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Una oportunidad sin precedentes se le presenta a Costa Rica al contar con cerca de $1.600 millones (¢800.000 millones) para invertir en carreteras. Existe preocupación de profesionales y empresarios, por la falta de capacidad institucional para gestionar los proyectos y las decisiones tomadas con más interés político que sustento técnico, que podrían dar al traste con el buen uso de los recursos.
Movidas en parte por esa preocupación, entidades de la comunidad técnica, académica y profesional agrupadas en el denominado Consenso por el Rescate de la Red Vial Nacional, identificaron tras un análisis técnico una lista de 19 proyectos que propondrán a las autoridades como las obras prioritarias que deben ser acometidas, por el impacto que pueden tener en el desempeño de la red vial nacional y la competitividad del país.
El grupo se reunió hace un año con la presidenta Laura Chinchilla, para presentarle un manifiesto con preocupaciones sobre el tema, y ofrecerle colaboración técnica para hallar soluciones. Desde entonces se ha mantenido en contacto con las autoridades del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) y en los próximos días presentará su propuesta.
El objetivo es que las autoridades gubernamentales cuenten con el criterio experto pertinente que sustente sus decisiones políticas. De esta manera, se esperan resultados más eficientes en la utilización de los recursos disponibles para la infraestructura.
Así lo explicaron la semana anterior, en una entrevista en Radio Universidad, Olman Vargas, director ejecutivo del Colegio Federado de Ingenieros y de Arquitectos (CFIA); José Manuel Sáenz, de la Asociación de Carreteras y Caminos; y Roy Barrantes, del Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales (LANAMME) de la Universidad de Costa Rica. De la iniciativa forman parte también la Cámara Costarricense de la Construcción, la Cámara de Consultores en Arquitectura e Ingeniería, y la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones de la Empresa Privada (UCCAEP).
Se trata de un esfuerzo conjunto de estas organizaciones, sensibilizadas ante la gravísima problemática que enfrenta la red vial nacional, que tiene un rezago de más de 30 años en que no se han hecho las inversiones necesarias, y ante el convencimiento de que las estructuras oficiales a través del MOPT y del Consejo Nacional de Vialidad (CONAVI) no tienen la fortaleza técnica para sacar adelante la tarea del rescate y la recuperación de la red vial nacional, dijo Vargas.
Por su lado, Barrantes señaló que parte de lo que los motiva para integrar el grupo es que el país está en una coyuntura muy importante, a la espera de adquirir cerca de $1.600 millones para invertir en carreteras, lo cual es histórico.
“Nunca antes en el país habíamos contado con tanto recurso con el objetivo de ser destinado a mejorar la infraestructura, y nos pareció muy importante conjuntar esfuerzos y apoyar a la Administración para que ese dinero se invierta de la mejor manera”, expresó.
Barrantes recordó que en una reciente estadística en materia de infraestructura Costa Rica bajó del puesto 111 al 131 en el mundo.
“Esto es alarmante y es motivado por esta situación que nos hace acercarnos al Gobierno a ofrecerle nuestro conocimiento, nuestro expertís y nuestra participación”. Esto dentro de una agenda que abarca desde objetivos de pequeño, mediano y largo plazo, “y así hemos venido trabajando tratando de buscar un consenso entre la parte técnica y la parte política”.
El académico comentó que Costa Rica tiene una de las redes más densas del mundo en términos del número de kilómetros de carretera por kilómetros de superficie, e incluso supera a Estados Unidos, que ocupa el lugar 54, mientras que el de Costa Rica es el 52.
Es la red vial más densa de Centroamérica, lo que significa que se tiene acceso por tierra a prácticamente cualquier lugar del país. Sin embargo, muchas de las carreteras son antiguas, construidas incluso hace más de 30 años y están obsoletas en cuanto a sus diseños, su capacidad, y superadas con una flota vehicular que ha crecido desorbitadamente.
“Es una red vial grande que debemos rescatar; de ahí el nombre de nuestro grupo que es para apoyar a la Administración, a fin de ir al rescate de esa red vial que en algún momento en los años 60 fue la mejor red vial de Latinoamérica”, subrayó.
