El 19 de julio del 2011 Daniel Ortega de Nicaragua, utilizando a Costa Rica para sus fines demagógicos sandinistas de campaña electoral, se dejó decir que la tierra fronteriza que invadió en Costa Rica debe ser administrada entre ambos países, como humedal que es de la humanidad. De su tribuna lanzó un mensaje de hermandad universal y oración divina a la Presidenta de Costa Rica. Quiere co-gobernar Costa Rica, quiere imponer sus dictados, por eso es dictador.
La Presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, ha sido enfática en decirle de frente al sátrapa Ortega, en la Cumbre Regional de Seguridad, llevada a cabo en Guatemala el 22 de de junio del 2011, que: – “No estamos dispuestos a admitir flagrantes violaciones a la soberanía de un Estado por parte de otro en nombre de la lucha contra el narcotráfico, como recientemente lo experimentó nuestro país”.
Si revisamos “curiosidades” de la información, uno de los pretextos nicas para invadir Costa Rica fue que esa era tierra de nadie, solo los nicas se preocupaban y ocupaban por combatir el narcotráfico en la zona, por eso entraban y salían de territorio tico cuando les venía en gana. Es harto evidente que Costa Rica nunca ha cuidado sus fronteras como es debido, y sus servicios de inteligencia fronterizos y transfronterizos son ineficientes o no existen del todo; de ahí la infiltración constante de nicas, incluidos sus servicios de espías y testaferros, entre los que cuentan ticos nacidos en Costa Rica.
El Diario Extra y el Canal 42 de televisión, en los peores momentos de la crisis de la invasión el 20 de octubre del 2010, estuvo informando públicamente hechos. Tomamos una breve referencia del editorial del jueves 27-01-2011: -“Se nos indica que la noche del 31 de diciembre el comandante Edén Pastora cruzó la frontera y estuvo en suelo nacional celebrando el año nuevo en compañía de su esposa, quien se ha mudado a vivir, en secreto, cerca del río San Juan  pero en territorio de Costa Rica. Contamos con grabaciones de comunicaciones internas del ejército sandinista y hasta videos que respaldan parte de estas informaciones”. Nadie ha desmentido eso.
El señor  Norman Caldera, en mayo del 2006, entonces Ministro de Exteriores de Nicaragua se quejaba y hacía grandes alharacas públicas a la prensa internacional, porque según él Costa Rica iba a militarizar la zona fronteriza con su país y que no esperaba un deterioro de las relaciones diplomáticas, pero que estarían vigilantes por el respeto a los derechos humanos de los inmigrantes nicas, eso sí, como es costumbre se le olvidó mencionar el casi millón de ilegales, indocumentados que no gozan de derechos humanos en su país, como son educación, vivienda, salud, trabajo digno y paga justa, y cero xenofobia nica contra Costa Rica.
Se refería a las declaraciones del entonces Ministro de Seguridad tico Fernando Berrocal cuando expresó que: – “Estamos simplemente constituyendo una policía de fronteras en el norte y en el sur, como es lógico y natural… la meta es que 300 policías entrenados vigilen asuntos como narcotráfico, migración y contrabando”.
Para variar, la idea de Berrocal no se puso en práctica, pues el gobierno tico abandonó toda inversión en materia de seguridad fronteriza y los cuatro gatos policías estaban en condiciones de trabajo deplorables.
¿Vamos a seguir en lo mismo? Se requiere invertir en el cuido de nuestras fronteras, con una policía específicamente entrenada y en condiciones de alojamiento modernas, salubres y sólidas para esas labores riesgosas. En un pasado bastante cercano el ejército sandinista ha secuestrado a policías ticos cuando han querido obtener un efecto de ojo por ojo, según su doctrina político-militar.
 
 
Si hay algo de admirar en los nicas es el excelente funcionamiento de sus redes de infiltración social en Costa Rica y del manejo de su propaganda populista.
 
No tenemos por qué seguir aguantando los tufos de Nicaragua. Y aunque nuestra casa está revuelta, podemos disentir, podemos expresarnos, podemos sentir aires de libertad que otros, filibusteros modernos, usan en contra nuestra.
 
De nosotros, solo de nosotros, dependerá cortarle alas a la traición y a la guerra sucia mediática con el concurso de socios afectos a un régimen familiar que quiere co-gobernar nuestro país.