Costa Rica estará de duelo durante dos días y las banderas ondearán a media asta, como signo de homenaje y respeto por las víctimas de los atentados terroristas ocurridos ayer en Estados Unidos.
El decreto lo firmó el presidente Miguel Ángel Rodríguez en la Casa Presidencial.
El mandatario expresó la solidaridad de Costa Rica con los Estados Unidos y confirmó que no ha habido informes de víctimas costarricenses.
Rodríguez explicó que, tras la sacudida, Estados Unidos vivirá un período de reacomodo para reactivar su economía.
El Presidente enfatizó que el país está preparado, tiene combustibles para sus necesidades y descartó que los precios varíen en las próximas semanas.
Condena
En una carta enviada al Gobierno de los Estados Unidos, Rodríguez manifestó el "más enérgico repudio" contra los atentados terroristas.
El gobernante dio sus declaraciones al regresar de una gira por la provincia de Guanacaste.
Diversos sectores políticos y sociales costarricenses también reaccionaron ante la tragedia.
El candidato presidencial socialcristiano, Abel Pacheco, externó su repudio a los actos terroristas de ayer.
"Elevamos una plegaria por las víctimas de estos atentados, extendemos nuestra solidaridad a sus familias y reafirmamos nuestros compromisos con la democracia, con los más nobles valores humanistas", expresó.
Su contendor liberacionista, Rolando Araya, condenó los hechos y se solidarizó con los familiares de las víctimas.
"Estamos seguros de que el pueblo estadounidense encontrará en los valores y principios que han inspirado su propia historia, la fuerza y la paz interior necesarias para sobreponerse a esta tragedia" dijo.
El arzobispo de San José, Román Arrieta, se mostró "profundamente consternado", expresó su dolor por la pérdida de vidas y llamó a los ticos para que oren por el fin de esa clase de actos.
Los partidos fuerza Democrática y Cambio 2000 se sumaron al repudio.