PEKIN (AFP) El español Rafael Nadal, con la seguridad de convertirse en el nuevo número uno mundial del tenis el próximo 18 de agosto, llegó el lunes entre una gran expectación a Pekín para disputar sus segundos Juegos Olímpicos, dispuesto a sumar otro título en una excepcional temporada.
El tenista español de 22 años, recibido por un enjambre de periodistas en el aeropuerto internacional de Pekín, afrontará la cita olímpica después de haberse garantizado ocupar el puesto más alto del ranking ATP dentro de dos semanas gracias a sus semifinales en el torneo de Cincinatti.
El zurdo mallorquín pone fin así a cuatro años de reinado de Roger Federer, culminando una temporada increíble en la que ha ganado siete títulos de la ATP, se ha coronado por cuarta vez consecutiva en Roland Garros y ha destronado al suizo en el ranking y en el césped de Wimbledon, hasta ahora su jardín privado.
Nadal llegó a Pekín procedente de Los Angeles, tras ser eliminado en semifinales en Cincinatti por el serbio Novak Djokovic. Pero, en virtud del sistema de puntuación de la ATP, se garantizó ser por primera vez número uno, después de que Federer cayera en tercera ronda ante el croata Ivo Karlovic.
Para el español, éstos son sus segundos Juegos Olímpicos. En Atenas-2004, con 18 años, falto de preparación, fue eliminado en primera ronda de dobles.
"Represento a mi país en los Juegos Olímpicos de Pekín, jugaré los partidos en la mejor forma que pueda", afirmó a su llegada.
Esta vez, viene dispuesto a conquistar el oro olímpico en el torneo que se disputará en la capital china del 10 al 17 de agosto en el momento justo, después de 235 semanas esperando pacientemente a que Federer diera un paso en falso para arrebatarle el cetro.
El tenista de Manacor ha alcanzado el punto álgido de su carrera. Después de haber sido el gran dominador en años anteriores en la tierra batida, esta temporada se ha mostrado capaz de ganar en todas las superficies, incluso al suizo Roger Federer.
"Esta es la primera vez que juego singles en unos Olímpicos, no tengo muchas expectativas. Disfrutaré el torneo", declaró a pesar de todo Nadal.
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