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18 LA REPUBLICA. Lunes de julio de 1985 EDITORIAL PENTAGRAMA El tumor de Codesa es tan maligno, tan rematadamente malo, que nadie se atreve a intervenirlo quirúrgicamente.
Emergencias Esto hace que la Corporación sea un vivo. que está casi muerto. sus boqueadas son más dramáticas desde que cortaron el cordón umbilical que la unía al Banco Central, y a través del cual pasaba el plasma de varios millones, de manera fluida, para revitalizar el cuerpo codesiano, ya con anemia aguda.
Las cosas han llegado al punto en que los médicos soslayan hasta la posibilidad de la diagnosis.
Todos se contentan con decir que padece un mal muy grave. y nada más.
Ante un cuadro así de patético y así de oscuro, el Gobierno de la república ha hecho desesperados intentos por encontrar algún resucitador que levante a la Corporación, para que camine como en un nuevo milagro de Lázaro.
y Pero el resucitador no aparece.
la ciudadanía vive con estupefacción, desde hace varios meses, el sucesivo descubrimiento de hechos delictivos que van señalando la dimensión escandalosa a que ha llegado la corrupción en el pais. Este angustiante fenómeno pareciera haber explotado a partir del famoso negocio de las vagonetas, todavía encuadrado en la duda y la falta de resolución, seguido por una sucesión de fraudes y malversaciones que culminaron con el increíble affair de los recursos de la Ley de Emergencias, cuyo monto todavía no ha podido estimarse adecuadamente pero que se presume excede el centener de millones de colones; mientras tanto se estuvo ventilando el negocio millonario de una arrocera, que involucró también a exfuncionarios públicos y hoy nos habla la prensa de un desfalco de quince millones de colones en el Banco Anglo, preparado por gato casero y en el cual colaboran dos aparentes clientes.
Estos pocos ejemplos no son algo esporádico ni circunstancial sino que están señalando la podredumbre interna de las instituciones, que va descubriéndose sucesivamente algunas veces por mera casualidad, otras por la diligencia de la Organización de Investigación Judicial y otras por motivaciones de carácter político, en relación con la lucha electoral que vive el país.
Con pesadumbre e indignación la ciudadanía observa, juzga y demanda acción efectiva contra los responsables y sanción ejemplarizante, que muchas veces por condescendencia y paños tibios o por mero interés politiquero, nunca llega. Son los delincuentes de cuello blanco.
Contrastamos esta situación que revela el precipitado descenso de la moral pública, con la tragedia que viven los productores de banano y de maíz de la zona atlántica, con motivo del huracán que arrasó recientemente sus plantaciones y piden, con angustia y desesperación, la ayuda crediticia de los bancos para hacer frente al problema y recuperar sus niveles de producción. Los bananeros hablan de la pega en el Banco Nacional, de su demanda de crédito por escasos cincuenta millones de colones y los maiceros se quejan de que ni siquiera se les ha tomado en cuenta al evaluar la ayuda que necesitan para resembrar las tierras afectadas por ese fenómeno.
El Banco Nacional rechazó las gestiones de los bananeros con fundamento en consideraciones técnicas y procedimentales que deben estar bien fundamentadas y no entramos a analizar. Pero nos preguntamos ¿cómo es posible que ante la destrucción y pérdida de todos sus esfuerzos por fenómenos de la naturaleza, que no tienen manera de prevenir y evitar, los agricultores se vean en dificultades para obtener la asistencia financiera que las circunstancias exigen. No es para atender y resolver problemas de ese tipo que se creó la Ley de Emergencias? Por qué a los ganaderos el Gobierno ha ofrecido toda su ayuda para sacarlos de la difícil situación en que se encuentran, a pesar de que en términos de colones y de esfuerzo esta necesidad supera centenares de veces el pequeño problema que quieren resolver los bananeros y los productores de maíz. Cuando se conocen los caminos por los que se han ido los recursos del Fondo de Emergencias, tenemos que preguntar de nuevo si zno fue específicamente con motivo de los problemas provocados por fenómenos de la naturaleza en la zona de Pérez Zeledón, que se promulgó esa ley. Tenemos que decir con todo el énfasis necesario, que nos solidarizamos con los bananeros y los maiceros, como lo estamos con todos los productores del campo, cuando su esfuerzo ha sido destruido por causas totalmente fuera de su control, en el sentido de que tiene que haber un mecanismo directo, ágil y suficiente para pagarles su trabajo, no simplemente darles crédito, de manera que puedan no sólo reactivar su unidad productiva sino también, con toda justicia, mantener los niveles de consumo y bienestar que el productor y su familia merecen. Tres preguntas dejamos planteadas al efecto. no funciona es estos casos el seguro de cosechas? y ¿no se ha avanzado en la idea de crear un fondo de reserva, pagado por los productores mismos, para atender situaciones de emergencia y de malas cosechas? Es que no deу jaron nada los que cometieron desfalco y malversación de los fondos de la Ley de Emergencias, para atender los problemas de los productores de banano y de maíz. El último que se había mencionado era la AID, pero ya vimos que la AID, según uno de sus directores, no quiere en este momento andar resucitando muertos.
Ni siquiera les ha ofrecido a los de Codesa, un simple aparato de oxigeno para que la angustia de la asfixia no sea tan grande.
AID dice que su misión es ayudar en el desarrollo, pero que no quiere nada con los cementerios de instituciones públicas que parece van a construirse dentro de poco en el país.
Clinicamente, pues, Codesa es un cadáver. sólo en la febril actividad e hiperoptimismo del Gobierno de Monge, se le quiere seguir dando tratamiento de persona viva.
La República Publicado por Editorial La Razón, POR SUERTE LA DEUDA EXTERNA DEL TERCER MUNDO ESTA BAJANDO ¿QUÉ FE?
CREO QUE SOLO HAN VISTO LA PARTE EXTERNA DE LA DEUDA EXTERNA Director Vicepresidente: Lic. Joaquín Vargas Gené Vicepresidente Ejecutivo: Eugenio Pignataro Pacheco DEUDA EXTERNA Subdirector: Yehudi Monestel Gerente Administrativo: Luis Guillermo Holst Quirós May Jefe de Redacción: Luis Cartín Sánchez Gerente de Mercadeo: Omar Jiménez Jefe de Circulación: Nogui Schmidt Navarro AMÉRICA LATINA labor Central telefónica: Publicidad: 22 92 15 23 02 66 22 28 14 Cobro de 23 00 76 23 06 44 Publicidad: 21 04 29 23 04 37 23 06 96 Apartado: 2130 Telex: 2538 23 05 60 Circulación: 23 88 85 23 00 22 ACREEDORES IMPRESO POR TREJOS HNOS. SUCS Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.
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