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you LAR REPUBLICA. Lunes 30 de diciembre de 1985 OPINION La reforestación. un trauma El boom de la privatización Dr. Walter Coto Molina ctualmente, no hay en Costa Rica, una idea que revele más la decadencia en la imaginación de ciertos sectores socioeconómicos y políticos del país, que se presumen importantes, como la llamada idea de la privatización. La fijación, casi patológica, de privatizar todo para aspirar a la solución de los problemas nacionales, es tan decepcionante, como la de aquellos que buscan estatizar todo con los mismos propósitos. Unos y otros son simplistas y en el análisis de nuestra realidad.
por intereses creados y esperados, propagan la idea, utilizando la misma, como una marca de comercio, a fin de estremecer primero, y de acabar después con las instituciones del sector público, las cuales ciertamente en muchos casos no funcionan como debieran, pero que no necesariamente lo harían mejor, si fuesen privadas. El boom es tan estridente, que muchos costarricenses, cada vez que una empresa pública funciona deficientemente, le aplican con marcado automatismo, la necesidad de convertirla al sector privado. Realizan así, erróneamente, a contrario sensu, exactamente el mismo procedimiento de aquellos, que cada vez que ven una empresa privada funcionando mal, buscan su estatización o su publización.
La existencia del boom es perniciosa pues está encapotando peligrosamente mentes lúcidas de costarricenses que empiezan a ver ingenuamente en la privatización una panaceza. que хорон en los uliza, de ntaja HicioVictor Hugo Zúñiga Quesada e una tema de la reforestación, desde Ya es hora que en nuestro país alguien hace varios años, ha sido motivo se interese y sin hablar mucho ponga en de discusión: sobre él se habla práctica un programa de reforestación e viene mucho pero se hace muy poco. industrialización de la madera. Así como rmael productor de café siembra su café, deumar Los medios de comunicación le dedi ben existir en nuestro país muchos protodos can espacios, las escuelas y colegios lo to ductores de madera.
man como tema de estudio. Por esta razón quizá se ha convertido en un Al paso que vamos dentro de unos po trauma. Los habitantes de las ciudacos años estaremos importando toda la des visitan los viveros para comprar árboucias madera que consumimos.
Tes maderables, que siembran en el patio cinde su casa, en el solar, en las zonas veradria No creemos que nuestros bosques son des a orillas de las calles, en los patios y eternos, ya están por extinguirse.
zonas verdes de escuelas y colegios, en los parques, etc.
Busquemos especies apropiadas y sembremos muchos árboles o arbustos en En muchas ocasiones se siembran con las ciudades, a orillas de las calles, adorerzos gran ceremonia (Día del Arbol. otras ve. nemos nuestras zonas verdes, llenemos litos ces con motivo de alguna conmemora este país de árboles, pero busquemos el timoción.
sitio adecuado para no tener que luchar las. luego contra ellos.
Resulta que al pasar cinco o más años, aquellos árboles benditos ahora son un cooperativas hacen esfuerzos en forma Sabemos que algunas instituciones o estorbo o un peligro. Sus hojas ayudan a aislada como es el caso de Coopemaderela oxidación del cinc de las casas, sus raano ros cooperativa de reforestación, insola mas al caer causan serios daños y ponen dustrialización y comercialización de la en peligro la vida de seres humanos.
iene madera del Pacífico Sur. pero ellos tiee en nen que luchar contra fuertes intereses y otal Entonces nos volvemos en contra de no reciben la ayuda necesaria de quienes ellos y les declaramos la guerra, esos ártienen el poder para hacerlo. También te.
boles deben derribarse y aparecen la motosierra y el hacha. Algunos que no son nemos algunos productores de madera afectados por el problema se oponen, pero no son suficientes.
pero al final siempre son derribados.
gro.
Los costarricenses optimistas esperaculo, mos que en un corto tiempo se impulsen La culpa no es del árbol, ni del que lo proyectos de reforestación en todo el país, sembro, al fin y al cabo lo hizo por motivo debidamente planeados y con la asistende su enfermedad.
cia técnica necesaria. do a En los últimos años, han estado corriendo por nuestro territorio vientos sistematizados. que afanosamente quieren privatizar hasta el aire, en aras de una eficiencia. que sigue siendo para muchos de los predicadores de esa corriente un mero concepto.
El impulso de fuerzas externas, en el desmantelamiento del sector público costarricense, está alienando a tal grado a importantes dirigentes gremiales, patronales y políticos del país, que éstos ya no son capaces de enfrentar la solución de los problemas, si no es con el estribillo fácil de la privatización.
Importantes grupos de poder, y de presión, se mueven en torno a la tesis de que si se privatizara lo público, Costa Rica estaría mejor. Prácticamente se afirma que la empresa privada es la salvación nacional y que las administraciones públicas deben ser privatizadas para mejorar sus servicios. Algunos por convicción ideológica, y muchos enNo es mi interés presentar aquí mi punto de vista sobre el fondo del fenómeno que señalo. Quizá se me ocurra hacerlo en una próxima oportunidad.
