Revista Dominical. LA REPUBLICA. Domingo 29 de noviembre de 1987 11 El hombre más rico del mundo El hombre más acaudalado del mundo remienda sus zapatos con tira de empalme, toma hasta la última fotografia en cada rollo de película y odia despilfarrar su dinero. homenaje ante la tumba de Pistola. Pistola Tsutsumi, que en una ocasión fue presidente de la Cámara Baja, dejó a sus hijos poderosas conexiones políticas. Aún hoy día, los principales estadistas del país se congregan en las canchas de golf de Yoshiaki. Cuando su madre, amante de Pistola murió en 1985, entre los que asistieron al funeral estaban, según se dice, el primer ministro Yasuhiro Nakasone y tres ex primeros ministros.
Tsutsumi se expresa mediante la fotografía de la naturaleza, montañas, flores, aves. Compila de sus mejores fotografías en un calendario que regala a 000 conocidos. Mi problema es la película. dijo Tsutsumi en una ocasión. SI me quedan tres o cuatro fotos, no puedo decidirme a desarrollar el rollo o esperar a terminarlo. En fin de cuentas, usualmente lo mando a desarrollar, pero luego de que me ha costado mucho trabajo decidirme.
En ocasiones, el millonario tira la casa per la ventana. Invita a sus amistades para disfrutar de lo mejor en comida y bebida que pueden ofrecer sus hoteles Príncipe, dice Nawa, aun cuando su propio paladar no puede discernir el sabor de un buen vino.
Por Marl Taketa gerentes del grupo Seibu, bajo órdenes de Yoshiaki, hacen un peregrinaje a Kamakura, una hora y media de Tokio, para rendir BC CR AVISO LOS EXPORTADORES DE CAFE MECANISMO PARA EL TRAMITE DE LICENCIAS DE EXPORTACION OSHIAKI TSUTSUMI sabe que el dinero, que es usado cuidadosamente, produce más dinero. En dos décadas convirtió una selecta colección de tierras compradas a principes empobrecidos en el mayor imperio de bienes raíces en Japón.
Su grupo Ferrocarriles Seibu cuenta con 27 canchas de golf, 25 pistas de esquí, 56 hoteles con más de 13. 000 habitaciones, varias líneas ferroviarias y uno de los principales estadios de béisbol. Las tierras, según un cálculo extraoficial, podrian sumar 150 kilómetros cuadrados, es decir el equivalente de una cuarta parte de la ciudad de Tokio.
Sin embargo, Tsutsumi, que ocasionalmente invita al Primer Ministro para sostener conversaciones informales o una ronda de golf, era prácticamente desconocido fuera de Japón hasta que la revista norteamericana Forbes divulgó que su caudal era de 21. 000 millones de dólares.
Tsutsumi dijo que estaba demasiado ocupado y que no podía dar entrevistas. Le repele hablar sobre sí mismo o su familia al tanto que un intimo amigo no sabe si los tres hijos que tiene son varones o hembras y ha ordenado a los voceros de sus empresas a no divulgar información sobre su persona.
Amigos y periodistas que lo conocen dicen que no asiste a fiestas, no colecciona piezas de arte y tiene poca inclinación hacia la cultura. Su residencia, de dos plantas en una zona exclusivísima de Tokio, es un rectángulo de ladrillos con un techo plano que casi choca con el de su vecino.
El hombre está obsesionado con lo frugal.
Tsutsumi dice que su fórmula para mantener a mis empleados viviendo cómodamente es la de expandir sus bienes cuando menos 10 por ciento anualmente.
Se traslada de un lado a otro en helicóptero, inspeccionando constantemente. Toma rápidamente decisiones respecto de sus empleados, ya para ascender a degradar en la escala ejecutiva y no tolera el despilfarro. Las toallas en sus hoteles son usadas un año extra, luego terminan en sus oficinas como trapos para el piso. Los trabajadores están aterrados. dice Taro Nawa, periodista y amigo de mucho tiempo. Si sus órdenes no son cumplidas con prontitud, habrá despidos.
Tsutsumi, de 53 años, es un esbelto hombre activo, que disfruta del esquí, en sus propias pistas. Ha auspiciado intercambio de hockey sobre hielo con países de Europa Oriental y es dueño de uno de los principales equipos de béisbol Nawa dice que Tsutsumi no entiende de béisbol pero sí de comercio. Compró al mediocre equipo de los Leones en 1979, inyectó una fuerte dosis de dinero para la contratación de peloteros y publicidad, construyó un nuevo estadio, seleccionó los concesionarios de alimento y hasta los lugares donde se construirían los baños, agregó una estación ferroviaria y dejó el resto al dirigente del equipo.
Desde entonces, los Leones de Seibu han ganado tres campeonatos.
Tsutsumi es el tercer hijo del ya fenecido Yasujiro Tsutsumi, cuyos amigos llamaban Pistola y cuya enorme energía apuntaló la estación de Seibu. Pistola logró dar forma a un imperio grano a grano en los difíciles años de la posguerra, sobre las tierras vendidas por principes que habían quedado tan pobres que ni los impuestos podían pagar. Tuvo siete hijos, uno de los cuales, según su amigo Kunio Kamibayashi, era legítimo.
Cuando Pistola murió en 1964, Seiji, su segundo hijo, heredó sus tiendas y las convirtió en el grupo de menudeo Seibu, Saison. Yoshiaki, su tercero, recibió las tierras.
Yoshiaki nunca olvidó el favor. Los El Banco Central de Costa Rica delega en el Instituto del Café de Costa Rica (ICAFE. la emisión, control y autorización de las licencias de exportación de café. La solicitud de licencia de exportación deberá ser firmada por el representante legal de la empresa exportadora o por la persona autorizada legalmente ante ICAFE. cada solicitud deberá adjuntarse la factura comercial firmada y jurada en original y copia al carbón. La emisión de licencias se hará, por el momento, en la fórmula TI Nº2A, en original y cinco copias, suministrada por el Banco Central hasta que ICAFE confeccione su propia fórmula. Cuando una licencia de exportación debe ser anulada, el exportador deberá devolver al ICAFE el original y las copias de la fórmula para su respectivo control. Todo exportador de café que se inicie en esta actividad, debe cumplir con los requisitos previos que para estos fines establece el Banco Central de Costa Rica. El control sobre liquidación de licencias, ingreso de divisas, ajustes a las cuentas de los exportadores y recaudación del impuesto de exportación.
corresponderá exclusivamente al Banco Central de Costa Rica. El Banco Central de Costa Rica podrá suspender este procedimiento, total o parcialmente, cuando así lo estime conveniente. La vigencia de este nuevo mecanismo será a partir del de diciembre de 1987.
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