L Yo 50 сі eu las SOLB3qnd sajosas y APRENDAMOS. com Asesoría técnica: Lic. JORGE MORA MAS SABON 500 Se dice que las tres supremas manifestaciones de fuerza en el mundo de los animales son: el golpe de la cola de una ballena, la coz de una jirafa y el zarpazo de un león. Este último no es el más corpulento de los camivoros, ni el mayor de los felinos; tampoco es el que alcanza en carrera más alta velocidad, ni el que presenta el aspecto más feroz.
Sin embargo, desde hace siglos, los hombres han considerado al león como el rey de los animales. quizá por su porte imponente, sin duda más noble y majestuoso que el del tigre, o tal vez, por haber sido el mayor felino de Europa.
DONDE VIVE. El león vive en Africa, donde se ha difundido al sur del desierto de Sahara, y, con pocos ejemplares, en las gargantas de los GRANDES CARNIVOROS PEPSI POR NEN DINERO!
LEON Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.
PEPSI Marca Registrada Atlas, Marruecos. Pero también habita, aunque en escaso número, en la Mesopotamia y en Irán, Asia. En la región de Catiavar, en la India, existe una subespecie de león asiático. en Europa? Ya no hay; pero hace 500 años el león vivía aún en Grecia, Albania, Yugoslavia y Bulgaria, según lo acreditan antiquísimas leyendas y relatos populares de todos esos países.
NO ES EL REY DE LA SELVA También se denomina al león el rey de la selva. pero en realidad no vive en la selva. No existe ni en el desierto ni en la selva de vegetación tupida; sólo vive en los bosques y en las sabanas: ese mar de hierbas amarillentas sobre las que se levantan, aquí y allá, grupos de árboles. Allí, con el color amarillo avellana de su piel, se confunde con las hierbas y los arbustos, y se vuelve casi del todo invisible.
COMO PASA EL DIA. El león es un animal de costumbres, y cambia la zona de su residencia sólo si se ve obligado por la falta de presas. Durante el día, los leones, reunidos en pequeños grupos (nunca más de cuatro o cinco. permanecen descansando entre las hierbas o a la sombra de algún árbol: dormitan, bostezan ruidosamente, se estiran y miran en torno con indolencia. Los graciosísimos cachorros juegan con una piedra, una rama, o mordisquean la cola de sus LA LEONA AFRICANA progenitores, que los dejan hacer bonachonamente.
DURANTE LA NOCHE. Cuando comienza a caer la noche, este cuadro pacifico cambia y se inicia la tragedia, la lucha cruel por la existencia.
Mientras el cielo comienza a ponerse rojo en el horizonte, el león da señales de inquietud: se pone de pie, husmea el aire con el hocico levantado y emite roncos rugidos. Ha llegado la hora en que los herbívoros salen de la espesura y se dirigen a los pastos o a beber en sus habituales abrevaderos. Esta es la hora de la caza.
En el más completo silencio, el león se dispone a errar entre las hierbas o los matorrales, en los límites entre el bosque y la selva densa, a lo largo de los cursos de agua o de los pozos.
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