el primero de esos pasos empiece a construirse en el primer trimestre del 2004.
En el MOPT, también se habían prometido 100 plazas nuevas para la Policía de Tránsito, pero, a fin de cuentas, los cupos no fueron autorizados debido a un recorte en el presupuesto ordinario del 2003.
El director de esa dependencia, Ignacio Sánchez, aseguró que volverá a solicitar las 100 plazas en el presupuesto extraordinario de abril del 2004.
Eso sí, el MOPT cumplió con otros proyectos ofrecidos para el 2003, como la ampliación del aeropuerto de Liberia, que está en proceso, o la inversión de ¢28.000 millones del Consejo Nacional de Vialidad en varias rutas, como la Interamericana norte (hacia Peñas Blancas) y la rehabilitación del tramo Sixaola-Bribri, en Talamanca.
No alcanzaron 12 meses
Tampoco alcanzaron los 12 meses del año pasado para concretar el préstamo con el Banco de Cooperación Japonesa para la construcción del alcantarillado sanitario del área metropolitana.
Los $100 millones del empréstito podrían aprobarse en este 2004, pero para su ejecución se necesita el visto bueno de la Asamblea Legislativa.
En otras materias, la expectativa del Ministerio de Educación Pública era construir 28 nuevas sedes de telesecundaria en todo el país, pero llegó diciembre con apenas 15 obras, en zonas alejadas del país.
Esta modalidad es la mejor alternativa de estudio de 4.500 jóvenes. Sin embargo, las limitaciones presupuestarias y la falta de material didáctico impidieron, a criterio de los involucrados, que las telesecundarias se expandan.
Por último, la Caja Costarricense de Seguro Social invirtió ¢3.000 millones en la nueva torre de urgencias del hospital Calderón Guardia, pero, durante todo el año, la estructura se desaprovechó.
A finales del año se trasladaron los servicios de ginecología y administración, pero quedarán hasta el 15 de enero próximo el paso de los equipos de rayos X y la búsqueda de más personal para que por fin entre en operaciones.