El Sol constituye la  fuente de energía más importante para nuestro planeta.  Se estima que el total de la energía solar que incide sobre la  tierra es aproximadamente 2000 veces mayor que el consumo actual  de energía de la población mundial.

Es claro que no toda esta enorme  energía es aprovechable para usos humanos;   sin embargo, es probable  que un porcentaje muy importante de esta pueda ser utilizado para generación eléctrica. En nuestro país, la determinación práctica de esa posibilidad de aprovechamiento, es una necesidad dentro de la planificación eléctrica nacional.
La energía solar es una fuente  renovable que está en franco  desarrollo en nivel mundial. En la actualidad se utilizan  dos sistemas  para  producción eléctrica : los sistemas fotovoltaicos, que usan celdas para la conversión de la energía solar en energía eléctrica y los sistemas solares termoeléctricos que convierten la energía solar en electricidad utilizando la concentración de la radiación y la incorporación de algún ciclo termodinámico convencional.
Considerando  el elevado crecimiento de la demanda eléctrica nacional, la gravedad de los problemas ambientales  producto de la quema de combustibles fósiles  y la política de nuestro país de utilizar preferiblemente fuentes renovables para generación eléctrica,   constituye un imperativo  nacional  identificar, estudiar y desarrollar en forma ordenada y sistémica,  fuentes  renovables y amigables con el ambiente, una de ellas, la energía solar.
Algunos esfuerzos se han realizado para estudiar la radiación solar en nuestro país; sin embargo, estos a lo sumo han llegado a determinar la  energía bruta aprovechable con dicho recurso.   Es necesario efectuar estudios de mayor detalle para definir el potencial neto aprovechable de nuestro país y de resultar atractivo este, en forma gradual ir abarcando niveles de mayor detalle en la planificación de proyectos específicos.
Se requiere entonces el establecimiento, por parte del ICE, de un proceso de planificación que permita un desarrollo óptimo y ordenado de la energía solar para generación eléctrica en nuestro país.  Este proceso debería plantearse  de lo general a lo particular, considerando inicialmente  la determinación de potenciales en energía solar y la zonificación o regionalización de estos, para posteriormente abarcar la planificación del  desarrollo de proyectos eléctricos específicos con esta fuente y eventualmente, de resultar atractivos,  su  construcción y operación.
Se presume la existencia de un potencial importante en nuestro país para el desarrollo de proyectos con energía solar para generación eléctrica. Es necesario explorar e investigar esta presunción sobre la base de un proceso de planificación claro y bien estructurado y que sea capaz de irse actualizando conforme se  mejore la información de radiación solar, evolucionen las tecnologías solares o se modifique el  uso del territorio nacional.
Las fuentes actuales como la hidroelectricidad no durarán por siempre. Es necesario  abandonar las visiones  hidro-centristas y de corto plazo y  explorar nuevas opciones,  la  energía solar puede ser el futuro.  Negar o despreciar  este potencial  y estas posibilidades es pretender tapar el sol con un dedo.