La desinformación sobre los sectores opuestos a USA, igual que la comida chatarra, envenena. Calumnia para vender y no respeta la historia. Se acentúa, cuando habla de Cuba, tema con el que muchos han hecho «carrera política», amasado dólares con peroratas y escalado a «intelectuales». Una cosa es crear opinión y otra usar la «opinión» para difamar. Veámoslo en La Nación (4/1/04) El autor es Montaner, su «escritor» estrella, que habla de Cuba para atacarla; puede estar tratando de Japón y termina insultando a Fidel. Suele visitar Costa Rica y lo acoge su gente de derecha. Por este ‘respaldo’ presume de intelectual y demócrata. Pero nadie ha advertido que es agente de la CIA, unido al terrorismo de Miami.
Dictamina la salud de Fidel: «Parkinson,  obstrucción parcial de las coronarias, sinovitis crónica, pérdida alarmante de masa ósea, isquemias cerebrales». Luego insulta: «miseria geriátrica, viejo semiloquito y flaco, de habla lenta y estropajosa». Es la voz visceral de la ignorancia. Si eso fuera cierto, pues ¿quién habló en el 45 aniversario de la Revolución (3/1/04) generando reacciones positivas de la intelectualidad mundial? ¿Por qué dialogó 4 horas con 630 estudiantes y profesores de 234 universidades de USA del Programa en el Mar (21/1/04)? El «médico» se turbó al saber que los visitantes dijeron sentirse muy honrados por la reunión con Fidel. Si fuera una miseria geriátrica ¿por qué este mozo y sus socios terroristas se desvelan tanto por asesinarlo, y ya llevan más de 600 planes de atentados contra él?
Sobre los hechos de abril pasado, miente: «3 fueron fusiladas por robar un bote». Se les sancionó, por secuestrar una embarcación con 36 personas, entre ellos mujeres y niños, a quienes intentaron matar. No fueron ladroncitos, como insinúa. Atenuar esto solo es de habituados al terror es ignorar que el secuestro es un delito de terrorismo según la legislación internacional. Los 75 detenidos no eran pacíficos; estaban comprometidos con la subversión. Y esto es sancionado en cualquier país de derecho. Habla de Rivero como el «principal poeta de Cuba» ¡Novedad! Lo será para los que -como él-, ignoran las letras cubanas. A los otros mercenarios, los llama «demócratas, periodistas, escritores, bibliotecarios». Supuestamente eran 37 los periodistas, pero los que estudiaron alguna vez fueron solo 4. El «analista» omite que Cuba es un Estado de derecho y por eso a los enjuiciados se les aplicaron las leyes por dañar la soberanía cubana. El acusado Osvaldo Alfonso, declaró que habían sido utilizados en acciones a favor de USA, y admite que Montaner le envió dinero para esos fines. El libro «Los disidentes» no deja de perturbar a Montaner, porque aporta pruebas firmes del engaño y servilismo de esta gente; y son recurrentes los términos de dinero, egoísmo y ambición.
Este falaz calla: el financiamiento de más de 1.200 horas semanales de radio contra Cuba, el  envío de más de $22 millones para la subversión y los más de 2.000 presos en cárceles de USA a los que no se les conoce ni el nombre. Los traidores no tienen patria y él es uno de ellos, por eso también calla, la injusta reclusión de los 5 héroes cubanos que insertados en grupos terroristas de Miami, enviaban información a Cuba para evitar acciones que producirían muerte. ¿Escribirá de sus amigos fanáticos de Miami y la CIA, que llevan 45 años tratando de destruir el proyecto socialista con cientos de actos terroristas financiados por autoridades de USA? ¿Por qué La Nación publica las vilezas, ignorancias y extravíos de este servil terrorista? Sus escritos no tienen una mínima seriedad intelectual. ¿Por qué tanta infamia y odio contra Cuba?