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NUMERACION FILOSOFIA FILOSOFAR El juicio El raciocinio Es afirmar o negar un concepto respecto de otro, para obtener un enunciado (configuración de las cosas. Por tanto, los juicios son verdaderos o falsos; no hay otra alternativa.
Clases de juicios: No es una historia de conquistas brillantes, hechos heroicos o nobles sacrificios.
Es una historia de exploraciones a tientas y renuencia a admitir la luz, de tropiezos en la oscuridad y descubrimientos por casualidad. Es una historia repleta de oscurantismo y prejuicio, donde lo justo se vio eclipsado a menudo por al apego a la tradición, la razón subordinada por mucho tiempo a la rutina. En fin, es una historia humana. Number, the language of science, Tobías Dantzig) Juicios evidentes: los axiomas o primeros principios del pensar humano; por ejemplo: el todo es mayor que cualquiera de sus partes; una cosa existente no puede no existir al mismo tiempo, etc.
Hay juicios afirmativos y negativos; juicios universales y particulares, etc.
Este documento es propiedad Kant clasificó los juicios en. Los juicios analíticos: cuando lo enunciado por el predicado ya está incluido en el sujeto; el juicio en este caso resulta ser un mero análisis explícito del sujeto.
Por ejemplo: todo cuerpo es extenso, los metales son pesados; todas las definiciones; y, como a lo afirmado por un juicio analítico se puede llegar siempre por simple reflexión mental, se llaman tambien juicios a priori. Los juicios sintéticos: en estos juicios el predicado añade alguna cualidad nueva al sujeto; dichas cualidades no pertenecen necesariamente al sujeto; por ejemplo: el sol se esconde tras de una nube: este estudiante sabe mucho de filosofía, etc.
Esta clase de juicios es a posteriori. porque por medio de la experiencia sensible hay que demostrar que la nueva cualidad realmente pertenece al sujeto.
Es una serie de conceptos que se deducen unos de otros y que permiten llegar a una conclusión: Idemostración a silogismo. El silogismo es deducción: consta de premisas y una conclusión (tanto la conclusión como las premisas son enunciados. Deducción es la manera o método (habla pensante yendo a lo largo de un camino de pensamiento que nos da una conclusión desde unas premisas. La verdad lógica (validez)
de la conclusión depende exclusivamente de que haya sido deducida correctamente. Para esto se aplica el siguiente principio: si dos factores lenunciados) son iguales a un tercero, entonces son iguales también entre sí; y al contrario: si de dos factores uno difiere con otro tercero, también difieren entre si.
En el acto de deducir la conclusión, la verdad de las premisas no entra en juego; una de dos: o han sido obtenidas partiendo de otras premisas, o han sido postuladas como axiomas (es decir, como enunciados no demostrados. Es indispensable que en el silogismo se tomen todos los términos en el mismo sentido; si una premisa es negativa, la conclusión lo será también; si una premisa es una proposición (afirmación o negación) particular, lo será también la conclusión.
Además de dos premisas negativas o de valor par ticular no se puede concluir nada.
Tenemos el siguiente esquema: 1) Una proposición de valor afirmativa y universal a 2) Una proposición de valor universal y negativa e Cuando hacemos una excursión a algún lugar desconocido, con frecuencia nos encontramos bellezas naturales que nos invitan a degtenernos para contemplarlas más y mejor, opara admirar su colorido o su enormidad, o su perfección en los detalles. En tales casos, puede sorprendernos el que los vecinos del lugar spasen inadvertidas esas maravillas; en efecto, están tan acostumbrados a ellas, que no se darán cuenta de las mismas hasta que no las echen de menos, ya sea porque desaparezcan, so porque visiten otros lugares donde no las haya.
El hombre genio primitivo que se ingenio los primeros símbolos para representar los números de su aritmética rudimentaria, se habría pasmado de admiración si le hubiera sido posible conocer el sistema de numerales usados por el hombre de hoy, pero nosotros estamos tan acostumbrados a él, que no advertimos sus ventajas, su sencillez, su comodidad, su elegancia y sobre todo, su fuerza. Tan acostumbrados estamos a nuestro sistema de numeración, a contar con él, a representar los números en el lenguaje y en la escritura como cosas naturales, que nos es difícil imaginarlos como realización del hombre. Nuestro sistema actual de numeración es enormemente más fácil de aprender y de manejar, que los sistemas usados por los pueblos de la antigüedad; la historia de los números es un reflejo de la historia de las Matemáticas; es la historia de los esfuerzos del ingenio humano para inventar artificios y sistemas que le permitan realizar su trabajo mejor, más rápidamente y con menos esfuerzo.
Para comprender mejor nuestro sistema actual, conviene, pues, prescindir de él por el momento, y concentrar nuestra atención en otro sistema; podremos notar así, que algunas propiedades que conocemos de los númros, son independientes de los símbolos que se utilizan para representarlos y que, por el contrario, otras reglas que utilizamos en nuestros numerales, no valen en otros sistemas, pues no son propiedades de los números, sino de los símbolos que se usan para representarlos.
Con tal objeto, supongamos que no disponemos de un sistema de numeración para contar las muchas bolitas que hay en un montón, y decidimos construir un sistema que nos lo permita. Nos ayudará mucho imaginarnos que vivimos en la Era de Piedra, con los hombres primitivos, y que compartimos su problema de averiguar si se ha perdido o no una de las reses de su rebaño; ese hombre primitivo no sabe contar, y en ese sentido es comparable a un niño de pocos meses o un año. En efecto, para un niño sólo existen tres números: uno, dos y muchos. Aún hoy, para ciertos pueblos primitivos del Africa y Australia, sólo existen esos tres números. Si un niño juega con varias bolitas y le sustraemos disimuladamente una por una, no se dará cuenta de la sustracción mientras tenga tres o más; para él, siempre tendrá muchas bolitas. pero protestará con llanto cuando le quedan dos o una, pues el número de bolitas que le quedan está en el campo de su sentido intuitivo del número. medida que crece, el niño va adquiriendo la noción de números mayores, sobre todo cuando empieza a asociar objetos con cada uno de los dedos de su mano; sin embargo, esa noción de número no está asociada con palabras que lo representen; ese es un refinamiento que vendrá mucho después y, en efecto, debió pasar mucho tiempo antes de que el hombre primitivo comenzara a asociar palabras con números.
Cuando el hombre primitivo necesito contar el número de sus reses, para saber si faltaba alguna de su rebaño, nos lo imaginamos separando piedrecitas por cada res que pasaba; sabía que tenía tantas reses como piedrecitas en su mano, y si alguien le preguntaba cuántas reses tenía, lo más que podría hacer era mostrar su montón de piedrecitas. Más adelante aprendería a hacer cortes o marcas en la corteza de un árbol en vez de usar piedrecitas: estos signos escritos constituyen los primeros numerales usados por el hombre, que aún siguen usándose en nuestros días; en efecto. cómo contamos los votos en una elección hecha en la clase? Supongamos que se va a elegir el alumno más simpático de la clase, alguien vota por Juan: escribimos su nombre en el pizarrón y una raya a su lado; otro vota por PeIr naditas CON LIMON SAL Tosty TO LA REPUBLICA. Lunes 22 de julio de 1985 25. una explosion de sabor! Cowo

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