Debido a los elevados costos del mantenimiento de las imágenes, se ha restringido su acceso solo para las personas registradas en PrensaCR.
En caso de poseer una cuenta, hacer clic en “Iniciar sesión”, de lo contrario puede crear una en “Registrarse”.
Suplemento Banco Nacional de Costa Rica. LA REPUBLICA. Jueves de abril de 1987 LA CONFESION NOTA: Por tratarse de temas relacionados con lo que ha sido la base de operación de las Juntas Rurales del Banco Nacional, el campesino trabajador y sufrido; publicamos estos versos escritos por María Mayela Padilla, oriunda de Tablazo de Acosta y por lo tanto, auténtica voz de las gentes de nuestro campo.
LA CARTA Hoy he tomao papel de carta.
Hoy te he escrebido, pansón de mi alma porque no puedo vivir sin su alma.
Afiguráte que ya ni duermo ni jarto nada, ni nada bebo porque sin verte no tengo calma.
No sé por qué te juistes, pansón, si yo te había dao el corazón ni más ni menos, enteritico; pero esta vida es un gran dolor y por más riata qu era mi amor no jue bastante pa vos, Chalito.
Hoy está todo tan triste, Chalo.
Por vos mi amor quedó a medio pabo abandonao en la soleda; se me ha hecho un nudo aquí en la garganta, ya los yigüirros casi ni cantan y el higuerón marchitao está.
Diaz ¿Te acordás, Chalo, ese higuerón?
Onde aquel día todo el pantalón de arriba a abajo se te rajó, y yo, así. con el rabo el ojo.
mientras ispiaba allá pa restrojo, como que ispiaba y como que no.
Lo quise tanto, Padrecito.
Usté no sabe lo que lo quise.
Jue allá en la Hacienda de los Montero en el Tablazo, onde aquel día, un martes era, conocí a Nacho.
Nacho Delgao.
Un hombre que he querío tanto, más que a los Santos, más que a Diosito, que me perdone usté Padrecito, que me perdone usté por la Virgen si eso es pecado. yo volaba más arriba que el gavilán, más arriba que los pericos; hasta las nubes, hasta la Luna pegaba brincos de estrella a estrella cuando ese Nacho allá en el río me Idecía cosas viendo las pozas llenas de espuma, viendo las piedras y las mariposas volando encima del Izacatal.
Yun día de tantos me llevó al cielo.
Era una tarde de esas bonitas Ide los veranos cuando los montes se ven risueños y las chicharras cantan en coro en lel cafetal.
Pero después se jue.
se jue por ahi.
por esos laos de Puriscal, y sus promesas y sus cariños se los llevó pa engañar a otra y para empujala en otro barrial.
Yora la gente me vuelve a ver como quien ve los basureros, como si juera pecao querer como yo quiero.
El es el bueno.
El es el santo.
El es el hombre y no pierde nada.
Yo soy la mujer y la mujer siempre es la mala.
Pero no crea usté Padrecito que a yo me pesa lo que he hecho, lo que me pesa es el corazón porque de tantas y tantas penas y ya no me cabe aentro del pecho.
Bueno, Padrecito, dígame usté la penitencia, pero no me diga que lo que yo hice no Idebí hacerlo.
Más mejor rece, rece bastante y pídale al cielo que perdone a Nacho y me perdone a yo por querelo.
Cuando me voy pa palo e pochote me acuerdo, Chalo, de aquel besote qui un dia los dimos de escondidillas; me acuerdo, Chalo, de sa trompita que la verda me sabía más rica que un bollo e pan con mantequilla.
Juntando café Con un tarrito e pinito y un saquillo en la otra mano, debajo de stos matones juntando grano por grano, vamos todas las muchachas de la Hacienda San Gerardo en busca del café seco que se ha quedao escondio entre las hojas del cerco.
como dice ese dicho que lo que no tiene dinga pos ha de tener mandinga.
les digo que este trabajo es otra calamida: tiene qu ir uno escarbando como las pujientas esas cuando andan buscando Imáis. Por qué no vuelves, Chalo adorao. No ves que yo te ocupo a mi lao para ser feliz oyéndote hablar?
Pa ver junticos salir la luna, pa no cambiame yo por ninguna cuando me vuelvas a mordisquiar. Ay! que dolor de cintura.
Marina, vo a recostame un ratico en ese tollo. Ah, carajas más inutil.
Arrenpújese a juntar.
arrempujese o li atoyo. Ay! Yo que soñaba con chacalines aunque salieroan como violines de jartar puro guineo y frijoles; y por las tardes ir la manada de la manita por la quebrada a trer garrobos y guapinoles.
Tengo rasguños y uñeros hasta pa tirar arriba, mientras un reguero e vagas hasta se untan carajadas pa tener las manos lindas.
Pero. diay. si queremen me quieren con manos feas y con los dedos rajaos.
Me quieren sea como sea. si no, que le pregunten al sobrino el mandador: dice que yo soy muy linda y que como yo nu hay dos, que los vamos a casar, que será un amor eterno y que. bueno, otras cosas que orita ya ni me acuerdo. qué le vamos a hacer?
Por ora habrá que seguir con la cintura quebrada, con la joroba a la espalda y las manos bien rajadas.
Pero, mejor me despido porque Marina mi hermana me llama pa ir a almorzar.
Adiós. Ah. si les güele feo es que ya meti los dedos onde les dije acuanta.
Ay, pero lo pior de todo es que va uno muy tranquilo escarbando aquí y allá, cuando siente es que ha metido las manos onde un baboso ha hecho una necesida. si nu hay agua, pos uno tiene qui ir todo humillao a tirase el almuercillo con los dedos embarraos.
En después ya cuando llaman pa medir el cafecillo va uno todo jorobao si acaso con un cuartillo.
Pos yo no creo que sea justo trabajar tuitico el dia pa ganase tan poquillo.
Ay, mis manos y mis dedos.
Triste vida de los pobres que pobres di una vez nacen, mientras unos vagamundos van ganando unos platales por estar haciendo qui hacen.
Ya ve, ayer si acabaron las cogidas de café, Ya me soñaba velos fajaos con el machete todos sudaos apiando monte en el cafetal; pero la vaina es que vos te juistes y me has dejado solita y triste y todos mis sueños sin su final.
pero uno que stan pelao tiene que seguir juntando, porque si no, pos se muere de frío, di hambre y de sé.
Lo que sí tiene final, Chalito, es esta carta que es como un grito que llevo aentro del corazón. si no vuelves por Dios te juro, de este tontera yo no me curo.
Aquí tu Moncha te dice adiós.
DATAGRAMA TODO EN MICROCOMPUTACION BC CR BANCO CENTRAL DE COSTA RICA ZENITH data systems Teléfono 33 71 33 Fax 33 32 50 Apdo. 636 San José Télex: 2911 DATAG.
Tel. 33 42 33 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.
Este documento no posee notas.