RIESGO
José Manuel Sáenz destacó que ha sido motivante ver cómo han venido trabajando en el tema tanto la empresa privada, como el sector profesional representado por el CFIA y el sector académico representado por LANAMME, los cuales han coincidido en los criterios técnicos, “que es lo que ha faltado por muchos años en el MOPT”.
Se ve venir una serie de proyectos financiados, entre otros, por el Banco Interamericano de Desarrollo y el Banco Centroamericano de Integración Económica, pero hay una capacidad técnica limitada para manejarlos.
“Entonces hay un riesgo grande de tener los recursos y no tener cómo administrarlos, porque a la hora de construir aparecen empresas constructoras que tienen la capacidad, la palanca financiera, la maquinaria y todo lo que se necesita, pero aquí el problema es cómo administramos estos recursos para que no sean mal invertidos”, apuntó Sáenz.
¿Dónde radica la traba y el riesgo de desaprovechar la oportunidad que tiene el país en el futuro inmediato?
Uno de los graves problemas –responde Olman Vargas- es la gestión, y hay que entender que debe haber un análisis sistémico para el desarrollo y orientación de la red vial, que lleve a la toma de decisiones sobre cuáles son los ejes viales que se quiere desarrollar, con qué parámetros, cuáles son los niveles que se desea que tengan, para qué deben estar construidos, rehabilitados o mejorados.
“Uno de los problemas que hemos tenido en el país es que hay decisiones que se han tomado con criterios eminentemente políticos, y no en el buen sentido de la palabra, sino politiqueros, y no se ha establecido de manera adecuada cuáles son las prioridades en función de ese análisis sistémico para tener esa red vial que necesitamos”, remarcó.
En el mismo sentido, Sáenz apuntó por su parte que para atender alguna necesidad de una comunidad “que tiene más galillo que otra”, se le da un proyecto, o para atender algún interés particular un proyecto se va para otro lado. Así, se empiezan a generar pequeños avances, pero sin ninguna coordinación, o dentro de un mismo corredor vial que necesita ser ampliado y mejorado se inicia ese mejoramiento en un tramo que no es principal, dejando para después otros tramos principales.
Entre otros ejemplos de este tipo de decisiones, se mencionó la ampliación iniciada en la carretera Interamericana norte en el tramo Cañas-Liberia, pues no se entiende por qué se empezó por ahí, si la prioridad en esa vía está entre Barranca y Limonal, que es el trayecto más congestionado, pues en el confluyen la ruta de Liberia y la de Nicoya por el puente del río Tempisque.
Otro ejemplo es el proyecto Sabalito-Mellizas, en la zona sur, donde se han invertido miles de millones de colones en un tramo que no tiene mayor impacto en la red vial estratégica del país.
La red vial nacional tiene 54.000 km de caminos pavimentados. Es la red estratégica del país, a su intervención está principalmente orientado el dinero de los préstamos.
Es obvio que lo más conveniente es que ese dinero se direccione a los principales corredores de esa red. “Creemos que desde Paso Canoas hasta Peñas Blancas y la unión de los puertos, desde el Atlántico hasta el Pacífico, son los cuatro ejes principales que deberíamos tener siempre presentes, en términos de competitividad” del país, dijo Barrantes.
El especialista mencionó los 19 proyectos viales que por su impacto en el funcionamiento de la red vial nacional, deben tener prioridad, según el análisis del Grupo de Consenso (ver recuadro “Proyectos prioritarios”).
Proyectos prioritarios
San José-San Ramón
Bernardo Soto-Sifón
Calle Blancos-El triángulo de la Solidaridad (anillo de circunvalación)
Varios pasos a desnivel
Pasos elevados
Jardines del Recuerdo-Puente del río Pirro
Barranca-Cañas (tramo carretera Interamericana)
Puente Juan Pablo II-Pozuelo
Estabilización río Virilla- Río Frío
Florencio del Castillo-Garantías Sociales
Chacarita-Río Claro
Río Claro- Paso Canoas
Ampliación a cuatro carriles del tramo Río Frío
Radial a Heredia
Santa Cecilia –Birmania
San José –Cartago
Diseño y estudio de Paraíso-Turrialba
Radial Atenas-Palmares
El nuevo acceso a Moín
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