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Apenas 15 días después de que había interpuesto una acusación contra los ambientalistas María Elena Fournier Solano y Freddy Pacheco León, el investigador estadounidense James Spotila –presidente de la Fundación The Leatherback Trust (TLT), conocido también como Fideicomiso Las Baulas-, desistió de la querella.
El investigador de la Universidad de Drexel –en Estados Unidos- acusó al biólogo de la Universidad Nacional –Pacheco León- y a la presidenta de la Asociación Conservacionista Yiski –Fournier Solano-, por supuesta difamación, injurias y calumnias.
Los delitos los habrían cometido al opinar sobre proyectos y actividades desarrolladas por el Fideicomiso Las Baulas, el cual recauda fondos para financiar expropiaciones en el Parque Nacional Marino Las Baulas, en Guanacaste.
Pacheco también fue demandado el año pasado por difamación en la prensa, por Mario Boza Loría, exviceministro de Ambiente y Energía y apoderado general de la organización The Leatherback Trust.
Boza Loría perdió el pasado 27 de marzo el juicio que había incoado contra Fournier Solano, a quien acusó de injurias, calumnias y difamación, por las opiniones en torno al proyecto de ley que promovía, “Servicio de Parques Nacionales S.A.”.
El reclamo contra ella fue por ¢200 millones, pero el Tribunal Primero Penal la absolvió de los cargos y condenó a Boza al pago de todas las costas del proceso.
Cuando se dio el mencionado fallo judicial, ya estaba en camino la acusación -con cargos similares- de Spotila contra Pacheco y Fournier, pues la ambientalista fue notificada una semana después.
Con términos muy parecidos a los que contempló la demanda ya resuelta de Boza contra Fournier, la querella de Spotila alegaba que “dentro del proceso asumido por TLT, la imagen, el prestigio y buen nombre de la organización, son vitales para lograr el cumplimiento de sus objetivos, imagen que el querellado (Pacheco) ha intentado manchar con el objeto de desvirtuar su proceso internacional de recolección de fondos y dar a entender que estamos bajo una campaña engañosa, y que somos una organización cuestionada enormemente”.
Según el presidente del Fideicomiso Las Baulas, con lo divulgado por ellos “han contribuido a la formación de una opinión pública de forma negativa” en su contra, y por esa razón reclamó ¢500 millones a cada uno.
Respecto del desistimiento por parte de Spotila, Freddy Pacheco aseguró que esto “no es más que un reconocimiento de que los hechos por los que se le acusaban no tenían fundamento alguno y más bien se trataba de una acción en contra de la libertad de expresión y libertad de prensa. Después de hacernos invertir recursos económicos, materiales y humanos para responder en cinco días hábiles las acusaciones, y de haber pasado varios días viviendo bajo el estrés inherente a este tipo de procesos penales, tranquilamente se retiran sin mayores explicaciones, como si nada hubiera sucedido”.
Todavía queda pendiente la realización de juicio que Boza interpuso contra Pacheco el año pasado en representación del Fideicomiso Las Baulas, del cual es vicepresidente; la fecha aún no ha sido fijado por el tribunal.
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