20A La República Lunes 15 de Junio 1992 2900 Debate ACTUALIDAD Iniciamos la semana con dos temas de gran trascendencia. El primero se refiere a la recién pasada Cumbre de la Tierra y el ideal del desarrollo sostenible. El segundo revisa las relaciones entre México y nuestro país, a través de la historia, con ocación de la visita del presidente Salinas, días atrás. Mariana Lev JOYCE ZURCHER DE CARRILLO Filósofa Supervivencia 92 a tomado unos treinta años a la sociedad occidental, reconocer que los recursos naturales no son infinitos y La República Jorge Illa ellos se termina el ser humano.
Cuando los ecologistas hablaban hace veinte años de mantener los bosques, de proteger las tortugas verdes, de no conta ninar el aire, los empresarios consideraban que esta posición obedecía a una visión romántica acerca de la naturaleza, que se veía como algo que debía conservarse por razones éti.
cas o estéticas, ajenas a las necesidades materiales de los seres hu manos.
Desde luego, la belleza es un fin en sí mismo para el ser hu mano y vale la pena conservar lo bello; esto nadie lo duda, pe o ese no era realmente el meollo del asunto. No se compi ndía entonces que lo que los ecologistas querían decir era qi el ser humano es un ser natural entre los otros seres y cias, y que se sirve de la naturaleza para sobrevivir. Se alimnta de animales y plantas, necesita de los minerales, aun ha ta para la composición de su propio cuerpo, respira el geno procesado por los árboles. y, además, toda la producci económica y hasta el famoso PIB depende de la utili ición de los recursos naturales.
Hoy afortunadamente, cada vez somos más y más conci ites del problema. Sabemos que los recursos naturales no SC infinitos y que si no los tenemos perennemente a mano, no pr remos sobrevivir. Eso nos presenta el reto de utilizarlos si gastarlos, es decir, utilizarlos de manera que no se extinga para que siempre estén disponibles para nuestra descendencia. De eso ha tratado la conferencia de Rio de Janeiro.
Pero lo que ahí se ha discutido no ha sido de fácil consenso.
No ha sido tarea simple convencer a los jefes de Estado de los países industrializados, a que suscriban tratados que permitan la utilización sostenible de los recursos, cuando tales tratados ponen en peligro el lucro a corto plazo. Ni será nada fácil lograr que los que tienen el poder económico, y generalmente cuotas de poder político, comprendan que es mejor sacrificar un solo sus beneficios inmediatos, con el fin de lograr que estos se mantengan en el tiempo. sin embargo, el argumento económico parece tan sencillo: si se agotan los recursos me.
diante los que se produce la riqueza, no podrá seguirse produciendo riqueza en el futuro.
Pero aun cuando algo de esto entrara en la razón de los seres humanos, y en especial de aquellos que tienen el control y el poder, falta un gran paso para que se comprenda que de la misma manera en que necesitamos utilizar los recursos económicos sosteniblemente para sobrevivir, es preciso conformar relaciones humanas sostenibles con el mismo fin. Si no entendemos que los demás seres humanos son también nece sarios para nuestra propia supervivencia y perseveramos en nuestro deseo de dominar a los demás y utilizarlos para nuesу tro propio beneficio, terminaremos aniquilándonos todos.
Los nuevos aires liberales que azotan el mundo parecen traer el mensaje de sálvese quien pueda. de que la solidaridad con los demás es una idea romántica y, por lo tanto, innecesaria; de que la justicia bien entendida no consiste en otra cosa que velar por uno mismo y la susodicha libertad de y la persona; de que los recursos naturales y los beneficios que de ellos se derivan son de sus dueños y no de todas las criaturas de Dios. porta a mi. pareciera tan sencillo comprender que debemos de cambiar de rumbo si queremos sobrevivir. Bastaría echar una ojeadita a la historia para ver cómo independiente de si Marx ha sido leído o no los seres humanos sojuzgados y oprimidos se rebelan violentamente contra sus opresores, atacando a menudo sus hijos. bastaría leer un poquito la historia de los pueblos, para comprender cómo, en las sociedades en las que solo algunos gozan de la infraestructura necesaria para conservar la salud, terminan todos por morirse contagiados de las enfermedades, pues éstas no respetan valladares.
Lo que se necesita ahora es un poco de lucidez y racionalidad. Si realmente los poderosos buscan su propio beneficio y el toda Latinoamérica dieron la oportunidad a México de distinguirse como uno de sus más activos practicantes. Así, el político costarricense José Figueres, expulsado del país en 1942, encontró en México una tierra de asilo. Luego de la Guerra Civil de 1948, varios de los dirigentes del bando perdedor, como Manuel Mora Valverde y Carmen Lyra, y debieron asilarse en México. Igual camino siguió el propio ex presidente Rafael Angel Calderón Guardia, padre del actual Mandatario costarricense.
