10A Miércoles 27 de enero, 1999 OPINION LA REPUBLICA Editorial LA REPUBLICA Crisis en partidos FUNDADA EN 1950 PUBLICADA POR EDITORIAL LA RAZON, MIEMBRO DEL GRUPO HOLLINGER DIRECTORA Ivonne Jiménez PRESIDENTE EJECUTIVO JEFE DE REDACCION Franklin Solis Fred Blaser SUBEDITOR NACIONAL Mario Bermúdez TESORERA EJECUTIVA EDITOR DE ECONOMIA Wilmer Murillo Rosemary Engels EDITORA DE INACTUALES Carmen Juncos JEFE DE CIRCULACION JEFE DE DISEÑO José Luis Cojal Marco Alvarado.
LA REPUBLICA en Internet http: www. larepublica. co. cr Apartado 2130 1000 Central telefónica 223 0266 257 0411 Fax redacción 255 3950 Oficina San José 221 5196 COLUMNA DE LA DIRECTORA El poder a la imaginación En materia de democracia representati apatía de los miembros de la asamblea, en va, la reciente elección en Venezuela del co el mismo momento en que el líder histórico ronel Hugo Chávez, como un símbolo con de esa organización, el ex presidente Caldetestatario frente al status quo tradicional, rón, aspira a ser electo Secretario General nos debe dejar más de una lección.
de la OEA?
Los partidos políticos tradicionales no ¿No es esto delicado y a la vez síntoma son eternos, ni sus líderes y dirigentes es de una enfermedad que pareciera estarse tán consagrados en el corazón y la mente del apoderando de esa colectividad política?
pueblo. en las tiendas verdiblancas podemos El pueblo venezolano votó contundente inferir conclusiones similares. Los recieny mayoritariamente por quien le represen tes movimientos de dirigentes, encaminató una opción frente al sistema bipartidista dos a conseguir que algún ex presidente en crisis, lo que es sinónimo de decir que aceptara ser postulado a la presidencia del votó frente a las promesas largamente in partido, dejaron entrever fuertes contradiccumplidas, frente a la concentración del po ciones entre sectores, principalmente en der político y económico, ahíto de la extre torno a las figuras de los ex mandatarios ma pobreza, de la fuerte corrupción en la Monge y Figueres, cuyas diferencias laceclase política, de la demagogia y el cliente ran las entrañas de Liberación Nacional.
lismo. Todo ello sin importar siquiera que ¿No está esto expresando contradiccioel líder que emergía frente al bipartidismo nes que van más allá de diferencias normatradicional, hubiese participado alguna vez les en la vida de un partido político?
como cabecilla de una asonada militar fren Si ahondamos un poco más, tras la sute al gobierno del ex presidente Carlos An perficie pareciera que se produce en ambas drés Pérez.
colectividades políticas, el síntoma de una El que no quiera ver en todo ello, pese a crisis de liderazgo que a su vez pudiera ser las evidentes diferencias culturales, históri expresión de crisis aún mayores y más gracas y políticas entre Costa Rica y Venezue ves.
la, síntomas de una descomposición políti. Hasta qué punto el PUSC Liberación ca que está presente también en nuestro me Nacional están viendo debilitarse algunas dio, hunde la cabeza en la arena como el de las funciones que les han sido muy proavestruz.
pias, tal como la de haber servido como coNo deseamos hacer extrapolaciones an rreas de transmisión de la voluntad poputojadizas, pero preguntémonos. No tiene lar?
acaso, el aspirante a la secretaría general Quiera Dios que no sea así, pero como del PÚSC, el dirigente Carlos Palma, apro por la víspera se saca el día, los dirigentes ximadamente un año sin poder ser ratifica de ambos partidos, harían bien en hundir el do por la asamblea de ese partido político a escalpelo, y hacer una disección un poco esa posición?
más a fondo de sus estructuras, antes de que ¿No se produce la ausencia de quórum sea demasiado tarde. Al fin y al cabo, amen la asamblea del PUSC, que dirigentes bos partidos han sido expresión, en parte, connotados de dicho partido atribuyen a de la democracia electoral costarricense.
Había sido una semana dificil.
Yo intentaba recuperarme esa mañana de sábado, desayunando despacio y serenamente, para rescatar la sensación de ser una persona y no un meteorito empujado a toda velocidad por enormes prisas y fuerzas externas.
Entonces los vi. Apenas se alzaban del sue lo unos centímetros. Probablemente ni medio metro.
Sus vocecillas agudas aumentaban de volumen rápidamente. Se acercaban. DivertiIVONNE JIMENEZ dos, felices, ajenos a mi presencia tras el ventanal de la sala, porque desde su poca altura yo era demasiado distante.
Eran tres. Resolvieron que mi árbol. el que planté con mis propias manos frente a la casa y está frondoso con sus ramas creciendo en plena libertad, como a mí me gusta era un bosque.
Ahí empezaron las sonrisas.
Ramas secas que habían caído a la acera se convirtieron de pronto en temibles espadas que blandían contra enemigos invisibles.
Las hojas acumuladas en la tierra fueron alfombra para diminutos pasos reales, que transitaban por palacios cuyos lujos yo no logré ver.
Desfilaron cantando y marchando como enanos de cuento: y resabios, supongo, de algún vídeo de Blancanieves recién disfrutado.
Ya para entonces lo mío eran carcajadas, mirándolos a hurtadillas.
Al fin había podido reírme. Ya me reía hasta de mi propia seriedad, del peso de mis preocupaciones y angustias, y gozaba con los disparates y ocurrencias de mis pequeños vecinos. Cacon envidia observaba su despreocupada alegría y su inocencia infinita.
Sin embargo, presa de mi complejo de adulta, estuve a punde sentir lástima por su enorme fragilidad, por la pequeñez inaudita de su mundo, por el diminuto desarrollo de sus peque ñas vidas.
Fue cuando me di cuenta del error.
No, no. Su mundo era mucho más grande que el mío, a me nos de 50 centímetros del suelo esos tres niños eran capaces de bajar cualquier galaxia hasta sus manos, podían colgar una estrella fugaz de la más débil rama de mi árbol. Su mundo no te nía límites ni fronteras, carecía de complejos frente a lo que es posible. o es la realidad. términos que atan y disminuyen las posibilidades de la mayoría.
Con el poder de su imaginación ellos eran creadores, convocaban cualquier energía, construían de inmediato cualquier territorio, fabricaban cualquier futuro, rescataban lo que nece sitaran de cualquier pasado. Pequeñísimos gigantes!
Cómo me gustaría pensé entonces que mi país pudiera usar así su propia imaginación, su propia creatividad, que administrara tan naturalmente su singular potencial.
Me acordé de Singapur, titán de escasos kilómetros; recordé el reciente estira y afloja económico con México; y sin ir muy lejos, pensé en la osada y persistente capacidad de trabajo de El Salvador.
No es una cuestión de tamaño.
Aunque parece a veces que ni nuestros empresarios ni nuestros gobernantes lo perciben.
Cómo quisiera que ninguno de nosotros, individualmente ni ésta, mi propia tierra, desperdiciara ese poder maravilloso de la imaginación que tan genial y alegremente usaban los wegindario Apuntes LIBERALIZACIÓN DE LA LECHE.
PORRAS 99 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.