Toda Sociedad tiene diversas necesidades, unas prioritarias otras no tanto; la lista puede variar de acuerdo a la “programación cultural” de la Sociedad como un todo, así como en los subgrupos, estos creados por la misma programación como por las capacidades individuales, entre ellas la educación y la monetaria para su sustento.
Siendo una Sociedad inteligente y robusta puede establecer las necesidades prioritarias que satisfagan a  todos los estratos que la componen y como parte de esto el identificar y valorar los recursos naturales y humanos propios, diagnosticar qué capacidad de sustento tienen para el país y con ello definir las reglas de juego adecuadas para su uso y ver qué será necesario intercambiar con otros países, para mantener el balance y asegurar la sostenibilidad del desarrollo para cada individuo, grupo y sector.
Es difícil encontrar que una región tenga todos los recursos naturales para sostenerse por sí misma, tal vez sean algunos renovables, pero que no sean suficientes, por lo que debe de crear una lista de usos prioritarios en la cual influyen los temas sociales, derechos humanos, económicos y financieros, política local, nacional e internacional, facilidad de explotación y posterior uso, mencionando algunos.
Con lo anterior la Sociedad define una estrategia para saber explotar los recursos naturales que tiene y satisfacer la demanda de ellos, o por otros que son escasos o no hay. Parte de esta estrategia usa la filosofía de que “otros hagan el gasto y asimilen los impactos”; un ejemplo es el “Agua Virtual”. Este término implica que este recurso se usa en actividades que le dan el mayor beneficio neto en diversos ejes y que para los otros usos se importa el producto y/o el servicio. Si la Sociedad ve que el producir alimento es un buen negocio y la disponibilidad de agua es limitada, los otros usos pasan a segundo o tercer plano o si hay otro uso que de mayor beneficio optan por importar el alimento.
 
 
La anterior aplica para cualquier recurso y su uso, la electricidad no escapa a ello; esta necesidad se ve satisfecha por diversos medios, unos con fuentes locales, otras importadas, unas en las que la fuente se puede administrar en cierto grado (geotermia, hidroeléctrica o térmicas) o en otras donde no se administra (eólica y solar).
La estrategia del Sector Eléctrico depende de la cantidad, calidad y facilidad de gestión de la fuente de energía; esta información define la planificación para observar en qué momento se alcanza el límite de existencia, de acuerdo a la creciente demanda de la Sociedad y buscar cómo satisfacerla. La estrategia y la planificación deben de considerar los potenciales conflictos entre los diversos usos del recurso y la Sociedad tener la valoración hecha de cuál es la prioridad para obtener el mayor beneficio neto en varios ejes. Claro, esto presupone que cada individuo, grupo y sector “entiende” y ha “asimilado” cómo manejar los impactos que se producirán por la toma de decisiones que van a realizar.
En el caso de generación eléctrica se puede acudir a la fuente “virtual” y es que las fuentes disponibles son para otros usos de mayor prioridad y la electricidad se importa desde otros países, esto bajo el esquema del “Mercado Eléctrico”, para buscar los precios más bajos y ellos  son las que asumen el impacto ambiental y social de desarrollar plantas de generación.
La filosofía tiene riesgos; uno es el de hacerse dependiente y estar sujetos a cambios súbitos y con justificaciones particulares para respaldarlo. Este fenómeno se ve fácilmente, por ejemplo en vista del beneficio económico un país del norte perdió de forma sorpresiva fuentes de empleo, ya que para el sector industrial fue más barato mudarse de dicho país a otro al sur. Lo que sucede ahora con el cierre de rutas aéreas al no tener una línea aérea local o lo que se da en otro país petrolero del sur, que se decidió por el oro negro y depende de importaciones para alimentarse.
A nivel de electricidad se debe buscar el balance entre el uso de las fuentes, las zonas donde están y los otros usos, de tal manera que se complementen y se dé un beneficio común.
Los tomadores de decisión sobre el uso de recursos deben de entender muy bien qué implica para los estratos y sectores de la Sociedad, así como estos deben de entender que ningún desarrollo es gratuito, hay costos de diversos tipos y está en el conocimiento y sabiduría encontrar el equilibrio para hacerlo sostenible, aunque tenga recursos limitados en su región. También se debe tener presente qué tanto “desea” depender de otros para “sostener” su propio desarrollo.