Debido a los elevados costos del mantenimiento de las imágenes, se ha restringido su acceso solo para las personas registradas en PrensaCR.
En caso de poseer una cuenta, hacer clic en “Iniciar sesión”, de lo contrario puede crear una en “Registrarse”.
LA REPUBLICA. Lunes de mayo de 1987 13 OPINION A película Pelotón. escrita y dirigida por Oliver Stone, veterano de la guerra de Vietnam, es una excelente pelicula desde el punto de vista estrictamente cinematográfico, pero no es una obra maestra. No lo es porque su contenido, su guión, no es perfecto; sin embargo, los marxistas han aclamado esta película por su crítica a la guerra de Vietnam, por su crítica a lo que llaman el imperialismo.
En realidad, el filme de Oliver Stone es muy ambiguo; no hace ningún análisis sobre la guerra de Vietnam: jamás se mencionan las causas del conflicto; no se habla de he.
chos o personajes históricos; no se analiza lo ideológico, lo geopolitico, lo estratégico solamente se analiza lo individual, lo personal, lo existencial y lo ético. En este sentido el filme se enmarca dentro de la tradición hollywoodense del héroe individual. El filme es en cierta forma autobiográfico, narra las experiencias de un joven recluta, antiguo estudiante universitario, que se enroló voluntariamente en la infantería para ir a luchar a Vietnam. Pelotón es la historia de un joven idealista que descubre los horrores de la guerra y que pierde su inocencia y se convierte en un duro combatiente como los demás.
Society for Cinema Studies Prof. Daniel Marranghello El antimilitarismo o antibelicismo del filme es muy discutible también; Pelotón está muy lejos de Sin novedad en el trente. un filme verdaderamente antibelicista, en el La interpretación marxista de Pelotón ciplinadas penalidades en la jungla de Filipinas, entrenándose como lo harían combatientes verdaderos antes de comenzar el rodaje.
Y, evidentemente, consiguió darle al filme un tono de veracidad muy grande.
Para los marxistas Pelotón es un filme que les viene de perlas, porque les sirve para denunciar la guera imperialista de los Estados Unidos contra los patriotas vietnamitas; sin embargo, el filme de Stone es muy ambiguo, ue si bien denuncia los crimenes cometidos por ciertos soldados estadounidenses contra la población vietnamita (el episodio presentado en el filme remite al caso de My Lai. a Stone le interesa, más que las víctimas vietnamitas, el daño que esos crímenes causan en el espíritu de los jóvenes soldados empujados por una guerra incomprensible a cometer atrocidades. El director y guionista explica, y en cierto modo justifica, esos hechos como consecuencia de los sufrimientos, la desesperación y el miedo de esos jóvenes soldados ante un enemigo retratado como un fantasma amenazante. Incluso, Oliver Stone presenta en el filme la camaraderia y el heroísmo de los soldados estadounidenses; como en la batalla final, en que Chris Taylor, el protagonista, actúa valientemente, enfrentándose decididamente al enemigo. Al final de la película el espectador se entera que la cinta está dedicada a los hombres que lucharon en Vietnam; entonces, cabe preguntarse. Es Pelotón una de nuncia de la guerra o un homenaje al heroismo inútil de los soldados que lucharon en Vietnam? La respuesta a mi juicio es que el filme es un homenaje al heroísmo inútil de esos soldados, que a su regreso a su patria fueron marginados y olvidados. Oliver Stone es un veterano de la guerra de Vietnam y su película es un ajuste de cuentas personal con su pasado y con su país. Por qué esta película ha tenido tanto éxito de público? Su éxito se debe, a mi juicio, a que se trata de un filme de aventuras bélicas de excelente calidad; la pelicula es espectacular, las escenas de combate son brillantes y realistas, el ritmo es ágil, la violencia no es cruda en exceso, hay una historia de luchas internas entre soldados buenos y soldados malos. en la que triunfan los buenos y el final es consolador: el joven Chris Taylor sale vivo de la terrible batalla final, algo muy inverosímil pero muy del agrado del público masivo. El guión de Stone combina hábilmente la acción, la tensión, el sentimentalismo, la violencia y la crítica a la guerra, de tal modo que el filme resulta atractivo para diferentes estratos de público, que interpretan a su modo el mensaje de la película.
Es un triunfo de la polisemia, como diría un semiótico. Pelotón no es una película portentosa, no es tampoco una obra maestra, es tan sólo una buena película, con un enfoque parcial de la guerra de Vietnam. Los guerrilleros comunistas y las tropas nordvietnamitas jamás aparecen como personajes; tampoco lo hacen las tropas sudvietnamitas; tal parece que la guerra de Vietnam, según se desprende del filme de Stone, fue una especie de guerra civil entre los mismos estadounidenses y aquí podría hablarse de metáfora: palomas por un lado y halcones por el otro; la incapacidad para ponerse de acuerdo en la estrategia que deberian adoptar en la guerra de Vietnam llevó a la derrota frente al enemigo comunista, tal podría ser la interpretación de la rivalidad entre los sargentos Barnes y Elias, que comandaban el pelotón del filme de Oliver Stone. Pero desde un punto de vista estrictamente realista esta parte de la historia es la más novelesca, la más inverosimil, la más fantasiosa, que se contradice con la supuesta calidad documental de Pelotón.
