Debido a los elevados costos del mantenimiento de las imágenes, se ha restringido su acceso solo para las personas registradas en PrensaCR.
En caso de poseer una cuenta, hacer clic en “Iniciar sesión”, de lo contrario puede crear una en “Registrarse”.
El vapor llega por fin, y sale en seguida, y Ud. tal vez esté en camino; pero le escribo que al fin lo hallará. De mi inquietud aquí no tengo que hablarle. Cinco días inútiles después de que hube visto a los mensajeros de la colonia y a y Flor, de quienes me separé sin una sola duda ni lastimadura.
En Orotina so rencor, para bañar luego con sus preciosas sangres los gloriosos campos de batalla.
Obligado a quedarse en Puntarenas más tiempo del previsto, dada la tardanza del barco, Martí estima que esos cinco días. sin hacer nada efectivo por la independencia de Cuba, su obsesión, han sido inútiles.
Este juicio, entonces, no encierra desdén alguno hacia Puntarenas, ciudad que, al contrario, recibe elogios martianos, merecidos sin duda. De Puntarenas, cuanto cariño pueda Ud. imaginarse, nos festejaron con excepcionales atenciones, y no he sido inútil en estos días de paso. De cubanos y colombianos y costarricenses llevamos toda especie de gratas memorias: convites, visitas, servicios. Estuvimos en la ceremonia del vapor nuevo, y con mucho gusto se lo hubiera descrito a Pío Víquez, a no haber sido esta gran contrariedad del vapor, que me ha tenido las manos atadas.
a R Un genuino Apóstol belleza y paz de la comarca, la gente franca y acogedora, consiguieron que Martí se sintiese muy bien en Orotina y prolongara su estancia un día más. Así me lo explicaron.
Lo que está probado de manera inconcusa es que el tribuno durmió una noche, al menos, en la casa de Primo Vargas. Aunque la carta del 18 de junio a Maceo no cierra la posibilidad de esas dos noches en Orotina, los cinco días inútiles favorecen la tesis de que Martí pernoctó solamente el 12 de junio en Orotina y que el miércoles 13, ya en Puntarenas, verificó el encuentro reconciliador con José y Flor. Según se haga el cómputo de esos cinco días inútiles. también podría fijarse como fecha de su llegada a Orotina el 11. D Para conmemorar el cincuentenario de la muerte de José Martí (1945. se publicó el valioso folleto La patria es ara, no pedestal. gracias al empeño del esforzado pueblo orotinense.
En su discurso del 22 de setiembre de 1945, reconstruído en ese folleto, don Eduardo Pochet Lacoste cuenta que José Martí, cuando iba hacia Puntarenas. durmió en la casa de don Primo Vargas, la noche del 16 de junio de 1894, y que, al partir, dejó en el escritorio de don Primo las siguientes cuartillas.
Hablé acerca de estas cuartillas en Martí define a Costa Rica. Ancora. 15 de enero de 1989. En ellas, el iniciador del modernismo insta a nuestros pueblos a cultivar siempre el suelo, y a no dejarse deslumbrar por la riqueza minera ni por la industrial. Después de admirar las tierras de Primo y sentir la sencillez y cordialidad de nuestros campesinos, el poeta revolucionario juzga que la agricultura es indispensable para la agrícola Costa Rica.
Don Eduardo Pochet expresa que Martí durmió en casa de Primo la noche del 16 al 17 de junio. Ahora bien, de acuerdo con la carta del 18 de junio, Martí se hallaba en Puntarenas días antes del 17. Tampoco es cierto que permaneciera en territorio nacional hasta el 21 de junio, como creo haber leído en alguna parte.
El último párrafo de la mencionada epístola evidencia la partida: Se va el barco. Enrique Boix. Loynaz?
En otra misiva, fechada en Panamá el 22 de junio de 1894, le cuenta a Maceo que llegamos ayer, después de mi viaje desesperante: tres días de Puntarenas a Panamá.
Según información recabada últimamente, sobre todo entre parientes e intelectuales amigos, la insigne figura cubana llegó a Orotina el martes 12 y continuó el viaje hacia Puntarenas el 14, tempranito.
Durmió, pues, dos noches en la casona de Primo, mi bisabuelo. Era el inicio del invierno, estación de crecimiento y verdor. La frescura de las arboledas frutales, la atmósfera limpia y luminosa, la R En Puntarenas En el discurso del caballeroso don Eduardo Pochet Lacoste, hijo de un entrañable amigo de Martí, se halla un resumen de la histórica reunión de los tres patriotas cubanos en Puntarenas: Ni santo, ni superhombre exento de flaquezas. Pero Martí siempre estuvo dispuesto a descubrir todo lo que hay de bueno en los demás y fue constante su aspiración a lo más elevado.
Su vida y obra, ejemplares en su congruencia, pueden resumirse en un pensamiento digno de un genuino apóstol: sin sentido del altruismo, no existe auténtica moral; y sin esperanza, no puede darse una manera nueva de mirar el mundo y todo idealismo se viene al suelo.
Martí tiene sana y positiva mentalidad, y busca la armonía total consigo mismo y con el mundo; sabe, sin embargo, que el propósito revolucionario sin acción es mera pose y que el hombre renuncia al logro de su plenitud espiritual cuando renuncia al ejercicio de su soberanía sobre la Tierra. Reconoce el valor de las cosas terrestres y el papel estelar del ser humano en la búsqueda universal de un orden socioeconómico perfecto.
Tenaz militante del americanismo, promueve el acercamiento de los países ibéricos y los llama continuamente a la coincidencia unánime en las metas superiores, en los grandes ideales y en la moralidad de estirpe quijotesca, basada en la altura de miras y el espíritu solidario. Es un cuarto reducido. José Martí, Flor Crombet y José Maceo se encuentran allí reunidos. Se expone la causa del disgusto. y Martí. silencioso, transfigurado, saca de su pecho la hermosa bandera de Cuba con su Estrella Solitaria. extiendela entre ambos contrincantes. una lágrima sale de sus ojos, y como un murmullo se oye. Pobre Cuba. entonces aquellas almas fuertes, almas de héroes forjadas al ruido del cañón. rinden pleito homenaje a la Insignia Libertaria, únense ante ella en estrecho y fraternal abrazo y olvidan el odioу Carlos Luis 20tonoo LA RERUeuca. Domingo de Mazo de 19947 SECCION CULTURAL Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.
Este documento no posee notas.