Por ahora mi preocupación se centra sólo en el fenómeno, el cual me parece dañino a la originalidad y especificidad que reclama el análisis de nuestra realidad y la solución de los problemas del país.
Mi modesta percepción es que nuestra patria no será salvada, ni por un estado omnipresente, ni por una empresa privada omnipotente.
erapoliLic. Roger Bravo Alvarez LomerirBanderas, símbolos y representante OS. Sunlos caro a el transcurso de los acontecimientos históricos de que ha sido objeto la humanidad, a través del teatro que por escenario ha tenido su historia, encontramos en ellos un hilo conductor que como símbolo distintivo ha caracterizado el valor y el sentimiento de un grupo, de una persona o de una nación ante el resto de la humanidad, la Bandera, símbolo e hilo que indica el ropaje con que se viste el valor, el prestigio y el coraje de un pueblo, que asimismo se siente orgulloso de mirar su representante de sangre y de espíritu, aún vitable en la comunidad internacion y de allí que partamos nosotros para dar inicio a este breve comentario.
Costa Rica una vez que se inició como República dio origen a los símbolos patrios que iban a caracterizar y a enseñarle al mundo la vitalidad y la existencia de una Nación independiente y libre, cuya historia democrática iba luego a caracterizarse como luz en la obscuridad. Pues bien tan grande y tan hondo es el sentir del costarricense hacia la bandera y los símbolos patrios que algunos años atrás se creó el Monumento a la Bandera, que actualmente yace ubicado en barrio Betania, como un reflejo del honor, del respeto y de la libertad del costarricense; de tal forma que si esa es la causa de creación de un monumento a nuestra bandera, por respeto al costarricense, lo mínimo que debe hacerse como gobernante en cualesquiera de sus modalidades administrativas, es mantener nítido y decoroso el campo en que yace el espíritu del costarricense, inmerso en su bandera, y ni que decirlo de la bandera misma, máxime si se escucha a los representantes del gobierno mismo, cuando en forma continua se refieren no sólo a nuestra ideosincrasia, democracia y libertad, sino que también el civismo que caracteriza y debe demostrar el costarricense en la época en que con orgullo y sentir patrio se entonan y vitorean las notas y símbolos de nuestro pueblo; de tal forma, que contrario a las frases e impulsos del gobierno en esta materia, sería el concebir un monumento sucio y descuidado como reflejo del orgullo y la vitalidad de una Nación.
Pues bien, el gobierno de Costa Rica rricense hacia su bandera que es la que siempre hondea por él como su represencon indiferencia se ha mantenido ajeno al tante de espíritu y de sangre; de qué hovalor y a la trascendencia que implica la nor, de qué historia, de qué libertad y de bandera costarricense y, sobre todo, ajequé ideosincrasia nos puede hablar alno a la opinión del extranjero con relación guien que no respeta el manto que nos al respeto que tiene el costarricense hacia distingue ante la humanidad.
su bandera; no puede ser posible que el En realidad son interrogantes que nos Monumento a la Bandera se trate de un corresponden a cada uno de nosotros reslugar descuidado lleno de papeles y hier ponder como costarricenses ante la evibas, sin pintar y hasta mal construido y dente realidad y situación en que se enaún lo que es más grave, que una bandera cuentra nuestro Monumento la en pedazos que, más que un símbolo pa Bandera, son interrogantes que debemos trio, parece un trapo deshilachado y desresponder tomando en cuenta el sentiteñido, que resguarda el mástil del agua, miento hacia nuestras tradiciones culturasea la bandera del Estado costarricense.
les e históricas, y sobre todo interrogantes que se responden con apego a nuestra Qué respeto pueden generar nuestras fu condición de ser costarricenses, de ser turas generaciones hacia el desarrollo panacionales de un país del que nos sentitriótico; qué honor pueden guardar nuesmos orgullosos de pertenecer.
tros abuelos de sus luchas y de su patria; qué amor nacionalista podemos inculcar y Costa Rica, y me refiero a la Nación, mantener nosotros como costarricenses; no debe permitir que el símbolo patrio se o qué derecho y condición cívicos tienen mire como cualquier paisaje que se ve los representantes del gobierto para pe desde lo alto de una montaña, al contradirle al costarricense para que defienda rio, el símbolo patrio debe verse siempre su soberanía, o por qué no decirlo con qué de abajo hacia arriba, porque es la única derecho nos habla el gobierno de violacio forma de mantener flameantes el respeto nes al territorio, o a la soberanía costarri y el orgullo de nuestra bandera como recense, si ni siquiera puede fomentar y presentante internacional de nuestra Na mantener el respeto y el amor del costa ción.
Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.
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