En el campo cultural, las relaciones han sido más importantes. Efectivamente, durante mucho tiempo, y, aunque esto ha disminuido un poco en los últimos años, estudiantes costarricenses realizaron estudios universitarios en México, en Arquitectura, en Historia, pero especialmente en Medicina. Este tipo de relaciones ha sido estimulado por los convenios de intercambio cultural que han propiciado la organización de viajes de profesores, de investigadores, de grupos teatrales y el otorgamiento de becas e intercambio de materiales didácticos.
En 1966, se produjo un giro importante en las relaciones entre México y Centroamérica. En enero de ese año, el presidente Gustavo Díaz Ordaz emprende una gira (la primera que realizaba un presidente mexicano) por el Istmo Centroamericano. Ese viaje, que podría considerarse como la primera gran manifestación oficial del interés mexicano en Centroamérica, marcó el inicio en una política general de acercamiento, fundamentalmente económico, promovida en buena medida por México, pero favorecida por los centroamericanos. Por ejemplo, el presidente costarricense Francisco Orlich expresó, en esa ocasión, el interés en que México se sumara al proceso integracionista centroamericano. Esta voluntad integracionista de los países centroamericanos favorecería el aumento de las JUAN RAFAEL QUESADA exportaciones e inversiones mexicanas hacia esos países, Historiador en el marco de organismos como la y la Desde 1979, cuando estallaron los movimientos de liberación nacional en varios países del área, México decidió actuar en Centroamérica. Pasó así, de una política caracterizada por la pasividad y el juridicismo a un activismo internacional, pues se percató de la importancia política estratégica de la región.
Con respecto de Costa Rica, desde los gobiernos de José Figueres (1970 1974) y de Daniel Oduber (1974 1978. se inia visita del presidente mexicano, Carlos Salinas de cia un período de madurez de la política internacional, que Gortari, a Costa Rica, tuvo como objetivo el que estos coincide con el estrechamiento de sus relaciones con México. Desde ese momento, las relaciones entre estos dos mediante el cual México se convertiría en el segundo mer países se han caracterizado por la concertación (1978 1982. cado de los productos costarricenses, después de Estados el desencuentro o confrontación (1982 1986) y desde este Unidos. Sin embargo, el distanciamiento, el desconocimien año hasta hoy, por el deshielo y de nuevo la concertación.
to de los mexicanos hacia Costa Rica, ha sido, hasta hace Un capítulo reciente de las relaciones entre México y poco tiempo, la característica. Será posible cambiar esta Costa Rica está representado por la reunión de Tuxtla herencia de la historia?
Gutiérrez, realizada en el mes de febrero de 1991. En esa Al término de la Primera Guerra Mundial y cuando ocasión, el presidente costarricense Rafael Angel Calderón Estados Unidos intervenía activamente en los asuntos Fournier suscribió siete convenios y más de cuarenta internos de Costa Rica, nuestro país y México acuerdos de cooperación en las áreas de salud, vivienda, establecieron relaciones bilaterales. Desde entonces, las transportes, comercio, ciencia y educación. Esa fue la y relaciones se han dado en los campos políticos, cultural y primera gestión de una nación Centroamericana, tendiente comercial. Debe señalarse, sin embargo, que hasta la déca a establecer un acuerdo bilateral de libre comercio con da antepasada, los países latinoamericanos en general, México. En relación con lo anterior, uno de los objetivos siguieron ocupando un lugar secundario en la política exte fundamentales consiste en la eliminación total de las barior mexicana. El comercio con la región nunca significó, a rreras no arancelarias, a más tardar el 31 de diciembre de excepción del período de la Segunda Guerra Mundial, más 1996. La visita del mandatario mexicano a Costa Rica ha del 12 de las exportaciones totales ni más del de las despertado una gran expectación en el Gobierno costarriimportaciones. En el caso de Costa Rica, hasta 1950 la ba cense y un sector de la prensa que ve con muy buenos ojos lanza comercial fue favorable, pero, a partir de esa fecha, la política neoliberal ejecutada por Salinas de Gortari.
lo ha sido para México. En el campo político, las relaciones Nosotros esperamos que esta visita haya sido la ocasión se redujeron a cuestiones de rutina, con excepción del asilo propicia para sentar las bases de un sistema de verdadera político, ya que las conmociones políticas ocurridas en cooperación, de equidad. Sería posible una hermandad México y Costa Rica: Una visión histórica una cumbre mundial en ese sentido, para discutir lo que está en juego?
de su descendencia, no tienen más remedio que comprender que, si no logran que la calidad de vida se generalice al reto de sus conciudadanos, pondrán en peligro, no solo la infraestructura social la paz necesaria para la producción de la riqueza sino también la supervivencia de sus hijos y nietos. Solo en el compromiso social puede lograrse el compromiso con la propia descendencia.
La idea de una comunidad socialmente sostenible parece tan simple. Nos tomará otros veinte años para que hagamos Las opiniones vertidas en los artículos de la página Debate son independientes de la línea editorial de este periódico y son responsabilidad exclusiva de sus autores.
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