No, el siguiente artículo no trata de un carro de última generación ni de un grupo de música posmoderna. Solo intenta resumir en un término, según el discurso electoral, la visión de los candidatos a la presidencia. Y resulta que la dichosa letra P encabeza todos los términos. Así, la campaña de Laura Chinchilla es pasatiempista ; vale decir, deja que el tiempo pase y busca no correr el riesgo de un mensaje propio, mientras cruza los dedos para que nadie olvide su identificación con el gobierno de Arias. Ottón Solís opta por el enfoque pedagogista , dirigido sectorialmente y no escatima el detalle; de provocativa cabe denominar la actitud de Otto Guevara, quien arroja sus dardos contra los gobiernos que han sido y quieren seguir siendo. Luis Fishman adopta una versión pasatista de la vida: según él, la verdad de Costa Rica está en el pasado y de modo específico en los cuatro años que gobernó Calderón Fournier.
Esta lista nos ayuda a descubrir un elemento común en lo diverso: las cuatro formas de buscar el voto son posibilistas (quinta P). Posibilista es el que proclama que "la política es el arte de lo posible", cuando es un arte, sí, pero de la creación. Por aquí habría que darle vuelta a la propaganda, mis amigos, hoy tan caliente como un témpano.