Se ha dicho que Pelotón es la mejor película sobre la guerra de Vietnam, que es la película definitiva sobre Vietnam, que es un documento escrito con sangre; todo no pasa de ser pura retórica; son afirmaciones falsas. Antes de Pelotón hubo otras películas mejores: El francotirador. de Michael Clmino, con Christopher Walker, Robert De Niro, John Savage y Meryl Streep, ganadora de Oscares en 1978; Los gritos del silencio. de Roland Joffe (1984. Regreso sin gloria. de Hal Ashby, con Jon Voigt Jane Fonda (1978. el documental Hearts and Minds. de Peter Davis, ganador del Oscar al mejor documental en 1975: El pelotón Anderson. de Pierre Schoendorffer (1966. Friendly Fire (Fuego amigo. filme para televisión interpretado por Carol Burnett y Ned Beaty (1976. y Vietnam: The Ten Thousand Day War (La guerra de los 10 mil días. documental para la televisión realizado por Peter Arnett y con la narración de Richard Basehat (1983. Es falso que una película como Pelotón aclare lo que pasó en Vietnam, tal como lo declaró el propio Oliver Stone; es falso que esta película diga cosas que hasta el presente ninguna película de cine o televisión de orgen norteamericano haya dicho; es falso que esta cinta sea un documento histórico; es falso que esta cinta sea la mejor película sobre la guerra de Vietnam. Todo esto lo dicen los que no estudian o no les interesa decir la verdad. Oliver Stone es un director competente pero no es un maestro del cine como Michael Cimino. La pelicula de Cimino. El francotirador. tenía mejores interpretaciones y cinematográficamente es superior a Pelotón. sin embargo la cinta de Cimino fue acusada de fascista y de racista. porque en una escena se mos traba a los soldados estadounidenses siendo torturados por los guerrilleros Vietcongs. obligados a jugar la ruleta rusa. El final de El francotirador. cuando entierran al compañero y luego canta God Bless America. es de un impacto emocional tremendo, desgarrador, patético. Nada de eso hay en Pelotón. cuyo elemento más interesante lo constituyen las cartas que envía el protagonista a su abuela, en las que expresa sus sentimientos sobre la guerra; pero Stone comete el error de no profundizar ese enfoque y presenta a 11 personajes más, con el fin de crear un microcosmos de la sociedad norteamericana en ese pelotón: está el teniente judío, los tres soldados negros, el soldado de origen irlandés, el soldado de origen latinoamericano, el solda do blanco sureño, etc. Pelotón. por otra parte, carece del equilibrio de una cinta como Los gritos del silencio. de Roland Joffe, que mostraba tanto los excesos de un lado (los bombardeos indiscriminados de los estadounidenses) como los crimenes del otro (la bárbara conducta de los guerrilleros Khmer Rojos de Camboya. Pelotón no habla de los 37 mil aldeanos y funcionarios sudvietnamitas ejecutados por el Vietcong. no habla tampoco de los atentados terroristas contra restaurantes frecuentados por soldados estadounidenses en Saigón; ni tampoco habla de las torturas de los guerrilleros comunistas contra los prisioneros estadounidenses. La guerra es barbarie y es ingenuo pensar que las atrocidades en Vietnam estuvieron sólo en un bando, por eso Pelotón es un filme incompleto, parcial, fragmentario, insuficiente. Sólo muestra una parte, una pequeñísima parte del conflicto del Sudeste Asiático; narra una historia muy personal, la del ex combatiente Oliver Stone; un marino, un aviador, un artillero, un oficial de alto rango, veteranos de Vietnam, tendrían otras historias que contar y los prisioneros que regresaron de las cárceles de Hanoi, también, tendrían una versión diferente de los hechos.
El cine crea una ilusión de realidad, pero no es real; el cine crea una ilusión de totalidad, pero en verdad sólo nos muestra un fragmento de totalidad; el cine nos narra una historia condensada, pero muchas cosas quedan por fuera; por eso hay que tener una actitud de escepticismo critico. De lo contrario el espectador puede ser engañado.
Oliver Stone, director y escritor de la pelicula Pelotón.
cual al final morían todos los soldados que se habían enrolado como voluntarios para luchar en la Primera Guerra Mundial, instigados por su profesor. Pelotón. al 30 de marzo de 1987, habia recaudado 100 millones de dólares en taquilla, y la compañía Hemdale. productora del filme, ya está preparando el guión para una segunda parte de este filme; la comercialidad del filme salta a la vista: el protagonista de Pelotón sobrevive, sale indemne, no pierde una pierna, ni un brazo, ni la vista, sale apenas con algunos rasguños; el sufrimiento, las heridas que lleva son de tipo espiritual, emocional o sicológico, nada más; pero aún así, el protagonista declara que su experiencia habrá de superarla y el filme termina con un mensaje optimista: a pesar de todas las tribulaciones el joven recluta sobrevivió, maduro y ahora ya es un hombre. La guerra es, en este caso, un rito de iniciación masculina; el joven recluta aprendió su lección, perdió su ingenuidad y su miedo y se convirtió en un rudo veterano, que no duda en hacerse justicia por su propia mano.
Oliver Stone contrató los servicios del ex capitán de la infantería de marina estadounidense Dale Dye; ultraderechista militante, editor de la revista SOLDIER OF FORTUNE. que según se dice sirve a la CIA para reclutar mercenarios, e instructor de los guerrilleros antisandinistas, Dale Dye no tuvo objeciones para colaborar en Pelotón. Incluso hace un pequeño papel en la cinta: es el oficial que pide a la aviación que bombardee su propia posición, ya invadida por los comunistas. Se afirma que durante el rodaje, Dye apodaba a Stone cariñosamente el bolchevique. El trabajo de Dale Dye consistió en cuidar la ambientación del filme desde la jerga de los soldados hasta el tipo de armas a emplear. Impuso, como parte de la preparación, que los actores viviesen dos semanas de disEste documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.
Este documento no posee notas.