El último caudillo del Deportivo Saprissa se despide de las canchas nacionales, atrás deja un rastro de conquistas a nivel local e internacional. Walter Centeno recuerda con orgullo los triunfos cosechados con las casacas del Saprissa y la Selección Nacional.
El Paté seguirá de cerca el futbol mientras se prepara para ejercer como director técnico, algún día espera llegar al banquillo del cuadro tibaseño.
¿Cómo toma su salida del Saprissa?
Yo salí bien del Saprissa, fue la mejor decisión porque ya había terminado mi ciclo como jugador. Estaba en una etapa donde ya no podía seguir acumulando derrotas y borrar todo lo bueno que había hecho durante mucho tiempo.
¿Se está preparando para jugar en el extranjero?
Sí, me encuentro entrenando fuertemente, claro, no es lo mismo practicar con un equipo que solo, pero ahí uno hace lo que puede para no perder la forma.
¿En cuál equipo le gustaría jugar?
Eso es lo de menos, en estos momentos no puedo ser tan exigente, si aparece algo, independientemente de cual país sea, lo tomaré.
¿Hubo una generación de jugadores con la que se haya sentido más cómodo?
Es imposible elegir solo a una generación, pero te puedo mencionar tres: cuando jugué en Belén, ahí Allan Oviedo, El Macho Ramírez, El Diablo Contreras me pasaron un poco de su experiencia. Luego, la Selección Nacional que clasificó al Mundial de Corea Japón y el equipo de Saprissa del 2003 tenían jugadores con los que me sentía muy cómodo en el terreno de juego.
¿Hubo un jugador que le haya dado un consejo que le ayudó a llegar lejos en el futbol?
Hubo muchos jugadores, sobre todo en Belén, que me aconsejaron al inicio de mi carrera. Óscar Ramírez me dijo una vez que si quería triunfar en el futbol tenía que trabajar la parte física.
¿Cuál es su gol favorito?
He anotado con Saprissa, con La Sele , además le anoté al Real Madrid. Pero los goles que le hice a Alajuela los aprecio mucho. Hubo uno muy especial que le anoté a Ricardo González en un clásico en el 2004. Fue en Tibás y me tocó cobrar un tiro libro al último minuto.
¿Cómo vivía Paté los clásicos contra la Liga?
Desde el primero hasta el último, un clásico era un partido muy íntimo a nivel emocional. Eran un asunto muy romántico, pues medían contra un archirrival la calidad de uno como jugador. Todos querían jugar esos encuentros.
¿Cuál fue el rival que le dio más dolores de cabeza?
Fueron los jugadores de la Liga del torneo de 1996, eran dirigidos por Valdeir Badú Vieira. Para ese momento yo venía comenzando y ellos tenían mucha experiencia. Realmente me dieron muchos dolores de cabeza en su momento.
¿Qué significa la camiseta del Saprissa con el número ocho?
El número lo había dejado Benjamín Mayorga, que fue un estandarte del Saprissa, y lo tomé con mucha responsabilidad. Durante mucho tiempo lo defendí, lo hice valer y le di un valor agregado.
¿ Cómo le gusta despejarse del futbol?
En mi tiempo libre me gusta ver películas dramáticas que estén basadas en historias de la vida real. Además, soy un excelente cocinero, preparo ensaladas, mariscos, y carnes. De vez en cuando, una escapadita a la playa no cae mal.
¿ Cómo se maneja en las redes sociales?
Llevo diez días con un perfil de Facebook, soy nuevo en el tema, pero me parecen muy interesantes y hay que adaptarse a las modas.