Lunes 11 de setiembre de 1995 LA REPUBLICA 3B Campo Pagado COMUNICADO DE LOS ESTIBADORES LIMONENSES LA OPINION PUBLICA raíz de la decisión gubernamental de abrir el mercado de la carga y descarga en los muelles de Limón a nuevas empresas, nos está tocando vivir un clima de efervescencia e inestabilidad, cuyo grado de presión se deja sentir en todas las áreas de nuestro quehacer comunal.
Hemos visto como el despliegue masivo de información y de desinformación está distorsionando la verdadera imagen del trabajador portuario limonense.
Como parte involucrada y ampliamente afectada en esta crisis y por el respeto que nos merece la comunidad nacional, deseamos expresar nuestro punto de vista sobre la situación.
De nuestros inicios En los años 60 el trabajo en los muelles se realizaba bajo condiciones muy difíciles: largas jornadas, salarios bajos, la carga movilizada en hombros, sin horario para comidas, esperando de madrugada el atraque de un vapor sin percibir remuneración por ello, sin garantías sociales y sin estabilidad laboral. La gran apertura económica de Costa Rica al mundo se sustenta en la labor callada y tesonera de un puñado de hombres en los muelles de Limón y con dolor recordamos a aquellos que dieron todavía algo más, su propia vida.
No es sino hasta los últimos meses de esa década cuando se inicia para muchos de nosotros una verdadera estabilidad laboral, misma que se ha mantenido por ya casi 26 años.
Los años 70 ven nacer un movimiento laboral que busca equiparar sus pocas garantías sociales con las del resto del país. Siempre apegados al marco legal de nuestro ordenamiento jurídico, se conformó un sindicato de empleados que habría de velar por la dignificación del estibador limonense.
Hemos disfrutado del mismo derecho que los trabajadores del resto del país a pactar una Convención Colectiva con el patrono y, con el Ministerio de Trabajo como intermediario, asegurarnos así mejores condiciones laborales.
En un país de derecho como en el que vivimos, todas las conquistas de que gozamos se han pactado legalmente y con una clara visión social.
Orgullosos nos sentimos al haber alcanzado un Fondo de Pensiones que brinda descanso físico y ayuda económica a aquellos empleados que por su edad no pueden continuar en los muelles y aún no alcanzan la pensión de la Además, son más cada día los trabajadores que están materializando su deseo de tener casa propia gracias al Fondo de Vivienda que ha logrado construir una urbanización digna para nosotros.
Los últimos 20 años podemos resumirlos en una ardua y constante labor y una merecida superación gremial.
De nuestra actualidad En los muelles de Limón se laboran los días de la semana, bajo el ardiente sol del mediodía o de la fría y lluviosa madrugada. El desgaste que genera un horario mixto, los grandes embarques y la irregularidad del trabajo en los muelles no debe pasar desapercibido. Si bien la tecnología actual ha facilitado las labores portuarias y los logros sociales del gremio nos brirdan mayor comodidad, la labor no ha dejado de ser por ello menos peligrosa o extenuante.
Sin una capacitación formal, hemos tenido que aprender sobre la marcha el uso de nuevas maquinarias, en muelles que difícilmente han aumentado su extensión en los últimos años, el incremento de movilización de carga nos viene a significar nuevos retos.
Con valentía y tesón, muchos de nosotros llevamos hasta 20 y más años forjándonos en las lides portuarias. Algunos han estado con nosotros y no han resistido.
y y Nosotros hemos formado la empresa y hemos ubicado a Limón entre los primeros puertos en eficiencia a nivel latinoamericano. Esa eficiencia somos nosotros. De ninguna manera estamos en contra de que se realicen modificaciones técnicas o que se modernicen más aún los procesos portuarios, nuestra preocupación es que bajo las condiciones actuales no hay suficiente trabajo para que todos los empleados devenguen un salario digno, por consiguiente con nuevas empresas en los muelles el acceso al trabajo puede disminuir más aún, con la consecuencia lógica de menos ingresos para nuestras familias.
Mucho lamentamos que hayan personas que consideren que el empleado portuario común dispone de privilegios más allá de lo que merece.
La realidad es otra. Las garantías con que contamos han sido obtenidas dentro de lo legal y son claramente compensatorias del tipo de labor que realizamos.
No puede hablarse de que el aumento en nuestros salarios está encareciendo los costos de operación de las agencias navieras, pues si comparamos con 10, 15 20 años atrás y usamos como parámetro el dólar, se verá que no es así. Los aumentos que obtenemos son los de ley.
De nuestro futuro Estamos plenamente conscientes de la difícil situación por la que atraviesa nuestro país, fruto ello de malos manejos que han hecho los dirigentes públicos y privados en las últimas dos décadas. Asimismo tenemos claro que como costarricenses hemos de brindar nuestro granito de arena en la solución.
Podemos eliminar por voluntad propia algunos de esos logros que tanto tiempo y esfuerzo nos han costado. Podemos pactar con quien corresponda nuestro aporte al arreglo de este país.
Es claro, sí, que existen aspectos que son del todo no negociables, pues el costo para obtenerlos ha sido tan alto que no puede ni debe derribarse de la noche a la mañana.
Con la misma voluntad con que nos disponemos a colaborar en la solución del problema, manifestamos nuestra férrea determinación de luchar por aquellas conquistas que son intocables para nosotros.
Ante la crisis actual que vive Limón, nosotros seguimos trabajando. pesar de la crisis que agobia al país, nosotros seguimos produciendo.
Ante lo incierto y sombrío del panorama futuro, nosotros nos mantenemos vigilantes y dispuestos a luchar a toda costa por la dignidad del estibador limonense.
Firma Responsable: Oscar Cook Fonseca Cédula 041 505 Este documento e Sistema Nacional erio de Cultura y Juventua, Costa Rica.