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La República Jueves de Setiembre de 1993 Gentes y Paisajes Un bellísimo rincón Un descanso en el Morazán EBAJO DE LA PLAZA DE la Cultura, decíamos, están los museos del Banco Central. Aquí se puede observar una riquísima colección de figuras de oro que fabricaron los aborígenes. También se ubica en este edificio subterráneo el Museo de Numismática, o sea el de la moneda, de la platica.
Un teatro muy viejito Camino al Morazán usted verá encerrado entre edificios modernos el teatro más viejo de San José (el Nacional se inauguró en 1897. o sea el Teatro Variedades. Allá por los años noventa, al comienzo, era el único teatro que había en San José. Parece ser que hasta corridas de toros (seguro novilladillas. hubo en este sitio, que hoy se dedica exclusivamente a la exhibición de películas. Bueno, siga hacia el norte, y entonces llegará al Parque Morazán, que fue remodelado recientemente, y la verdad es el rincón más grato de San José. Si quiere comerse un casado no le recomendamos entrar al Hotel Aurola Holliday, porque quién sabe si los venden; pero si lleva almuercito, pues siéntese a contemplar el entorno mientras engulle los gallitos.
El Templo de la Música Ese Templo de la Música, que es el quiosco que domina el Morazán, fue construido en 1920 y lo diseñó un arquitecto al que le decían Chisco (de Francisco) Salazar. Alfondo podrá ver un soberbio edificio de metal solo metalque fue importado de Bélgica en 1890. Si encuentra un poco incómodos los asientos, vea las fotos y acomódese y como pueda espalda con espalda es ideal, ya que acostarse es peligroso porque se lo puede llevar la policía municipal creyendo que está medio jumado. Este parque tenía una gran cantidad de placas, que ahora están alineadas cerca del Edificio Metálico (ya se robaron una. test2 Camino al Morazán, usted puede admirar entre edificios modernos el Teatro Variedades, el más antiguo de San José.
Tenga cuidado BIBLIOTECA TAINAL 12 Alca Ya se lo dijimos e ilustramos con un chiste, pero es bueno que le repitmos la advertencia: tenga cuidado, porque encontrar un policía en San José para que lo ayude a uno es como ver al Comenta Halley antes de cumplir su paseo espacial de 76 años. Pero no se asuste: a nosotros, por lo menos, jamás nos ha pasado un chasco. Sin embargo, a un ilustre vecino de este parque, nada menos que comandante en jefe de grandes ejércitos, y quien ostenta el título de El Libertador, o sea Simón Bolívar, le han robado en dos ocasiones la espada. Ahora el General está sin espada. No le ha ocurrido lo mismo a don Juan Vásquez de Coronado, quien se encuentra en una esquina del Parque Umaña o Parque de la Fábrica, pero es que Vásquez tiene una mirada de pocas pulgas aunque dice la historia que era bondadoso y, por lo que potis, tiene agarrada su espada con las dos manos. Porque conoce el adagio que dice que cuando las barbas del vecino veas rasurar, pon las tuyas a remojar.
Por ahora Por ahora los vamos a dejar aquí, en el Parque Morazán.
La otra semana si Dios quiere los llevaremos por otros lugares de este San José Alegre y Confiado (una columna con este título se publicaba en la prensa nacional hace unos cuarenta años; ahora, qué va, las cosas han cambiado. Los dejamos en el Morazán, un parque que se hizo donde antaño había una laguna. que honra la memoria de un hondureño que nos invadió en 1842, en abril, y fue nuestro Jefe de Estado desde dicho mes hasta setiembre siguiente En el recientemente remodelado Parque Moracuando fue fusilado. En Honduras nos hicieron una vez la zán, acomódese como mejor pueda en estos mosiguiente reflexión y no supimos qué contestar: Qué raro, dernos asientos, de manera que se de un desustedes nos fusilaron a Morazán y luego le hicieron un par cansito antes de seguir adelante en su recorrido que en su honor. hasta la vista, pues.
por San José.
El Parque Morazán es uno de los riincones más gratos de la capital. Sin embargo, tenga cuidado porque a Simón Bolívar le robaron la espada (y es la segunda vez que le pasa. pues la cosa demuestra que aun a los más ilustres personajes les pueden pasar vainas.
Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.

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